El pasado mayo, un video en el que se escuchaba la canción de Tommy Riccio, Sì Sto’ Carcerato [Sí, estoy encarcelado], se popularizó en el TikTok italiano. La letra habla del dolor y el sufrimiento de estar encarcelado y la canción tiene ese estilo “neomelódico” de la música napolitana, que a veces ha sido criticada por idealizar el crimen. Pero lo que destacaba de este video era que estaba grabado dentro de una prisión, que más tarde la policía penitenciaria italiana identificó como el ala de alta seguridad de la prisión de Avellino, a 50 kilómetros de Nápoles.En este centro penitenciario, se encuentran muchos criminales asociados con la Camorra, la organización criminal mafiosa de la región de la Campaña y de su capital, Nápoles. Con un teléfono que había contrabandeado, el recluso, que aún no ha sido identificado, grabó el vídeo que se hizo viral en TikTok y más tarde fue eliminado, aunque todavía sigue en YouTube. Es uno de los muchos ejemplos de cómo los jóvenes camorristas utilizan TikTok para mostrar el estilo de vida mafioso y darse a conocer en las altas esferas del mundo de la mafia. Prácticamente, una demostración de poder y liderazgo.
Durante un par de meses, en VICE Italia han estado investigando el aumento en las etiquetas, las canciones y los usuarios que publican contenido relacionado con la Camorra. Descubrieron que los jóvenes mafiosos utilizan cada vez más TikTok que Facebook, y ahora también los mayores.
Los vídeos de la Camorra en TikTok ofrecen una mirada a los cambios más grandes de la estructura de la mafia. La Camorra no tiene una lista oficial de miembros, así que es imposible demostrar que estos tiktokeros pertenecen a ella. Esto se debe a que, en el pasado, ser camorrista era una especie de derecho de nacimiento y los nuevos reclutas procedían principalmente de las mismas familias. Pero ahora, los jóvenes mafiosos se ganan el miedo y el respeto rápidamente con muestra de violencia en las calles. También, publican contenidos con armas y botines de la vida criminal en las redes sociales, dejando de lado la tendencia tradicional de la mafia a permanecer en las sombras.
La Camorra se especializa en drogas y tráfico de personas. También ganan dinero con contratos de obras ilegales y la eliminación de residuos en Campania. Se organizan en pequeños grupos jerárquicos que se conocen como clanes. Tradicionalmente, una familia controla unos territorios específicos, que, junto con los clanes dentro de ellos, pasan a adoptar el apellido del capo. Estos clanes, que normalmente se forman poco a poco a lo largo del tiempo, “se establecen cuando una familia consigue una posición de autoridad en un sector del contrabando”, decía el profesor Luciano Brancaccio en un libro italiano sobre el tema. Para mantener el control, explica, las familias deben gestionar la violencia “de forma racional”, minimizando las muertes y los conflictos violentos para evitar que los lugareños se vuelvan en su contra.
Desde principios del 2000, han aumentado los arrestos a los líderes mayores de los clanes, llevando a los niños y a los jóvenes a ocupar su lugar. Coincide con un aumento de los grupos de adolescentes, a menudo de las mismas calles y barrios, que se reúnen para “fare i guai” o dar problemas. Estas bandas se han dado a conocer a través de actos de violencia aleatorios. Un informe de la Dirección de Investigación Antimafia de Italia en 2019 denominó a estas bandas como “la academia de la Camorra”, por actuar como un grupo de entrenamiento efectivo y una reserva de nuevos reclutas para los futuros líderes. El informe también recalcaba que muchos de estos chicos no tienen lazos familiares con la mafia, pero “actúan con la misma violencia”.
En muchos de los tiktoks, los jóvenes camorristas aparecen mostrando sus armas, tatuajes, coches, motos y objetos de lujo al son de canciones neomelódicas o traplódicas, una fusión del trap y el neomelódico, en dialecto. El tema más popular, “Paradies Rmx” de Bl4ir, cuenta cómo es crecer en un barrio difícil. El pegadizo estribillo dice: “Si la policía pasa conduciendo, dales una advertencia”.
Ningún vídeo muestra explícitamente los crímenes, pero los temas recurrentes, las etiquetas y las canciones dan a entender su afiliación con el crimen organizado. “Mejor morir que traicionar”, dice el título de un vídeo de lo que parece ser un joven camorrista. En otro, un joven habla de su “hermano” que está en la cárcel y escribe: “La prisión no podrá pararlo”, junto con los emoticonos de las cadenas y el corazón negro. La etiqueta “paranza”, grupo liderado por jóvenes, aparece en muchos tiktoks que muestran a adolescentes en convoyes de motocicletas o posando juntos.
Los emoticonos más utilizados son los leones, símbolos de fuerza y violencia, las pistolas y los hombres que se dan la mano como símbolo de hermandad. El emoticono de los ojos también es bastante popular y representa el código de silencio que siguen los miembros de los clanes y la gente que vive en las zonas controladas por la mafia. Otros tiktoks tratan sobre la vida fuera y dentro de la prisión. En uno, una persona celebra que su amigo acaba de salir de la cárcel, y lo describe como el jefe de la piazza, que en argot es un lugar donde se trafica con drogas.
El informe de 2019 también señalaba que los clanes tradicionales han intentado aprovecharse del potencial de estas bandas de jóvenes dándoles poder y territorios, mientras evitan cualquier tipo de violencia que pueda manchar su imagen. En 2015, un líder de 19 años, Emanuele Sibillo, se reveló contra el capo de la Camorra local y fue asesinado. Desde entonces, los clanes han recurrido a las redes sociales, especialmente TikTok, para limpiar su imagen.
El clan Amato-Pagano es el ejemplo más claro de este lavado de imagen. A principios del 2000, la mafia entró en guerra en el barrio napolitano de Scampia, epicentro del tráfico de drogas italiano. Supuestamente, el clan Amato-Pagano traicionó al clan Di Lauro y pasaron a ser considerados “secesionistas”.
Desde entonces, han llevado a cabo un cambio de imagen y se han hecho llamar “Gli Spagnoli”, los españoles, por el tiempo que el capo Raffaele Amato pasó en Costa del Sol, España, como fugitivo. Muchos vídeos aparecen con la bandera española y el emoticono de la corona. En uno de ellos, una banda de escúteres pasa por las calles de uno de los territorios históricos del clan, en los suburbios de Nápoles.
Marcello Ravveduto, profesor de Historia Digital en la Universidad de Salerno, dijo que tiene lógica que la mafia utilice TikTok para difundir sus mensajes. “A menudo nos olvidamos de que las organizaciones criminales y las redes sociales tienen algo clave en común: una red”, dijo. Mientras la visibilidad de la Camorra aumenta en TikTok, también lo hace la reserva de futuros reclutas para estas bandas criminales.
fuente.-Dario de A'vino/
Raquel Buenrostro en su oficina de Ciudad de México. NAYELI CRUZ
