En el despacho del presidente nacional de Morena, Mario Delgado, hay un documento del que varios en su círculo cercano no han dejado de hablar desde este diciembre: un estudio confidencial sobre qué rol jugará la campaña de vacunación contra el Covid-19 en los comicios del próximo año.
Quienes han tenido acceso al documento cuentan que el estudio se hizo por encargo del Comité Ejecutivo Nacional a una empresa líder en opinión pública con el objetivo de responder dos preguntas: ¿cómo premiará la ciudadanía a Morena, si las vacunas se distribuyen adecuadamente entre la población para el verano de 2021? ¿y cómo castigará el electorado al partido del presidente, si la campaña termina en un desastre?
Sobre la primera pregunta, Morena pinta un escenario de ensueño: las millones de vacunas ordenadas a más de seis laboratorios privados llegarían sin contratiempos y suficientes para inocular a todos los médicos del país, militares y personas mayores de 40 años.
En ese escenario, sólo faltaría vacunar a la población en México de 39 años y más joven, lo cual permitiría la reapertura del país, la contratación de millones de personas que se quedaron con el trabajo en pausa por el coronavirus y el crecimiento de la economía nacional a un promedio del 2 por ciento. El sueño.
Pero la segunda pregunta explora el escenario de terror: las vacunas no llegarían al país por una alta demanda de los países ricos, o sí llegarían, pero no serían distribuidas equitativamente por los desvíos de la corrupción, el influyentismo y los asaltos del crimen organizado.
GANAR TODO O PERDER SAN LÁZARO
Habría miles de adultos mayores aún sin vacunar, pero sí estarían protegidos servidores públicos que pagaron para meterse en la fila de las inyecciones. El país tardaría meses en salir del semáforo rojo, alentando la reactivación económica y recuperando empleos a paso lento. El desastre.
El escenario ideal que trazó Morena para ese estudio de opinión pública marca que una exitosa campaña de vacunación le daría hasta 10 nuevos puntos porcentuales de votación a nivel nacional, incluso con la cifra de fallecidos en la pandemia que –hasta este lunes– alcanza los 127 mil 757 casos oficiales.
Entre los hallazgos más importantes de esa primera pregunta es que la gente está dispuesta a dejar atrás todo el dolor que ha generado la pandemia con tal de que el gobierno ofrezca una solución rápida y definitiva a los contagios y la crisis económica.
Es decir, que si Morena logra ofrecer una campaña de vacunación rápida, eficaz y a prueba de corrupción, los votantes aún le premiarían con votos, pese a los errores naturales de una situación inédita en el mundo y los provocados por malas decisiones en el gobierno.
Sin embargo, en el escenario más negro, Morena podría perder esos mismos 10 puntos porcentuales, afectando directamente la composición de la Cámara de Diputados. Los principales riesgos de curules perdidas estarían en la Ciudad de México, Estado de México, Morelos y Baja California.
El riesgo de una campaña fallida de vacunación podría llevar a Morena a perder la mayoría en San Lázaro y cederla a la alianza opositora, lo que complicaría el ya de por sí complicado sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
DISPUESTOS A DEJAR ATRÁS LA PANDEMIA
Otro hallazgo importante, pero ahora de la segunda pregunta, es que la gente reconoce y acepta que, en una pandemia, es natural un exceso de mortalidad, pero lo que no es natural ni aceptable es que haya corrupción en la asignación de vacunas.
Y esa es la idea que intentarán vender en los próximos meses Mario Delgado y los candidatos de Morena, usando el estudio de opinión pública que encargaron: nadie podría evitar las muertes por coronavirus, pero sí es posible evitar la corrupción para terminar con la crisis lo antes posible.
Los números del informe confidencial ya llegaron a Palacio Nacional, donde se trabaja a marchas forzadas en la logística de la campaña de vacunación más ambiciosa en la historia del país.
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No solamente hay que ubicar cuáles son las prioridades ante la escasez de las vacunas, sino también encontrar el modo de sortear a esos funcionarios de nivel medio que querrán enriquecerse vendiendo la vacuna o a los criminales que querrán arrebatar las inyecciones en el camino hacia los refrigeradores de los hospitales.
DEPENDE DE UNA VACUNA
“Es el esfuerzo más grande que jamás ha hecho un gobierno, probablemente, desde la Revolución Mexicana”, contó un funcionario de la Secretaría de Salud a EMEEQUIS, quien participa en el plan para evitar que la corrupción se filtre a la campaña de vacunación Covid-19.
“El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha insistido una y otra vez que su punto más fuerte es el combate a la corrupción. Ahora es tiempo de probarlo: ¿su administración es tan honesta y capaz de tener sus manos la cura de una enfermedad mortal y distribuirla sin favoritismos?”.
En Morena, ya saben qué pasa si la respuesta a esa pregunta es afirmativa: el 6 de junio sería un día de campo para ellos y un día de rabia para la oposición.
Pero si la respuesta es negativa, ya saben cuál es el escenario: adiós a la mayoría en San Lázaro y adiós a un fin de sexenio terso para la llamada Cuarta Transformación.
fuente.-@emeequis/
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