El Servicio Médico Forense (Semefo) de Guerrero recogió cadáveres frente al Palacio de Justicia de Iguala la madrugada del 27 de septiembre de 2014, establece un parte informativo del Ejército mexicano que forma parte de la versión pública del expediente del caso Ayotzinapa de la Procuraduría General de la República (PGR).
Ninguna información oficial anterior había documentado un cuarto sitio en el que se hubieran dado muertes la noche del ataque a los normalistas. Hasta hoy sólo se tenía conocimiento de la muerte de seis personas, entre ellas tres estudiantes y tres civiles más, en primer lugar en la calle Juan N. Álvarez y Periférico Norte, el cruce a Santa Teresa y el Camino del Andariego.
El dato de que se recogieron cuerpos frente al Palacio de Justicia es relevante porque ahí fue atacado el autobús Estrella de Oro 1531, en el que viajaban al menos 14 estudiantes que hoy están desaparecidos. Ello podría significar que aquél día hubo más muertes de las que se han informado.
El parte militar que LA SILLA ROTA pudo revisar en el expediente público de la PGR también refiere que los cuerpos que se levantaron en el sitio fueron llevados al Semefo de Iguala alrededor de las 6 de la mañana, aunque no se especifica el número de víctimas ni sus identidades.
LA SILLA ROTA tuvo acceso a la versión pública del expediente del Caso Ayotzinapa -de 85 tomos-, en donde se encuentra el documento del Batallón 27 de Infantería el cual revela que el Ministerio Público Federal y la Fiscalía General del Estado de Guerrero, “dieron fe de los hechos y del levantamiento de los cuerpos” en otro punto de Iguala.
El documento podría exhibir que las autoridades federales y estatales escondieron información para cuadrar la “verdad histórica” sobre la desaparición y la presunta muerte de los 43 normalistas en el basurero de Cocula.
Otro elemento que suma a la sospecha, es que la PGR tardó 10 meses en solicitar los vídeos de las cámaras de vigilancia ubicadas a las afueras del Palacio de Justicia, y que lo hizo sólo a partir de una recomendación del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).
El contenido de las grabaciones es fundamental para conocer el operativo, quiénes los atacaron, identificar el destino al que fueron llevados los normalistas y si se registró el levantamiento de cuerpos por parte del SEMEFO.
La ruta del ataque
El GIEI señaló que mientras era atacada la caravana de tres autobuses de normalistas en el cruce de la calle Juan N. Álvarez y Periférico Norte, el autobús Estrella de Oro 1531 se había adelantado a la comitiva y tomó otro camino.
El chofer señaló en su testimonio que los normalistas le dijeron que saliera lo más rápido posible de Iguala para llegar a la Normal de Ayotzinapa (municipio de Tixtla).
Refirió que el autobús fue interceptado por al menos dos patrullas de policía que lo persiguieron por la salida de Iguala hacia Chilpancingo, que elementos dispararon sus armas de fuego, por lo que quedó bloqueado en la carretera, justo debajo del puente de Chipote, frente al Palacio de Justicia de Iguala.
Todos los normalistas que iban en ese autobús fueron detenidos y están desaparecidos, por lo que no hay testimonios directos de lo sucedido, más que lo declarado por el chofer del autobús, los agentes de la policía y un miembro del Ejército -inteligencia militar- llegaron al lugar y presenciaron los hechos.
Según el análisis de telefonía -que permite ubicar el lugar donde se encontraban los normalistas por algunas de las llamadas realizadas o recibidas de sus teléfonos-, las declaraciones de estudiantes sobrevivientes que estuvieron presentes en los hechos -en la Central de Autobuses-, el reconocimiento realizado por los familiares y normalistas sobrevivientes de unas prendas de ropa pertenecientes a algunos de los desaparecidos que se encontraron en el autobús, el GIEI pudo determinar que en el Estrella de Oro 1531 viajaban:
Adán Abrajan de la Cruz, Alexander Mora Venancio, Carlos Lorenzo Hernández Muñoz, Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, Israel Jacinto Lugardo, Jesús Jovany Rodríguez Tlatempa, Jorge Aníbal Cruz Mendoza, Jorge Antonio Tizapa Legideño, José Ángel Navarrete González, José Eduardo Bartolo Tlantempa, Julio César López Patolzín, Luis Ángel Francisco Arzola, Magdaleno Rubén Lauro Villegas y Martín Getsemany Sánchez García.
