Pemex otorgó a la empresa de servicio petroleros Baker Hughes cuatro convenios de ampliación que modifican y multiplican por cinco la cifra máxima establecida originalmente en un contrato firmado en el 2018, muestran documentos públicos consultados por Grupo REFORMA.
Dos de los cuatro convenios de ampliación se autorizaron en el 2019, mientras el hijo y la nuera del Presidente Andrés Manuel López Obrador vivían en una casa de lujo de un alto ejecutivo de Baker Hughes, en Houston, según documentaron Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) y Latinus.
ASI E LLEVAN ELLOS:
Incluso, accionistas de la empresa pidieron ayer investigar un posible conflicto de interés.
El contrato inicial del 15 de marzo del 2018 que Pemex Exploración y Producción suscribió con la empresa texana establece en el "Convenio modificatorio número cuatro al contrato 640218810" un monto mínimo de 26 millones de dólares y un monto máximo de 65 millones 997 millones de dólares.
Sucesivas modificaciones ampliaron los techos de pago en 109 millones de dólares en el 2019, 99 millones adicionales en el 2020, y 68 millones de dólares en noviembre del 2021.
Con ello, el contrato tiene ahora un monto máximo a pagar de 343 millones de dólares, lo que representa un 427 por ciento de incremento de la cifra originalmente pactada.
Sobre estos hechos, un grupo de accionistas solicitó a altos ejecutivos de Baker Hughes que se abra una "robusta y completa investigación" relacionada con un probable caso de conflicto de interés.
En Twitter, el ex Canciller Jorge G. Castañeda dio a conocer la carta que, en nombre de un grupo de accionistas, escribió Juan Carlos Luna.
"Como probablemente ya están enterados", apuntó el accionista, "en las últimas semanas ha habido un número relevante de noticias apuntando a posibles conflictos de interés haciendo señalamientos de algo impropio, y posibles irregularidades legales de Baker Hughes.
"(Estos conflictos son) derivados del hecho de que un alto ejecutivo de Baker Hughes tuvo una relación directa con el hijo del Presidente mexicano y su esposa, ambos políticamente expuestos, al mismo tiempo que Baker Hughes obtuvo una extensión de un contrato multimillonario de Petróleos Mexicanos.
"La óptica y el momento de estos hechos simplemente no son buenas", añadió en su carta.
"Éstos al menos crean la percepción de un posible conflicto de interés y un potencial escenario que pudo haber cruzado la línea de lo legal y de obligaciones éticas de Baker Hughes", agregó.
"Esta desafortunada serie de coincidencias ocurridas en el mismo tiempo de contratos entre Pemex y Baker Hughes fueron expandidos en su alcance y su costo", subrayó Luna, "y cuando uno de nuestros ejecutivos permitió el uso de una residencia de lujo, donde la mencionada pareja vivió, son hechos que no se pueden ignorar y tienen un deber de actuar en consecuencia.
"Deberían considerar la urgencia para ejecutar una más robusta y completa investigación en este asunto, e informar a las autoridades, inversionistas y medios apropiadamente. Eso es lo que debe hacerse".
Con información de: Peniley Ramírez/
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