A días del inicio de la Semana Santa, el Arzobispo de Acapulco, Leopoldo González, llamó a integrantes del crimen organizado a reconvertirse de la 'narcocultura' a una cultura de la vida.
En su mensaje difundido a través de Facebook, el prelado pidió también a la ciudadanía a no imitar lo que hacen los grupos de la delincuencia en Guerrero y en otras partes del País.
"Este mes la intención de nuestra oración por la paz en nuestra patria es pedir juntos al señor por la conversión de una narcocultura hacia la cultura de la vida, hacia la civilización del amor, que fortalecida nuestra esperanza no escatimemos esfuerzos hacia un dinamismo social más fraterno, que erradique todo aquello que atenta contra la dignidad de ciudadanos para construir un país más justo y reconciliar", expresó.
"Pedimos al señor que nos ayude a todos en su situación personal a vivir nuestra conversión cuaresmal, en este punto que ahora se nos invita, pasar de una narcocultura a la cultura de la vida. Estar atentos y no dejar que nuestro pensar, querer hablar o actuar se introduzcan símbolos, usos, costumbres, para imitar o emular lo que hacen los miembros del narcotráfico o de la delincuencia organizada, son caminos de muerte".
El mensaje del prelado se da en un contexto de violencia que existe en Guerrero, donde recientemente hubo cambios de titulares en Seguridad debido a esa narcoviolencia, derivado de crímenes, plagios y cobros de piso.
Los obispos de las cuatro diócesis de Guerrero, incluso, han ventilado tener acercamientos con los líderes de las organizaciones criminales para que hagan una tregua, debido a la inefectividad de las autoridades para frenar los delitos de alto impacto.
Los grupos de los Ardillos y los Tlacos establecieron una tregua en Chilpancingo a raíz de esos diálogos con la Iglesia, y en la Sierra de la zona centro con la región de Tierra Caliente, en donde dominan Los Tlacos y la Familia Michoacana, también pactaron una tregua de paz.
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