LA «TREMENDA CORTE VA RESOLVER TREMENDO CASO»:»MINISTROS DIVIDIDOS VAN contra CDV para REVIVIR ORDEN de METERLO al BOTE»…el político perseguido se dice perseguido politico,hay diluyentes,tambien agravantes.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) acaba de meter las manos de manera oficial en el novelón tamaulipeco: decidió atraer el caso para definir si debe seguir viva la orden de aprehensión contra Francisco Javier García Cabeza de Vaca, exgobernador panista, por lavado de dinero y delincuencia organizada. Así que, si alguien pensaba que el caso ya estaba enterrado bajo alfombra azul, que se siente un ratito: la trama se complica y apenas calienta motores.

¿Cómo llegamos aquí?

• La juez federal Adriana Yolanda Vega Marroquín ya había concedido un amparo a Cabeza de Vaca, pegándole duro a la FGR porque no presentó pruebas «suficientes» ni «eficaces» del supuesto manejo oscuro de lana a través de empresas fantasma y compadres de ocasión.
• Vega Marroquín no solo lo amparó: mandó que se dijera con todas sus letras que los delitos… pues que no existían. 
• Pero la FGR, terca y marrullera, fue a impugnar ese amparo para que no quede ni polvo del exgobernador en las calles sin rendir cuentas.

¿Quiénes votaron en contra?

Ya quedó claro quiénes se pusieron del lado de no atraer el caso de Cabeza de Vaca: el voto fue 5 a 4 en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Los ministros que votaron en contra de atraer (es decir, de que la Corte siquiera toque el tema de la orden de aprehensión) fueron: Hugo Aguilar Ortiz (presidente), Yasmín Esquivel Mossa, Giovanni Figueroa Mejía y Arístides Guerrero García. 

El bloque a favor —Sara Irene Herrerías Guerra, Lenia Batres Guadarrama, Loretta Ortiz Ahlf, Irving Espinosa Betanzo y María Estela Ríos González— se llevó el desempate por un pelo de juez de distrito,destaca La Jornada.

Que dice Cabeza de Vaca:

Cabeza de Vaca desde sus redes se solto con todo pero se pinta como el mártir estrella de esta telenovela política. Deja claro que, según su versión él es un perseguido del régimen de Morena y de López Obrador, simplemente por no someterse a la “maquinaria autoritaria” y—esto lo recalca—por haber destapado el “huachicol fiscal”, que él mismo califica como el mayor acto de corrupción en la historia de México (…aunque la evidencia diga lo contrario).

Lanza directo: dice que la orden de aprehensión en su contra fue un acto de “venganza” comandado por el presidente y que sólo la SCJN impidió que ese “desafuero” se consumara, todo apegado, presume, a la Constitución. Se queja de las “chicanadas” de la Fiscalía, que, para él, sólo buscan atorarlo como rehén político (…parte verdad, parte mentira, pero depende del cristal con que se mira) y no dejar que los jueces federales resuelvan como manda el derecho.

Remata diciendo que los otros señalados en el mismo expediente han sido absueltos, que la FGR sólo quiere tenerlo como rehén político por ser el “destapador” del huachicol fiscal, y que la historia pondrá a cada quien en su lugar. Afirma, en tono de corrido norteño, que no se dobla ni se vende, dejando claro que, según él, la persecución es burda, cobarde, y sólo lo fortalece en sus convicciones.

El termómetro en redes: ardor, incredulidad y escarnio

Las redes no perdonaron ni un segundo. Twitter/X está que arde, con usuarios que exigian saber con nombres y apellidos quiénes votaron “pro impunidad”, tachándolos de proteger narcos, traicionar al pueblo, y elegir “el lado oscuro del expediente”. 

Hay reclamos directos de por qué cuatro ministros “protegieron” al exgobernador, con deseos de linchamiento político y comentarios que mezclan ironía, furia y hastío total frente al “nuevo” Poder Judicial.

• Muchos denuncian que esos votos “son contra el pueblo”.
• Otros ironizan, imaginando el regreso del “vandalito”, mientras algunos sugieren de plano un “corran a esos ministros ya”.
• Se compara a la SCJN con una mafia de élite, y los nombres de ministros resuenan como si fueran los villanos de la película nacional de la semana.

No es exagerado decir que el ambiente digital es de alta temperatura, con la ciudadanía dividida entre “ya era hora que alguien se meta” y “otra vez la justicia solo para políticos”. Nadie parece querer quedarse callado, y mucho menos perdonar.

El por que de nuestro titulo:

El encabezado creemos es adecuado y tiene argumento sólido tanto en forma como en fondo: la Corte está efectivamente ante un “tremendo caso” y lo hace con una votación cerradísima. De un lado, ministros que quieren revivir la orden de meter al bote a Cabeza de Vaca; del otro, los que buscan bloquear la jugada por considerar el caso endeble o de simple persecución política. El propio exgobernador recarga el drama diciéndose perseguido por el poder, tesis que, aunque recurrente, nutre el espectáculo legal y mediático.

Argumentos que sostienen el título

• Es un caso de altísimo perfil con tintes de espectáculo nacional, divisivo en la Corte: cinco votos a favor de atraer el caso, cuatro en contra, cada grupo con posturas radicalmente opuestas.
• El fondo son delitos graves: delincuencia organizada, lavado de dinero, triangulación financiera y contratos públicos multimillonarios, lo que justifica el calificativo de “tremendo” tanto en alcance como en impacto mediático.
• Cabeza de Vaca arma el perfil de “perseguido político”, un clásico mexicano que añade diluyentes (la supuesta debilidad de las pruebas según jueces de distrito, amparos) pero también agravantes (el tamaño de los montos y el tipo de delitos).
• La SCJN está obligada a resolver si revive la orden de aprehensión, es decir, si hay fundamentos para llevar al exgobernador de la grilla mediática a la cárcel.

En resumen, nuestro encabezado cumple porque resume con irreverencia el drama, el quiebre de la Corte, las acusaciones y defensas encontradas y el tono nacional de espectáculo legal. 

Lo que sigue

Ahora el balón está en la cancha de la Corte. El Pleno analizará el fondo del caso: si la FGR realmente no probó nada o si, por el contrario, hay materia para resucitar la orden de aprehensión contra Cabeza de Vaca. El suspense no baja y las redes prometen seguir funando, destapando, y exhibiendo cada movimiento de los ministros, hasta que no quede duda de quién juega para qué lado.

Prepárense, porque vienen semanas de filtraciones, guerra de declaraciones y suspense de serie premium. Como buen thriller judicial mexicano, nada está escrito hasta el fallo final… y el guion de la Suprema Corte tiene sorpresas para todos.

Con informacion; ELUNIVERSAL/ LAJORNADA/ REDES