El Crimen de Cuén como Punto de Quiebre
Un dia como hoy,el 25 de julio de 2024, el asesinato del ex-rector de la UAS y político sinaloense ,Héctor Melesio Cuén Ojeda ,sacudió la vida pública y criminal de Sinaloa. Su muerte, lejos de ser un simple acto de violencia, fue el inicio de la detonación de una cadena de traiciones y venganzas que fueron iniciadas por Ruben Rocha Moya,aun gobernador de Sinaloa por el calculo politico y la podredumbre solapada por el segundo piso el gobierno.
El “Mayo Zambada” y su influencia, serian usados para zanjar los diferendos que mantenía el ejecutado con el gobernador,como saldo de compromisos incumplidos en su campaña por el mandatario de Morena.
La traición a Cuen y enseguida al “Mayo”, es lo que terminó redefiniendo el mapa de poder en el estado y la actual agenda de violencia entre facciones del Cártel de Sinaloa que se dividieron en dos bandos de la misma banda.
A un año de estos eventos, la entidad padece una ola de violencia cuya raíz se encuentra en aquel fatídico verano y que las autoridades no han podido contener.
El asesinato y la investigación fallida
Cuén Ojeda fue asesinado en Culiacán la misma jornada en la que Ismael “El Mayo” Zambada García habria sido secuestrado por su ahijado Joaquín Guzmán López y detenidos al ingresar a Estados Unidos en un vuelo procedente de Sinaloa.
Inicialmente, la Fiscalía del Estado, entonces encabezada por Sara Bruna Quiñonez, al servicio de Rocha Moya,intentó presentar el asesinato como un simple robo violento. Sin embargo, videos de seguridad y el testimonio de la defensa de Zambada García pronto revelaron inconsistencias. El propio “Mayo” Zambada, en una carta, sostuvo que fue engañado para asistir a una reunión con su amigo Cuén y el gobernador Rubén Rocha Moya,pero allí fue capturado por Los Chapitos y entregado para su extradición, mientras Melesio era ejecutado en las inmediaciones.
Melesio Cuén habia sido benefactor de la campaña de Rocha Moya en 2021 cuando Americo Villarreal Anaya,hoy Gobernador de Tamaulipas,era el Delegado del partido y fue parte de las negociaciones incumplidas.
La publicación de la carta de “El Mayo” llevó a la Fiscalía General de la República (FGR) a atraer el caso, señalando irregularidades e ilegalidades en el procedimiento local. Así, la fiscal sinaloense renunció y el caso quedó en manos federales, sin que al día de hoy haya detenidos formales,salvo atole con el dedo del primer y segundo piso del gobierno cuyos entresijos ya dio a conocer Ovidio Guzmán Lopez en su colaboración con EE.UU.
El primer eslabón: la traición entre aliados
Antes de la gran traición de los llamados “Chapitos” a “El Mayo”, fuentes periodísticas y analistas habían advertido rupturas internas. El primer “pecado” fue la lealtad rota entre Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa y aliado político de Cuén, quien, presuntamente, terminó colaborando con otros grupos y actores políticos para debilitar la influencia del exrector y dar pie a su asesinato
El golpe definitivo: la entrega de “El Mayo”
Aquel 25 de julio fue el escenario de una doble traición: Joaquín Guzmán López (“el Chapito”) engañó a “El Mayo” haciéndolo acudir a una supuesta reunión de reconciliación. Al llegar, fue secuestrado y entregado a autoridades estadounidenses, en lo que su “defensora” la FGR investigó como traición a la patria. Al mismo tiempo, Cuén Ojeda, presunta pieza clave en la operación, fue asesinado — por temores a que supiera demasiado sobre la negociación política y criminal detrás del “golpe”.
La cadena de violencia desencadenada
Estas traiciones no sólo fracturaron al Cártel de Sinaloa en la “Chapiza” y la “Mayiza”, sino que abrieron una serie de venganzas internas y disputas locales sangrientas. El resultado ha sido una espiral de violencia en Culiacán y comunidades aledañas, producto de la fragmentación de pactos y el vacío de poder dejado por el asesinato de Cuén tras la traición del Gobernador y la captura de Zambada García,pero primero fue una y esta llevo a la otra, por lo que es valido presumir al Gobernador como detonante de la violencia, mas que la segunda traición.
Conclusión
A un año de distancia, la violencia en Sinaloa es el resultado directo de decisiones tomadas entre políticos, ene este caso el gobernador de MORENA, Ruben Rocha Moya operadores y líderes criminales en medio de traiciones múltiples y sabotajes cruzados.
La traición de Rocha Moya a Cuen,amigo del “Mayo”, desato su muerte y la captura de su patrocinador, pero es apenas la superficie visible de una reconfiguración profunda, cuyas consecuencias siguen azotando la región.
Con informacion: NOROESTE/
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