La noche del sábado 19 de abril quedó marcada por dos graves hechos de violencia en la región de la Costa Chica de Guerrero. Por un lado, un ataque armado durante el Festival del Caldo en San Marcos, donde murió el sobrino de la diputada local del PVEM, Gladys Cortés Genchi. Por otro lado, el brutal asesinato de cuatro miembros de una familia en Cuajinicuilapa, en un incidente que incluyó decapitaciones e incendio de vivienda.
Estos actos violentos, sumados al homicidio de un prominente ganadero local ocurrido el mismo día, siguen perpetuando la grave crisis de seguridad en la región, en medio de la nueva pero igual de inutil estrategia federal del “segundo piso del gobierno”.
Ataque Armado en San Marcos: Muerte del Sobrino de la Diputada
El ataque armado ocurrió alrededor de las 9:30 de la noche del sábado 19 de abril, en la localidad de Tecomate Pesquería, municipio de San Marcos, durante el Festival del Caldo, un evento comunitario que celebraba su séptima edición. La diputada local del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Gladys Cortés Genchi, se encontraba en el lugar tras haber participado en las actividades oficiales del festival, cuando se produjo un tiroteo.
Durante el ataque, la legisladora resultó ilesa, pero su sobrino, Jared Cortés Moctezuma, de 19 años, fue asesinado a balazos. Aunque algunos reportes iniciales sugerían que el ataque podría haber estado dirigido contra la diputada, esta teoría no ha sido confirmada por las autoridades. En sus redes sociales, la diputada Cortés solo publicó: “Agradezco las muestras de preocupación; yo estoy bien, estoy con mi familia”, sin hacer mención directa al asesinato de su sobrino.
El contexto del ataque resulta particularmente preocupante, ya que ocurrió durante un evento público donde participaban aproximadamente 2,000 personas. Previo al ataque, en la comunidad se había inaugurado el Festival del Caldo, donde además de la diputada, participaron el alcalde de San Marcos, Misael Lorenzo Castillo, y el dirigente de Morena en Guerrero, Jacinto González Varona[1].
Controversia sobre el Número de Víctimas y Objetivo del Ataque
Aunque existe una discrepancia importante en los reportes sobre el número total de víctimas fatales en este incidente. Algunos medios mencionan que solo falleció Jared Cortés, mientras que otros reportan hasta cuatro personas asesinadas en el mismo ataque. Esta confusión refleja la falta de información oficial clara sobre los hechos de los que no hablo la Diputada aliada de Morena,aliada del crimen.
Según testimonios, el ataque ocurrió después de varias carreras de caballos realizadas como parte del festival, donde se reportaron apuestas de hasta 300 mil pesos por carrera. Los atacantes llegaron fuertemente armados y abrieron fuego contra un grupo de personas que se encontraba a un costado de la pista de carreras.
El presidente del PVEM en Guerrero, Alejandro Carabias Icaza, ha negado que el ataque estuviera dirigido contra la diputada, afirmando en un mensaje por WhatsApp: “Hasta donde sabemos el atentado fue contra un familiar de ella”. Sin embargo, las investigaciones están en curso y las autoridades no han emitido un pronunciamiento oficial sobre el móvil del ataque.
Masacre Familiar en Cuajinicuilapa
En un hecho separado pero igualmente brutal, la misma noche del 19 de abril, un grupo armado irrumpió en la comunidad de Montecillos, municipio de Cuajinicuilapa, también en la Costa Chica de Guerrero, y asesinó brutalmente a cuatro integrantes de una familia. Las víctimas fueron identificadas como Francisco Peláez, Eustolia Arellanes, y sus hijos Gustavo y Hugo Peláez Arellanes.
La crueldad de este ataque es particularmente impactante: los agresores no solo dispararon contra las víctimas, sino que también incendiaron la vivienda y una camioneta Chevrolet tipo Explorer. Más perturbador aún, tres de las víctimas fueron decapitadas, y sus cabezas fueron halladas cerca de la escena del crimen.
