La difícil vida del diputado
Dicen que ser diputado es un sacrificio. Un viacrucis legislativo lleno de desvelos, debates eternos y, claro, de “austeridad republicana”. Pero al parecer, la austeridad se tomó vacaciones antes que ellos, porque este diciembre la Cámara de Diputados se convirtió en pista de aterrizaje para Santa Claus… versión premium.
Nos cuentan que no solo los de Morena andan felices con sus regalitos navideños —una bolsita con más de 100 mil pesos y una flamante MacBook—, sino que los de oposición, tan críticos del régimen, tampoco se quedaron atrás. En el PRI, por ejemplo, el espíritu navideño trajo 90 mil pesos en efectivo y vales de despensa por 30 mil más. Porque, claro, ¿quién sobrevive con menos en estas fechas tan “difíciles”?
Y para no quedarse fuera del intercambio, PAN, MC, PT y PVEM también se sirvieron con la cuchara grande. Todos felices, sonrientes, y con la como sus nuevas computadoras o de plano por no usarla.
Así, con la panza llena, la cartera contenta y el deber cumplido (dirían ellos), los sacrificados legisladores se retiran a descansar. Volverán en febrero, porque legislar, ya tú sabes, cansa mucho.
La vida no es fácil… sobre todo cuando hay que decidir entre una MacBook Air o una Pro.
Con informacion: ELUNIVERSAL+/
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