Lugares del crimen
La noche y madrugada de los ataques en Iguala murieron seis personas, de ellos tres eran estudiantes de Ayotzinapa. Según los testimonios de algunos de los normalistas que se encontraban en la calle Juan N. Álvarez y Periférico Norte a las 22:00 horas, mientras eran atacados por la policía, y cuando aún Aldo estaba en el suelo agonizando, Julio César Mondragón “El Chilango”, les dijo a otros compañeros que había grabado varios videos con un teléfono.
Testigos señalaron que se encontraba muy afectado por lo sucedido. Posteriormente, “El Chilango” estuvo en la conferencia de prensa de las 0:30 horas, cuando se produjo el segundo ataque en la calle Juan N. Álvarez y Periférico Norte, de donde huyó corriendo como el resto de los normalistas cuando se produjeron los disparos que acabaron con la vida de los normalistas, Daniel Solís y Julio César Ramírez.
Según la versión del PM, Julio César Mondragón “El Chilango”, habría sido privado de libertad por policías municipales, de acuerdo con imágenes captadas por el C-4. Horas después fue encontrado muerto en el lugar conocido como Camino del Andariego, a la altura de las instalaciones de la empresa Coca-Cola.
El autobús, de la empresa Castro Tours 198, contratado por el equipo de fútbol “Los Avispones de Chilpancingo”, salió de Iguala a las 23:00 horas. Poco después el autobús pasó frente al Palacio de Justicia, más adelante, superó el retén de la policía municipal de Iguala, situado a la salida de la ciudad.
Doce kilómetros más adelante, en la misma carretera y en la zona conocida como el cruce de Santa Teresa, el autobús primero fue detenido por hombres armados y después atacado con armas de fuego, acabando con la vida del estudiante David Josué García Evangelista e hiriendo al conductor, Víctor Manuel Lugo Ortiz, quien murió poco después de llegar al hospital.
Durante el ataque al autobús de “Los Avispones de Chilpancingo”, dos taxis fueron alcanzados por las balas, y cerca de uno se encontró a una mujer muerta.
Otras acciones del Semefo
En la versión conocida hasta el día de hoy, la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014, murieron seis personas. Dos normalistas en la calle Juan N. Álvarez y Periférico Norte; y uno en el Camino del Andariego. Un joven y una mujer perdieron la vida en el cruce a Santa Teresa, y un hombre en un hospital.
Sin embargo, el Semefo de Guerrero realizó el levantamiento de otros cuerpos en otra escena de ataque: el Palacio de Justicia.
Esta información se desprende de un oficio del Batallón 27 de Infantería de fecha 14 de octubre de 2014, contenido de la versión pública del expediente del Caso Ayotzinapa, al que LA SILLA ROTA tuvo acceso.
“Asunto: Hechos ocurridos los días 26 y 27 de septiembre. EN CUMPLIMIENTO A LA ORDEN VERDAL GIRADA A ESTA COMANDANCIA DE BATALLÓN, ME PERMITO INFORMAR A ESTA SUPERIORIDAD DE LOS HECHOS OCURRIDOS EL 27 DE SEPTIEMBRE (sic) AL EFECTUAR RONDINES EN EL EXTERIOR DE LA CIUDAD CON PERSONAL DE LA GUARDIA EN PREVENCIÓN ENCONTRANDOME DESEMPEÑANDO EL SERVICIO OFICIAL DEL CUARTEL COMO A CONTINUACIÓN SE INDICA”, señala el documento.
Se detalla que a las 23:00 horas del 26 de septiembre salió del Batallón 27 un teniente de infantería “CON 14 DE TROPA DOS CAMIONETAS TIPO CHEYENNE UNA ESTACIÓN DE RADIO Y UN BOTIQUÍN DE PRIMEROS AUXILIOS AL HOSPITAL GENERAL DE ESTA CIUDAD CON EL FIN DE VERIFICAR LA INFORMACIÓN RELACIONADA CON PERSONAS HERIDAS CON ARMA DE FUEGO, INCORPORANDONOS A LAS 23:20 APROXIMADAMENTE INFORMANDO EL RESULTADO DE SU INDAGATORIA AL CIUDADANO TENIENTE CORONEL DE INFANTERÍA **** (Borrado) SEGUNDO COMANDANTE DE BATALLÓN”.
Algo inusual inquietaba en Iguala al Batallón 27 de Infantería, por lo que elementos tuvieron que salir a las calles en los minutos posteriores.
“23:50. SIENDO LAS 23:50 HORAS SALIÓ EL CIUDADANO TENIENTE DE INFANTERÍA **** (Borrado) CON 14 DE TROPA DOS CAMIONETAS TIPO CHEYENNE UNA ESTACIÓN DE RADIO Y UN BOTIQUÍN DE PRIMEROS AUXILIOS PARA VERIFICAR LA INFORMACIÓN DE QUE EN EL CRUCERO DE SANTA TERESA SE ENCONTRABAN PERSONAS CON ARMAS DE FUEGO”, indica el documento.
Cinco minutos después, el coronel de infantería del Batallón ordenó organizar con el personal de turno de descanso “una fuerza de reacción” para salir en caso de que el teniente de infantería requiriera apoyo. Y salió el convoy de militares en los primeros minutos del 27 de septiembre de 2014, con rumbo al Palacio de Justicia.
“00:30 HRS. EL SUSCRITO SALE CON EL SUBTENIENTE DE INFANTERIA **** (Borrado) EL SOLDADO **** (Borrado) PERTENECIENTE AL PELOTÓN DE INFORMACIÓN DE ESA UNIDAD MÁS NUEVE DE TROPA QUE SE ENCONTRABAN DESEMPEÑANDO SERVICIO DE GUARDIA EN PREVENCIÓN (SE ANEXA RELACIÓN DEL PERSONAL) EN DOS CAMIONETAS TIPO CHEYENNE CON EL FIN DE EFECTUAR PATRULLAMIENTOS A LAS SALIDAS DE LA CIUDAD CON LA INSTRUCCIÓN DE NO CONFRONTAR AL PERSONAL DE ESTUDIANTES DE LA NORMAL DE AYOTZINAPA, GRO, EN EL CONCEPTO DE QUE EL SOLDADO DE INFANTERÍA **** (Borrado) PRESENCIÓ EL EVENTO QUE REALIZARON A INMEDIACIONES DEL EDIFICIO DEL DISTRITO JUDICIAL QUE SE ENCUENTRA UBICADO EN LA CARRETERA FEDERAL IGUALA-CHILPANCINGO”, se puede leer en la hoja uno.
La información de las dos horas siguientes, sobre el patrullaje y las acciones del Batallón 27 fueron tachadas de la versión pública.
A las 2:00 horas del 27 de septiembre, los soldados establecieron la seguridad en la calle Juan N. Álvarez y Periférico Norte, para “preservar el lugar de los hechos”, e incluyeron fotografías de su labor.
De acuerdo al documento, minutos después, grabaron una conferencia de prensa de un grupo de líderes estudiantiles de Ayotzinapa, y señala que estuvieron presentes reporteros de Milenio, Agencia de Prensa Independiente, El Sur y Cadena 3.
Un elemento de Inteligencia Militar, presenció el ataque a los normalistas que iban en el autobús Estrella de Oro 1531, frente al Palacio de Justicia, y entregó fotografías al Batallón 27, las cuales no se encuentran en el expediente de la PGR.
El parte militar señala que el SEMEFO levantó cuerpos en otro punto de Iguala, el mismo sitio donde fueron atacados y desaparecidos al menos 14 normalistas que iban a bordo del autobús Estrella de Oro 1531, frente al Palacio de Justicia.
“3:15 horas. ARRIBANDO AL DISTRITO JUDICIAL DE IGUALA EL C. LIC ****(Borrado) A.A.M.P.F. EL C. **** (Borrado) EL PERITO EN CRIMINALISTICA Y CIUDADANO **** (Borrado) CON UNOS MÁS DEL SERVICIO MÉDICO FORENSE PARA DAR FE DE LOS HECHOS Y HACER EL LEVANTAMIENTO DE LOS CUERPOS, SIENDO TRASLADADAS AL SEMEFO DE IGUALA, GRO. CULMINANDO SUS ACTIVIDADES A LAS 5:45 HORAS DEL 27 DE SEPTIEMBRE DE 2014”, describe el parte militar del Batallón 27 de Infantería.
A lo largo de un año, la PGR y la Fiscalía de Guerrero no reportaron que en el Palacio de Justicia se hayan levantados víctimas mortales y trasladado los cuerpos al SEMEFO de Iguala, como si lo informó el Batallón 27 de Infantería en un documento oficial.
La PGR tuvo acceso al parte militar, pero no inició una línea de investigación para determinar la identidad de las víctimas mortales y si algún cuerpo es de uno de los 14 normalistas de Ayotzinapa que iban en el autobús Estrella de Oro 1531, o bien, la PGR lo pasó por alto para cuadrar la “verdad histórica” de que los 43 estudiantes fueron asesinados, incinerados y sus restos arrojados al río san Juan.
Tardanza en recopilar evidencia
Los videos de los lugares de interés para la investigación no los tuvo en cuenta la PGR hasta el momento en que el GIEI solicitó que se incluyeran.
El grupo de expertos exhibió que la PGR tenía conocimiento de que los normalistas que iban a bordo del autobús Estrella de Oro 1531, fueron detenidos en la salida de Iguala hacia Chilpancingo frente al Palacio de Justicia, y que tardó 10 meses en solicitar los vídeos de las cámaras de vigilancia ubicadas a las afueras de los tribunales.
Las grabaciones son fundamentales para conocer la organización del operativo, ubicar a las corporaciones de seguridad que participaron, identificar el destino al que fueron llevados los normalistas y establecer si hubo levantamiento de cuerpos por parte del Semefo como informó el Batallón 27.
“El GIEI investigó y confirmó que existían grabaciones de las cámaras de seguridad del Palacio de Justicia en las que se veía la presencia del autobús y las agresiones contra los normalistas. Dichas grabaciones estaban en poder de la presidencia del Tribunal y no habían sido proporcionadas a la PGR para la investigación de los hechos”, expusieron en su informe sobre el Caso Ayotzinapa.
La PGR jamás indagó en el Palacio de Justicia para determinar si tenían alguna evidencia que ayudara en la investigación: “El GIEI tuvo conocimiento primero a través de una magistrada de Iguala y posteriormente por parte de la magistrada presidenta de la existencia de dichos videos que habían sido visualizados por ellas. Por dicho motivo y ante el riesgo de que se pierdan documentos vitales para el esclarecimiento de los hechos puso esta circunstancia en conocimiento de la PGR y solicitó investigar los hechos, dado el enorme tiempo de 10 meses transcurrido sin que dicha prueba hubiera sido proporcionada ni solicitada por las autoridades”.
Esta omisión podría revelar qué pasó con un grupo de estudiantes, saber quién se encuentra detrás del ataque a los normalistas de Ayotzinapa y si la PGR protegió a alguien en su investigación de la “verdad histórica”, y quiénes fueron esas personas.
fuente.-LaSillaRota.