Vecinos de la zona lograron sofocar las llamas del incendio y descubrieron los cuerpos de las víctimas. Los familiares de los Peláez Arellanes, profundamente conmocionados por el suceso, impidieron que las autoridades realizaran el levantamiento de los cuerpos para su traslado al Servicio Médico Forense.
La comunidad de Montecillos de Goitia, donde ocurrió esta masacre, es la más poblada del municipio de Cuajinicuilapa y se encuentra a 13 kilómetros de la cabecera municipal. Hasta el momento, las autoridades no han revelado información sobre los posibles responsables o motivos de este ataque.
Asesinato de Prominente Ganadero Local
Estos dos hechos violentos se suman al asesinato de Armando Añorve López, un reconocido ganadero que era candidato a presidir la Asociación Ganadera local de Cuajinicuilapa. Este homicidio ocurrió apenas unas horas antes, alrededor de las 11:00 de la mañana del mismo sábado 19 de abril.
Añorve López, quien además había ocupado cargos como ex director de Desarrollo Rural y ex presidente de la Asociación Ganadera local, fue ultimado a balazos en su domicilio ubicado en la calle Ignacio Zaragoza, a pocos metros de la terminal de autobuses Estrella Blanca en Cuajinicuilapa[5]. Según testigos, varios hombres armados irrumpieron en su vivienda y le dispararon en repetidas ocasiones.
Lo más significativo de este caso es que el asesinato se produjo justo un día antes de las elecciones para elegir al nuevo presidente de la Asociación Ganadera local, proceso en el que Añorve López era uno de los aspirantes[5]. Este hecho ha generado especulaciones sobre posibles motivaciones políticas detrás del crimen, aunque la Fiscalía General del Estado (FGE) no ha emitido información oficial sobre los posibles móviles.
Escalada de Violencia en la Costa Chica de Guerrero
Estos tres incidentes violentos ocurridos en menos de 24 horas en la región de la Costa Chica de Guerrero evidencian una preocupante escalada de violencia en la zona. El hecho de que los ataques hayan ocurrido en eventos públicos (como el Festival del Caldo) o hayan sido dirigidos contra figuras públicas (como el ganadero candidato a la presidencia de la asociación) demuestra la audacia y el desafío de los grupos criminales hacia las autoridades.
Es particularmente alarmante que el ataque en San Marcos se produjera en presencia de autoridades municipales y líderes políticos regionales, lo que sugiere una grave crisis en materia de seguridad pública. Además, la brutalidad de los asesinatos en Cuajinicuilapa, que incluyeron decapitaciones e incendio, muestra el nivel de violencia que ha alcanzado la región.
Hasta el momento de la redacción de este informe, ni la Fiscalía General del Estado (FGE) de Guerrero, ni ninguna autoridad estatal o local ha emitido algún pronunciamiento oficial o comunicado respecto a estos hechos violentos[8], lo que ha generado un clima de incertidumbre y temor entre la población local.
Conclusión
La serie de hechos violentos ocurridos el 19 de abril de 2025 en la Costa Chica de Guerrero representan un grave desafío para las autoridades de todos los niveles. La muerte del sobrino de una diputada local, la masacre de una familia completa y el asesinato de un candidato a dirigir la asociación ganadera local en menos de 24 horas demuestran la complejidad y gravedad de la inseguridad en la región.
Estos eventos no pueden verse como incidentes aislados, sino como parte de un patrón de violencia que afecta a Guerrero desde hace años. La falta de pronunciamientos oficiales y de avances en las investigaciones solo contribuye a profundizar la percepción de impunidad y desprotección entre los habitantes de la Costa Chica.
Es imperativo que las autoridades estatales y federales implementen estrategias efectivas de seguridad que no solo respondan a estos hechos puntuales, sino que aborden las causas estructurales de la violencia en la región. De lo contrario, estos incidentes podrían ser solo el preludio de una mayor escalada de violencia en uno de los estados históricamente más afectados por la inseguridad en México.
Con informacion: EJECENTRAL/ MEDIOS/ REDES