«FUE RECIEN ELEGIDO»: HALLAN MUERTO con DISPARO en la CABEZA a JUEZ de CONTROL del CASO del EX-GOBERNADOR DUARTE en CHIHUAHUA»…y a vuelo de pájaro presumen «suicidio».

La muerte del juez de control Omar Felipe García Cano, hallado con un tiro en la cabeza en su casa de Hidalgo del Parral,en Chihuahua, huele a “caso cerrado” express en un país donde los expedientes incómodos suelen morirse antes que los acusados. Y en medio de todo, los criminales –de dentro y de fuera del sistema– siguen dando cátedra de impunidad, mientras el discurso oficial se refugia en la palabra mágica: suicidio.

Lo que pasó (y lo que incomoda)

• El juez Omar Felipe García Cano, de 38 años, apareció muerto con un disparo en la cabeza en un domicilio de la colonia Haciendas del Parque, en Hidalgo del Parral, la madrugada del 20 de diciembre.
• La versión institucional: se investiga como posible suicidio, se aseguró una pistola calibre .380 y el cuerpo fue enviado al Servicio Médico Forense para necropsia.
• Detalle nada menor: tenía menos de tres meses en el cargo de juez de control del Distrito Judicial Morelos, tras ganar en las elecciones judiciales de julio.

El juez que tocó nervios

• No era cualquier togado: encabezaba la causa penal contra el exgobernador César Duarte, por asociación delictuosa y peculado, un expediente con años de colmillos políticos encajados.
• El Poder Judicial de Chihuahua y la Fiscalía salieron a lamentar su muerte, aplaudir su trayectoria y recordar que fue director de Asuntos Internos y coordinador de ministerios públicos en la zona sur.
• Hasta antes de morir, tenía en sus manos el auto de apertura a juicio oral contra Duarte y había pedido información a FGR y a un juez federal sobre el cumplimiento de medidas cautelares.

La narrativa oficial vs. la realidad sangrienta

• Sobre el papel, todo sigue el libreto: reporte al 9-1-1, despliegue policial, cadena de custodia, investigación en curso, “no se descarta ninguna línea”.
• Fuera del boletín, el contexto es otro: en México se siguen acumulando asesinatos en Navidad, con al menos 42 personas ejecutadas en vísperas y durante Nochebuena, y Chihuahua encabezando la lista.
• Pero se insiste en tratar la muerte de un juez clave como incidente aislado, como si los balazos supieran de coincidencias y no de mensajes.

Criminales sin freno, sistema sin pudor

• El crimen organizado ya ni se toma la molestia de ocultar que puede tocar jueces, fiscales y gobernadores como si moviera fichas de ajedrez en oferta.
• El poder político responde con condolencias solemnes y promesas de esclarecimiento que rara vez llegan a algo más que un párrafo olvidado en el archivo.
• Entre tanto, cada muerte “bajo investigación” manda un recado claro a cualquier funcionario que piense tomarse en serio la justicia: más vale cuidar la cabeza, porque el gatillo no tiene límite ni paciencia.

Con informacion: ELUNIVERSAL/