La desaparición de seis mujeres en Celaya, Guanajuato, consternó a todo México, el caso incluso acaparó las noticias internacionales, pues puso de manifiesto la terrible violencia que se vive en el país. Tras encontrar a cinco de ellas calcinadas en una fosa clandestina, se reveló que detrás del suceso estaba un cártel de Tamaulipas.
Aunque la Fiscalía General del Estado de Guanajuato no dio más especificaciones, los medios de comunicación sacaron sus conclusiones por los nexos criminales que se manejan en el estado. Fueron ellos también los que informaron que una de las mujeres compartió su ubicación del lugar del trabajo, que resultó ser una narcofiesta.
De acuerdo con lo informado, las mujeres fueron contratadas como meseras para un evento. Normalmente ellas contrataban a un taxista de confianza, pero ese día le dijeron que no requerirían sus servicios, esto después de que el hombre les llamó con insistencia. Al parecer, la fiesta a la que fueron era de la suegra de José Antonio Yépez Ortiz, alías “El Marro”, líder del Cártel de Santa Rosa de Lima.
Como es costumbre entre las mujeres mexicanas por la inseguridad, una de ellas compartió su ubicación, pero fue descubierta. Los organizadores de la fiesta lo tomaron como una afrenta, y pensaron que estaba informando a las autoridades o al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), rivales de “El Marro”.
Para ese momento las cosas ya se habían tornado feas, una persona cercana a las familias de las víctimas reveló que una de ellas alcanzó a hacer una llamada telefónica, y el destinatario de la misma escuchó gritos, como si todo se hubiera salido de control.
El Cártel del Golfo
De acuerdo con la investigación, las mujeres pensaron que el susto vivido en la fiesta había quedado atrás, pues salieron de ella, pero en su camino fueron interceptadas por hombres armados quienes las subieron a la fuerza a sus vehículos. Las llevaron primero a una ubicación y después al sitio donde fueron encontradas calcinadas, en el municipio de Juventino Rosas.
La información oficial dijo que un grupo criminal de Tamaulipas es el responsable de la desaparición y posterior asesinato de las mujeres, todo apunta al Cártel del Golfo, pues además de que es el que domina en el estado fronterizo, tiene una alianza con el Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL), esto para hacer frente al CJNG que cada vez gana más terreno en Guanajuato.
Otra situación que confirmaría esta teoría, es que los hechos ocurrieron en territorio controlado por el CSRL, por lo que hubiera sido imposible que sicarios de un grupo rival llegaran hasta las zonas donde se desarrollaron los hechos sin sufrir un ataque.
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