En Sabinas Hidalgo N.L ,volvió a escribirse a balazos otro capítulo de la misma película de siempre,la llamada “la guerra contra el narco”. Porque sí, como si escucháramos un mal remix, anoche se repitió lo que Felipe Calderón anunció en 2006: la bronca sería larga, carísima, con saldo rojo de vidas humanas y el no vería el resultado… y vaya que la profecía sigue vigente.
Alrededor de las 20:30, un convoy de Zetas de al menos cuatro camionetas sorprendió a los uniformados de Fuerza Civil cuando patrullaban cerca del Parque Recreativo La Turbina. La emboscada dejó cinco policías heridos y el soundtrack del barrio quedó plagado de ráfagas de rifle de asalto.
Los oficiales alcanzaron a repeler la agresión y cuidar a sus compañeros malheridos mientras el comando armado aplicaba la vieja confiable: disparar, sembrar el terror y largarse como si nada. Nadie sabe si ellos se fueron ilesos, pero lo que sí está claro es que ni un detenido, ni un abatido: pura pólvora en el aire y saldo de siempre.
La escena se volvió viral con videos grabados por vecinos, donde se escuchaban las ráfagas sin necesidad de efectos especiales. Más tarde llegó el Ejército, la Guardia Nacional y hasta la Policía Ministerial para engrosar la foto del operativo.
Curiosamente, apenas hace unos días Sabinas ya había sido escenario de otro tiroteo sin heridos ni capturados. O sea, la rutina.
Lo inquietante es que mientras cambian las siglas, los uniformes y los discursos, seguimos atrapados en la misma profecía maldita: un conflicto eterno que, como dijo Calderón en su arranque de guerra, costará vidas, dinero y paciencia… y ni siquiera quienes hoy la comandaban llegarán a ver el final del túnel.
Con informacion: ELNORTE/

No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Tu Comentario es VALIOSO: