Los cuerpos torturados y desmembrados de ocho jóvenes fueron hallados a un costado de la autopista que comunica a Puebla y Oaxaca.
Este macabro descubrimiento ocurrió en el kilómetro 84+500 de la carretera Cuacnopalan-Oaxaca, cerca del Puente Calapa, donde autoridades localizaron un vehículo Volkswagen Vento color gris con restos humanos en su interior y alrededores.
Detalles del hallazgo
- Número de víctimas: Inicialmente reportadas como nueve cuerpos (5 hombres y 4 mujeres), aunque versiones posteriores mencionan ocho víctimasconfirmadas
- Condiciones de los cuerpos: Presentaban desmembramiento, manos cercenadas (guardadas en bolsas de plástico) y huellas de tortura. Algunos tenían impactos de bala como tiro de gracia.
- Ubicación: Cuatro cuerpos dentro del auto y el resto dispersos en el área.
Víctimas e identificaciones
Las autoridades han avanzado en la identificación de algunas víctimas:
- Jacqueline Aileth Meza Cazares (23 años): Madre de dos niños, reportada desaparecida el 1 de marzo en Zipolite.
- Brenda Mariel Salas Moya (19 años): Única sobreviviente localizada en Puebla. Relató que ella y Angie Lizeth Pérez García (29 años) fueron interceptadas por una patrulla de Huatulco].
- Credenciales encontradas: Pertenecientes a Lesly Noya Trejo (21 años) y Angie Lizeth, vinculadas a las fichas de búsqueda en Tlaxcala.
Contexto de las desapariciones
El grupo, originario de Tlaxcala, incluía estudiantes y jóvenes que viajaron a la costa de Oaxaca entre el 23 y 28 de febrero. Entre los desaparecidos destacan:
- Raúl Emmanuel González Lozano (28 años) y Noemí Yamileth López Moratilla (28 años): Vistos por última vez en Zipolite.
- Rubén Antonio Ramos Flores, Rolando Armando Evaristo (22 años) y Uriel Calva: También reportados por sus familias en redes sociales.
Investigaciones y vínculos
- Implicación policial: Una sobreviviente señaló que agentes de Huatulco participaron en el secuestro. Esto ha llevado a indagar la posible complicidad de fuerzas locales.
- Conexión con crimen organizado: El caso se relaciona con el asesinato de Alfredo Lavariega Canseco, dueño del hospedaje donde se alojaron las víctimas. “El Jocha”, como era conocido, fue ejecutado el 1 de marzo.
- Colaboración interestatal: Las fiscalías de Puebla, Oaxaca y Tlaxcala trabajan conjuntamente en la identificación de cuerpos y el rastreo de responsables.
El gobierno de Tlaxcala ha solicitado transparencia en las investigaciones, mientras familiares exigen justicia ante lo que consideran un crimen de Estado. Este suceso ocurre dos meses después de la desaparición de siete hombres en la misma región, lo que refleja una crisis de seguridad en zonas turísticas de Oaxaca.
Con informacion: ELNORTE/ MEDIOS
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