Un taxista y tres pasajeros,entre ellos una niña que salieron de Nuevo Laredo rumbo a Ciudad Acuña se esfumaron en la ruta controlada por Zetas del Cartel del Noreste (CDN) el pasado 23 de diciembre.
Pero mientras el gobernador,tambien aliado de estos criminaleZ que le compartían su abogado como asesor nos sigue recetando abrazos, placebos y comunicados, la Comisión de Búsqueda emitio fichas para la mujer de 35 años, su hermano de 18 y la niña de 4,aunque olvidó al taxista que los llevó, como si el chofer fuera desechable y el servicio “incluyera” desaparición de cortesía.
No es descuido, es método: si no se emite ficha de todos, la cifra se estira menos, el Excel luce más sano y el doctor puede seguir diciendo que el paciente –Tamaulipas– solo tiene “ligeros malestares”.
Favores viejos, rutas nuevas
En esa misma franja fronteriza ya hubo antecedentes: cuando Americo estaba recien desempacado y a cierto alcalde incómodo lo “levantaron”, apareció de pronto la mano milagrosa del asesor estrella, aquel abogado con historial en expedientes de capos y placa honorífica del gobierno estatal, especializado en resolver plagios por la vía del “acuerdo”.
A partí de ahi el cuento se repitió en Matamoros con el plagio de 3 estadounidense, en Rio Bravo con el secuestro de 31 migrantes y paréele de contar, levantón, silencio, negociación; solo ha cambiado el nombre del municipio, pero el guion se ha mantenido tan estable que hasta parece política pública no escrita.
La petición al señor de la bata
Así que, habría que pedirle al doctor que saque otra vez su recetario telefónico y gestione, ya sabe con quién, el “milagro post Nochebuena” para esa familia y el taxista, igual que cuando se trató de un edil y no de simples mortales que viajan en Tsuru.
Al final, si sus malos oficios alcanzaron para un alcalde, no sería descabellado esperar que le sobre tantito capital humanista-criminal-político-organziado para cuatro sillas vacías más.
Ausencias en las esferas del árbol navideño
Tamaulipas es tercer lugar en el podio nacional de los levantones: 13,630 ausencias que ya ni caben en las estadísticas, por eso allá en Reynosa prefirieron colgarlas del árbol navideño, como si fueran adornos de temporada —porque en esta tierra, el dolor también tiene tradición de la mano del Cartel del Golfo,los mismos que abraza efusivamente el gobernador en sus «chispazos de narco frecuente, frecuentado por narcos».
Y es que en los lamentables hechos, las recetas del médico”, sirven más para adormecer conciencias que para curar cuerpos. Tiene credenciales de sanador, pero practica la cirugía política: corta, pega, cose… y negocia con criminales a la vista del gobierno federal que anda ocupado con otros incendios.
Si ayer una llamada oportuna de su asesor Juan Pablo penilla,al mismo tiempo abogado de Zetas, “alineó” a los muchachos del Cartel del Noreste para resolver aquel secuestro que le hacia ruido al recien llegado , que le impide hacerlo otra vez en momentos que que ya esta empuercado hasta la medula y enmarranado hasta el cogote.
Con informacion: PROCESO/
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