- En pocas horas, el presidente Enrique Peña Nieto enviará al Congreso de la Unión su Segundo Informe de Gobierno, con lo que habrá concluido el primer tercio de su gestión.
MEXICO D.F 31/Ago/2014 Está claro que hoy —además del primer círculo del presidente—, pocos saben lo que Peña Nieto informará al Congreso de la Unión y menos lo que dirá en el mensaje que enviará a la nación el martes próximo, en Palacio Nacional.
Lo que sí sabemos, sin embargo, es que seguramente el presidente saludará con sombrero ajeno. Es decir, que le dirá a los mandantes —que somos los ciudadanos—, que uno de sus principales logros son las importantes reformas estructurales que aprobó el Congreso en los últimos 20 meses y que en una intensa campaña mediática promueve como suyas.
Y, en efecto, uno de los logros históricos más importantes del Estado mexicano en el último medio siglo, son las reformas que consiguieron el PRD, el PAN y el PRI en un Congreso que por primera ocasión mostró la cara virtuosa de la pluralidad política. En efecto, asistimos a los logros legislativos más importantes en muchas décadas. Pero existe un pequeño detalle que no puede, y no debe olvidar el Presidente. ¿A qué nos referimos?
Un detalle fundamental; que el autor intelectual de las reformas; el padre de la criatura en realidad es el PRD, partido al que en un acierto se sumó el PAN y, al final, el PRI y el gobierno de Enrique Peña Nieto. Hoy el Presidente puede presumir como suyas las reformas, pero lo cierto es que no fueron una idea original de su gobierno, a pesar de que la administración federal fue determinante para hacer realidad las reformas. Y por eso la primera pregunta.
¿Se han imaginado lo que estaría presumiendo hoy el gobierno de Peña Nieto —en su segundo informe—, si no existieran las reformas? Seguramente estaríamos hablando de un segundo año de gestión fallida, de pocos logros en el caso del gobierno de Peña Nieto. Pero lo cierto es que Peña Nieto le debe más de lo que muchos imaginan, a la izquierda moderna en que se ha convertido el PRD; partido sin el cuál no habría nacido nada del llamado Pacto Por México.
Más aún, la izquierda que representa el PRD hoy es confiable, leal al interés ciudadano y es factor central en la vida nacional —contrario a los radicales que votaron contra todo en las reformas, pero que corren como ratas detrás del dinero público—, que dos políticos y legisladores del PRD presiden los órganos de dirección de las cámaras del Congreso. A sus 25 años de edad, hoy el PRD está listo para grandes empresas en la política y el gobierno. Le guste o no a sus malquerientes.
Y por todo eso, son más necesarias que nunca el resto de las interrogantes.
LAS DUDAS
1.—¿Entenderá el presidente Peña Nieto que el círculo virtuoso de las reformas se logrará cuando la terca realidad grite que el mejor gobierno de la historia no es posible sólo con grandes reformas?
2.—¿Entenderá que ya no existen pretextos para que el suyo sea el mejor gobierno de la historia, luego de las reformas que le entregó el Estado todo?
3.—¿Ya tendrá listos Peña Nieto a los mejores hombres y las mejores mujeres para operar “el aterrizaje planeado” que lleve las reformas del papel y de la ley, a la realidad de la calle y, al final, a los bolsillos y el bienestar de la gente?
4.—¿Habrá entendido el Presidente que en su gabinete legal y ampliado ni están todos los que son, ni son todos los que están? Es decir, que el tiempo de los amigos, los cuates y los compadres ya se agotó?
5.—¿Seguirá defendiendo a servidores públicos poco eficientes, como el responsable de Capufe, cuya inexperiencia retrata mal al gobierno de Peña?
6.—¿Seguirá presumiendo una reforma educativa que es un notable fracaso en estados como Oaxaca, Michoacán, en donde millones de niños siguen sin escuela, mientras que miles de maestros no trabajan y otros miles ya están muertos y aún así les pagan?
7.—¿Seguirán los tres órdenes de gobierno volteando para otro lado cuando grupos criminales como la CNTE han pasado de un reclamo legítimo a la cuestionable práctica mafiosa y al vandalismo sin freno?
8.—¿Se atreverá el presidente a dedicar una línea de su informe al mediocre gobierno de Gabino Cué; el mandatario que sabotea con toda la intención la reforma educativa? ¿Dirá en su informe una sola frase para los millones de niños oaxaqueños que tienen cancelado su futuro gracias a la mafia de la CNTE?
9.—¿Seguirá creyendo Peña Nieto que la corrupción es un problema hereditario y casi genético, mientras que su promesa presidencial contra la corrupción sigue sin aparecer en el terreno legislativo?
10.—¿Habrá escuchado el Presidente a los muchos empresarios que siguen martillando con las quejas de la corrupción en el sector público?
11.—¿Le habrán dicho al Presidente que ya se agotó el modelo de gobierno alterno, con un gobernador de parapeto, en el caso de Michoacán? ¿Le habrán informado que La Tuta Films tiene de cabeza a la clase política michoacana y que hoy en la entidad nadie se salva de mantener vínculos con el crimen organizado?
12.—¿Hablará en su Segundo Informe, de los alcaldes, diputados locales y otros funcionarios del gobierno de Michoacán —y de uno de los hijos del ex gobernador Fausto Vallejo—, que han aparecido en videos con el líder de Los Templarios, Servando Gómez?
13.—¿Reconocerá Peña Nieto que en Michoacán no existen condiciones objetivas para llevar a cabo una elección como la que se tiene prevista para 2015 en dicha entidad?
14.—¿Alguien le habrá dicho a Peña Nieto que “los buenos” resultados contra la violencia, el crimen y el secuestro, la información que soporta las cifras oficiales no es de la mejor calidad y que eso afecta los resultados?
15.—¿La tragedia que vive Tamaulipas será suficiente para que el presidente Enrique Peña Nieto le dedique una línea en su informe?
16.—¿Estará enterado el presidente Peña Nieto que, por ejemplo, existen casos de presunto abuso oficial como el de Tlatlaya, en el Estado de México?
17.—¿Sabrá el Presidente, por ejemplo, que el IMSS está a punto del colapso, lo mismo que gran parte del sector salud? Hoy un enfermo que entra por urgencias al IMSS tarda dos o más días en tener acceso a una cama, ya que la demanda y la saturación son escalofriantes.
18.—¿Y la economía? ¿Lo que vemos hoy es lo que prometió para la mitad de su gobierno? ¿Y cuando las reformas del campo?
19.—¿Seguirán las promesas de que habrá más empleos? ¿Ahora sí?
20.—¿Será cierto que va la ampliación del aeropuerto de la ciudad de México? Lo mismo prometieron Fox y Calderón. Y nada. Al tiempo.
Fuente.-Columna de Ricardo Aleman
Fuente.-Columna de Ricardo Aleman