En García,Nuevo Leon, donde los baches ya tienen código postal y los tránsitos compiten con los coyotes por el premio al más mañoso, dos agentes terminaron ayer esposados por querer su “navidad” adelantada: 40 mil pesos de mordida para dejar libre a un trailero.
Los protagonistas del “asalto con chaleco reflectante” son José Ángel y Axel Jair, una dupla que hizo su propia interpretación del Reglamento de Tránsito: “pásele con una mochada o le decomisamos hasta el claxon”. Todo ocurrió sobre la Avenida Lincoln, a la altura de Montenova, donde primero detuvieron al camión y luego intentaron detener la moral.
Pero el trailero, curtido en carreteras y colmillos largos, no cayó. Le marcó al mero mero de la empresa, que a su vez pidió refuerzos… y no precisamente de esos que exigen “para el café”. Al llegar los policías —de los buenos, por raro que suene— confirmaron la escena: los agentes queriendo convertir el pavimento en cajero automático.
Y así, la historia terminó como debía: con los cobradores de mordidas esposados y bajo resguardo de la Fiscalía.
El chisme corre entre transportistas, que ya habían denunciado el “impuesto fantasma” que los tránsitos del área metropolitana cobran con descaro. Según reportó EL NORTE, Monterrey, Apodaca, Guadalupe, Santa Catarina y Escobedo están llenos de “creativos de la extorsión”, pero García, al parecer, se llevó la estrellita de la semana.
En resumen: la mordida no siempre sale gratis, sobre todo cuando el tráiler que intentas ordñar viene con respaldo… y con ganas de hacer ruido.
Con informacion: ELNORTE/
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