Luego de que se anunció que la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) podría perder el 75% de su presupuesto por las medidas de austeridad para atender el coronavirus, Mara Gómez Pérez, titular de esa dependencia, admitió no saber por cuánto tiempo podrán seguir trabajando si no se les regresa el dinero que ya tenían asignado.
Hoy por la mañana la CEAV emitió un comunicado donde expresó que seguirá ayudando a las víctimas “hasta el límite de sus capacidades”, sin embargo, en entrevista con EL UNIVERSAL, Mara Gómez indica que el recorte presupuestal, por el que no tendrá acceso a los capítulos 2000 Materiales y Suministros y 3000 Servicios Generales, le impedirá pagar su sueldo a la mayoría de los trabajadores y tampoco habrá dinero para la renta de los edificios donde se atiende a las víctimas.
“Sí estamos muy preocupados porque la CEAV funciona sobre todo con el gasto derivado de los capítulos 2000 y 3000 del presupuesto federal, la aplicación a rajatabla de este decreto de austeridad representa para la CEAV una parálisis completa, una imposibilidad de operación de sus funciones, y por eso hay que decirlo, porque es muy grave realmente”, señaló.
Actualmente la institución tiene inscritas 34 mil 215 personas en el Registro Nacional de Víctimas, pero si la Secretaría de Hacienda no da marcha atrás con el recorte presupuestal no se le podrá pagar a los médicos, psicólogos, trabajadores sociales, asesores jurídicos y administrativos que dan atención a todas esas personas afectadas.
“No sé cuánto tiempo podamos aguantar así, obviamente la gente come, tenemos necesidades, eso es normal, yo espero que la Secretaría de Hacienda se sensibilice de nuestra situación, que apliquen el decreto en sus términos”, dijo la comisionada.
Según Mara Gómez, la CEAV está resintiendo todas las irregularidades que anteriores encargados cometieron al interior de la institución, especialmente al contratar a personal de manera eventual y por outsourcing:
“La CEAV no fue creada de una manera adecuada, se crea en 2014 por el impulso de las víctimas de graves violaciones a derechos humanos, lo cual es muy importante, es una institución que se creó para las víctimas, pero se crea internamente y presupuestalmente con una enorme vulnerabilidad: más de la mitad del personal está contratado de manera eventual o a través del mecanismo de outsourcing".
“Además, (la Comisión) es una institución que no tiene ni un solo bien inmueble propio, funcionamos en toda la República, tenemos centros de atención integral a las víctimas en cada uno de los estados, pero están rentados la gran mayoría de los edificios y al día de hoy no tenemos dinero para pagar esas rentas”.
La funcionaria dijo que ya comunicó a algunos de sus trabajadores que no tienen dinero ni para pagar su próxima quincena, por lo que espera que la Secretaría de Hacienda se apegue a la excepción del numeral 38 del decreto donde se considera a los Derechos Humanos como un rubro al que no se le deberían aplicar recortes.
En este sentido, Mara Gómez hizo un llamado a quienes conforman la CEAV y las víctimas para mantenerse unidos y enfrentar esta situación juntos:
“Le pedimos a las víctimas que juntos demos esta batalla, yo tengo una enorme preocupación, ¿qué le voy a decir a las madres de los desaparecidos? A las hermanas y hermanos de las víctimas que buscan todos los días en tierras o terrenos a sus familiares desaparecidos, ejecutados o las víctimas de tortura, de trata. Yo quisiera que demos esta batalla juntos y que ellos sepan que estamos a su lado, vamos a hacer todo por sacar esta institución adelante”.
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