Para poder acceder a un crédito de hasta 75 mil pesos, los burócratas del Estado tuvieron que pagar "moches" o hasta soportar peticiones de "intimidad" y favores sexuales con personal del Fideicomiso para la Vivienda de los Trabajadores al Servicio del Estado (Fovileón), acusó ayer el Gobernador Samuel García.
Durante la rueda de prensa matutina el Mandatario reveló que las extorsiones o los acosos sexuales para agilizar los trámites de préstamos fueron denunciados de manera anónima en el número de WhatsApp 813-241-2818, que anunció el domingo pasado.
"(Fovileón) ayuda a los burócratas a tener una vivienda digna, presta, da crédito", explicó García, "y nos llega una denuncia diciéndonos que están pidiendo comisión ilegal por el préstamo.
"Sí te presto, pero como es así, a discreción, te presto si solo, si sordeado, me das de un 7 a un 15 por ciento de moche" citó el Gobernador.
"Y, si eres mujer, fíjense este detalle: (les prestan) con que haya intimidad", agregó.
Hasta el cierre de la Administración anterior, el Fovileón era encabezado por Jesús Ortiz Morales, confirmaron empleados del mismo.
La nómina de Fovileón en el sitio web estatal está actualizada hasta febrero del año pasado y no hay información más reciente, pese a que por ley deben cumplir con esa obligación.
Las anomalías en el otorgamiento de créditos en Fovileón no son un hecho nuevo.
El 29 de agosto del 2016, EL NORTE publicó que Fovileón otorgó préstamos a los burócratas y, pese a que se los descuenta por nómina, en sus estados financieros reportaba inexplicablemente cuentas incobrables por 20.6 millones de pesos.
Tras dar a conocer estos actos de corrupción y acoso, el Gobernador aseguró que ayer mismo se presentaría la denuncia ante las autoridades correspondientes.
'Me mandaba mensajes en la noche'
Luego que el Gobernador Samuel García denunció que a las mujeres se les pidió "intimidad" a cambio de un crédito en Fovileón, burócratas que pidieron el anonimato confirmaron el hecho.
Trabajadoras del Estado señalaron a EL NORTE que, para poder ser liberados los préstamos, eran acosadas por el director, Jesús Ortiz Morales.
"Pedí un crédito", relató una de sus víctimas, "y me mandaba mensajes en la noche (diciendo) que podía agilizarlo, que si nos veíamos en un café o nos íbamos a comer.
"Muchas veces mejor optabas por quedarte sin esa prestación".
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