Tawanna Hilliard, una madre de Brooklyn (NY) que trabajaba como paralegal en la Fiscalía de EEUU en Nueva Jersey, fue señalada de actuar como un “topo” para la pandilla criminal de su hijo Tyquan.
Hilliard, de 44 años, fue acusada de obtener ilegalmente información de una computadora del gobierno.
La acusación alega que “accedió a una computadora a sabiendas e intencionalmente, y excedió el acceso autorizado” para obtener los nombres de los informantes de la pandilla Bloods, que actúa en Nueva York y Nueva Jersey.
Los informantes que Hilliard supuestamente descubrió fueron luego incluidos en una lista “a atacar” por Bloods.
Tanto la madre como el hijo fueron acusados de manipulación y hostigamiento de testigos, y obstrucción de la justicia, entre otros cargos.
Tyquan cumple una condena de 10 años en el Centro Correccional Clinton (NY) por asalto y robo, y será procesado por los nuevos cargos en una fecha posterior.
Hilliard se declaró “no culpable” el martes y está esperando juicio bajo arresto domiciliario después de pagar $75 mil dólares en fianza. Tiene que usar un brazalete de tobillo, evitar las redes sociales y renunciar a su pasaporte. Si se le encuentra culpable, podría enfrentar hasta 20 años de prisión.
La Oficina del Fiscal de EEUU de Nueva Jersey declinó hacer comentarios, destacó New York Post.
Joe Viola, detective retirado del condado Bergen, dijo a Pix11 que situaciones como ésta eran su peor pesadilla cuando estaba con la unidad de pandillas, pues sabe muy bien lo que significa que el miembro de una pandilla se voltee, y las consecuencias que enfrenta cuando lo hace.
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