Un hombre que había sido ingresado a un hospital de Culiacán, tras recibir un impacto de bala, fue sacado del lugar y privado de la libertad durante la tarde de ayer viernes por una de las facciones en guerra interna de su “majestad impune del Cartel de Sinaloa” ,que minutos después, en el sector Villa Satélite,ejecutaron a balazos otro sujeto que se transportaba en un automóvil particular tipo Toyota.
La víctima fue identificada como Adolfo, de 32 años de edad.
Según informes, el hombre resultó herido en un ataque a balazos hacia un local de barbería de la colonia Rafael Buelna, por lo que fue transportado a un centro de salud.
Ya internado, civiles armados,desafiantes y atrevidos del Cartel de Sinaloa,que no parecen estar enterados de la presencia permanente de Omar Garcia Harfuch,jefe de la Seguridad Federa,de los miles de soldados con fuerzas especiales,pertrechados con blindados, armas de alto poder y helicópteros artillados ,ingresaron a la fuerza y asi nomas, se llevaron al lesionado para desparecerlo por arte de mafia.
Que nos dice este hechos que habla mal del gobierno (…cual ?) en todos sus niveles
El incidente descrito es otro indicio, otro sintoma,un reflejo alarmante de la grave crisis de inseguridad que atraviesa Culiacán y, por extensión, el estado de Sinaloa. Este hecho nos revela múltiples aspectos preocupantes de la situación actual:
Violencia descontrolada
El ataque inicial en la barbería demuestra el alto nivel de violencia que se vive en las calles de Culiacán donde los tiroteos en lugares públicos se han vuelto frecuentes, poniendo en riesgo la vida de civiles inocentes y generando un clima de terror en la población.
Impunidad y falta de control estatal
El hecho de que un grupo armado pueda tirotear a un sujeto, escapar y luego ingresar a un hospital para secuestrarlo, evidencia la reiterada falta de control que tienen las autoridades sobre la seguridad pública y sugiere de manera contundente que los grupos criminales pueden operar con un alto grado de impunidad, desafiando abiertamente al ejercito, la marina, federales, los policias estatales, los municipales y hasta el cuerpo de veladores.
Colapso del sistema de salud y seguridad
Los hospitales, que deberían ser zonas seguras, se han convertido en recurrentes escenarios de violencia que no solo pone en peligro a los pacientes, sino también al personal médico, y viola el derecho fundamental a la protección de la salud.
Desconfianza en las instituciones
El secuestro de Adolfo del hospital sugiere que los grupos criminales pueden tener infiltrados o informantes dentro de las instituciones de salud, lo que socava la confianza de la población en los servicios públicos.
Inteligencia y coordinacion
La pronta localización de la victima,revela la “coordinacion e inteligencia” de grupos criminales que deben ser la envidia de las distintas autoridades civiles y militares.
Impacto económico y social
La constante violencia está teniendo un impacto devastador en la economía local. Negocios como la barbería donde ocurrió el ataque inicial se ven obligados a cerrar o sufren pérdidas significativas. Esto genera desempleo y afecta el tejido social de la comunidad.
Crisis humanitaria
El secuestro de una persona herida que necesita atención médica es una violación grave de los derechos humanos. Este tipo de acciones pueden considerarse como crímenes de lesa humanidad, dada su naturaleza sistemática y el impacto en la población civil.
Fracaso de las estrategias de seguridad
Este incidente demuestra una y otra vez, un dia si y otro tambien,el año pasado como el presente, que el fracaso de las estrategias de seguridad implementadas tanto por el gobierno estatal como por el federal, con nutridos despliegues de fuerzas militares, la violencia continúa escalando,sinonimo de que lo estan haciendo muy mal.
Guerra interna del crimen organizado
El ataque y posterior secuestro es parte de la guerra interna que se libra entre facciones del Cártel de Sinaloa y sugiere que la violencia va continuar e incluso intensificarse en 2025,como advierten los pronósticos.
Normalización de la violencia
El hecho de que este tipo de incidentes se reporten con frecuencia indica una peligrosa normalización de la violencia extrema en la sociedad sinaloense y puede tener efectos psicológicos a largo plazo en la población, especialmente en los jóvenes.
Desafíos para la justicia
La apertura de una carpeta de investigación por parte de las autoridades parece ser un acto meramente protocolario, dada la aparente incapacidad del Estado para hacer frente a estos grupos criminales y a la impunidad de 100% en levantones y 99.90% en asesinatos.
En conclusión, este incidente es un microcosmos de la crisis multidimensional que enfrenta Culiacán y Sinaloa donde se efleja un colapso institucional, una crisis de derechos humanos y un desafío existencial para el Estado de derecho….en español vulgo,”estamos jodidos”
Con informacion: NOROESTE/MEDIOS