- No acabamos de salir de las revelaciones sobre vínculos entre la política y el crimen organizado en Michoacán, cuando la punta de otra madeja siniestra asoma en Guanajuato y Querétaro.
Queretaro,Qro 03/Oct/2014 El miércoles fue detenido Héctor Beltrán Leyva en San Miguel de Allende, último capo de esa familia, quien desde Querétaro operaba negocios criminales, al tiempo que se hacía pasar por empresario de bienes raíces y corredor de arte.
Junto con el El H, quien merced a un bajo perfil se había insertado en la sociedad queretana, fue detenido un personaje bastante conocido en la región: Germán Goyeneche Ortega.
Reconocido empresario, socialité y practicante de la fiesta brava como forcado, a pesar de ostentarse como ecologista, Goyeneche es militante del Partido Verde. En las redes sociales se presenta como presidente del Consejo Ciudadano 100 por Querétaro, así como del Parlamento Ciudadano de México por ese estado.
Un primo hermano de Goyeneche es funcionario del gobierno municipal de la capital queretana. Se trata de Fernando GoyenecheVillalobos, director de Inspección del municipio, quien ha negado tener otra relación con su primo que no sea la del parentesco.
Ingeniero agrónomo por el Tec de Monterrey, a Goyeneche Ortega se le asocia públicamente con el diputado federal Ricardo Astudillo Suárez, secretario general del PVEM en Querétaro.
No son pocas las fotografías en las que ambos personajes aparecen juntos, en reuniones públicas y privadas, políticas y empresariales, informó ayer el portal queretano Códice Informativo.
Por si faltaran evidencias de las relaciones de Goyeneche y Astudillo, éste propuso a aquél como representante de Querétaro en el Parlamento Ciudadano de México, según un boletín de prensa del PVEM local fechado el pasado 8 de marzo.
La carrera de Astudillo, arquitecto de profesión, ha sido meteórica. En seis años pasó de ser regidor del municipio de Corregidora, conurbado de la capital, a diputado local y luego a diputado federal. De septiembre de 2010 a marzo de 2011, presidió la Mesa Directiva del Congreso queretano.
Ayer, en declaraciones al diario AM, Astudillo reconoció que conoce aGoyeneche desde hace 15 años, pero apuntó que no es su amigo ni forma parte de la estructura del Partido Verde, al que el empresario detenido se afilió en 2008.
El legislador dijo que la Comisión de Honor y Justicia de su partido abordará el tema para analizar la eventual expulsión de Goyeneche de ese instituto político.
Respecto de las fotografías en las que ambos aparecen juntos, Astudillosólo dijo que no puede responsabilizarse del uso que se den a las imágenes.
Sin embargo, Códice Informativo dio a conocer ayer, en una nota deVíctor Pernalete, que los vínculos de Goyeneche con la política no sólo están en Querétaro sino también en San Miguel de Allende.
Dio cuenta de la acusación que se hace al empresario de haber financiado la campaña del panista Jesús Correa Ramírez, alcalde de ese municipio guanajuatense entre 2006 y 2009.
Asimismo que Correa, a través del secretario del ayuntamiento,Cristóbal Finkelstein Franyuti, habría ordenado el desalojo de un predio, en enero de 2008, que luego pasó a manos de Goyeneche.
El propio Finkelstein buscó la presidencia municipal en 2009, pero fue derrotado por la candidata priista Luz María Ñúnez.
A su vez, Correa pasó al Congreso local en 2009. En junio del año pasado, fue designado secretario general del PAN en Guanajuato a propuesta del presidente estatal Gerardo Trujillo.
A ambos políticos panistas, Correa y Finkelstein, se les relaciona con el diputado federal panista Luis Alberto Villarreal García, recientemente destituido como coordinador de la bancada de su partido en San Lázaro.
Villarreal también fue alcalde de San Miguel de Allende, entre 2003 y 2006, justo antes de que Correa ocupara el cargo.
En 2012, un medio local informó que Finkelstein se había mudado a una lujosa residencia en el exclusivo fraccionamiento Mesa del Malanquín, de San Miguel de Allende.
Cabe señalar que Goyeneche es accionista de otro lujoso fraccionamiento en la población, el Otomí Lake and Villas, ubicado en la rivera de la presa Allende.
Ayer se dio a conocer una fotografía en la que aparecen Finkelstein yGoyeneche en un acto de precampaña de Ricardo Villarreal Gracía, hermano de Luis Alberto Villarreal.
Todo esto es apenas la punta de la madeja, que habrá que seguir jalando para ver hasta dónde llega, pero los indicios son preocupantes.
Hablan de una cercanía, si no es que de una simbiosis, entre la política y el crimen organizado.
Ya no en una entidad bronca y agreste como Michoacán sino en una región como la de Querétaro-San Miguel de Allende caracterizada por su economía pujante, su vida cotidiana apacible, sus zonas residenciales acomodadas, sus residentes extranjeros, su arquitectura colonial que atrae al turismo y su población profesionista.
Sería bueno llegar al fondo de estas historias, antes de ir a las elecciones de 2015, cuando tanto Guanajuato como Querétaro tendrán elecciones locales concurrentes con las federales.
El país no debe vivir un nuevo episodio como el de Michoacán, donde funcionarios municipales y estatales de los principales partidos se vieron involucrados con el cártel de Los Caballeros Templarios.