El caso Lozoya es un monstruo difícil de domar. La investigación que sigue el gobierno mexicano ya supera las mil hojas en expedientes que se resguardan como secreto de Estado. En esas gruesas carpetas están los nombres de 70 acusados, personas físicas y morales, que integran al que fuera el grupo compacto más poderoso del país y quienes se rebelan a que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) husmee en sus cuentas bancarias.
En entrevista con EMEEQUIS, Santiago Nieto Castillo señala que “la única forma de combatir la corrupción es encausar nuestras investigaciones al más alto nivel”.
El titular del organismo adscrito a la Secretaría de Hacienda revela que “hoy ya tenemos presentadas varias denuncias que abarcan a varios despachos relacionados con el anterior consejero jurídico del expresidente Enrique Peña Nieto (Humberto Castillejos) y posiblemente con el exsecretario de Hacienda (Luis Videgaray), pues a partir de información de la Unidad de Inteligencia Financiera se exigían cantidades de dinero a empresarios, a quienes se les amenazaba con congelar sus cuentas”.
También comenta que “varios” de los funcionarios mencionados por el exdirector de Pemex en su denuncia de hechos ante la Fiscalía General de la República ya se han amparado para frenar los avances de la investigación sobre los sobornos pagados por la empresa brasileña Odebrecht a la plana mayor de la política en México.
“Sí, nos estamos enfrentando a muchas resistencias”, cuenta Santiago Nieto. “Ha habido una serie de juicios de amparo promovidos por jueces, sí, pero nosotros tenemos que seguir con nuestra posición y evidentemente respetamos las decisiones de los jueces”.
AMPARADOS CONTRA LA UIF
Una fuente cercana a las indagatorias señala que entre los exservidores públicos “resistentes” que habrían logrado un amparo contra el equipo de Santiago Nieto, o estarían por obtenerlo, están el exsecretario de Hacienda, Luis Videgaray, y el exabogado de la Presidencia de la República, Humberto Castillejos.
Según las pesquisas, ambos miembros del círculo cercano del expresidente Enrique Peña Nieto habrían desembolsado una “gran cantidad de recursos económicos” para que sus abogados mantengan bajo llave sus secretos financieros, principalmente cuentas bancarias a nombre de familiares y exempleados.
Luis Videgaray, la mano derecha del expresidente Peña Nieto, escondería en sus cuentas bancarias las “comisiones” que cobraba por ser el operador de los sobornos de Odebrecht en México, mientras que el exconsejero jurídico en Los Pinos, Humberto Castillejos, ocultaría las “propinas” que recibió por armar las estructuras de lavado de dinero con las que blanqueaban las ganancias ilícitas.
“No puedo dar datos personales por el sigilo de la investigación, pero lo que sí puedo decir es que estamos haciendo la investigación de todas las 70 personas físicas y morales mencionadas… y sí hay intentos por ocultar información”, dice Santiago Nieto.
EL CASO MÁS IMPORTANTE
Para Santiago Nieto, abogado de 47 años, se trata del caso más importante de su vida: los resultados que obtenga serán la base para que la Fiscalía General de la República edifique el juicio político más importante de la década.
Si las pruebas son sólidas, la llamada Cuarta Transformación podrá comprobar que su tolerancia a la corrupción no es igual que la de administraciones anteriores. Si las evidencias obtenidas son endebles, la expectativa de justicia se hará añicos, amenazando con quebrar la credibilidad del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“El reto es enorme. En el sexenio anterior, las sanciones administrativas y por corrupción terminaban en nada o iban dirigidas a servidores públicos de bajo nivel, lo que no tenía ningún tipo de impacto en la sociedad. Hoy se requiere que los servidores públicos de alto nivel sean procesados”, adelanta el abogado, como quien toca una pieza de ajedrez, pero sin moverla todavía.
“NO VAMOS A FABRICAR CULPABLES”
Santiago Nieto habla con conocimiento de causa. En el sexenio anterior fue titular de la Fiscalía Especializada en Atención de Delitos Electorales (FEPADE), hasta que fue despedido en 2017 por el encargado del despacho de la entonces Procuraduría General de la República (PGR), Alberto Elías Beltrán, tras declarar públicamente que Emilio Lozoya lo había presionado para que lo declarara inocente en los inicios del caso Odebrecht.
Hoy, Emilio Lozoya sigue presionando para que se le reconozca inocente, pero Santiago Nieto está en una posición completamente distinta que hace tres años: tiene toda la confianza del presidente para hurgar hasta en las bóvedas de los probables delincuentes.
“No vamos tras hallazgos deseables. No vamos a fabricar culpables. Toda la información que tengamos la haremos conforme a derecho: a través de los datos con los que cuenta el Banco de México y con los estados financieros de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores”, cuenta Santiago Nieto.
SEPARAR LA PAJA
Amigos y enemigos, todos le reconocen una misma cualidad y defecto al “fiscal incómodo”, como se autonombró en un libro en el que narró su tortuoso paso por la administración de Enrique Peña Nieto: es un hombre que trabaja hasta cuando duerme y que suele despertar sobresaltado cuando, con los ojos cerrados, resolvió un laberinto de lavado de dinero.
En las últimas semanas se le ha visto más ocupado que de costumbre. Ha entrado a una fase crítica para el trabajo de las autoridades: por un lado, enfocar las baterías del equipo para sortear los obstáculos que le ponen los abogados de algunos de los 70 acusados. Por otro, exonerar a quienes fueron mencionados por Emilio Lozoya, pero que no están relacionados con los sobornos de Odebrecht… por ahora.
“Estamos en una etapa importante: investigar la denuncia presentada por el señor Lozoya para efectos de verificar si es cierta o falsa la información, que –en realidad– es una confesión de hechos propios.
“De entrada, los temas relacionados con José Antonio Meade ya sabemos que no son comprobables ¿A qué me refiero? A que el señor Lozoya hizo planteamientos imprecisos, como la adquisición de Etileno XXI, y el señor José Antonio Meade no era secretario de Hacienda. Tampoco encontramos transacciones financieras que fueran acordes a lo que planteó el señor Lozoya en su denuncia. Pero seguimos en los procesos indagatorios de 70 personas físicas y morales que están siendo sujetos de investigación”, asegura.
EVIDENCIAS CONTRA VIDEGARAY
Durante la investigación del caso Lozoya, narra Santiago Nieto, han encontrado presuntos delitos que podrían engrosar el expediente contra Luis Videgaray, quien ahora vive en un departamento en Cambridge, donde trabaja como profesor visitante en el Instituto Tecnológico de Massachusetts.
Uno de los hallazgos más importantes es que durante su paso como parte del gabinete presidencial, Luis Videgaray habría sido parte –o fue omiso– de un grupo dedicado a hacer extorsiones millonarias contra empresarios nacionales y extranjeros a partir de información clasificada de la Secretaría de Hacienda.
“Hoy ya tenemos presentadas varias denuncias que abarcan a varios despachos relacionados con el anterior consejero jurídico del expresidente Peña Nieto (Humberto Castillejos) y posiblemente con el exsecretario de Hacienda (Luis Videgaray), pues a partir de información de la Unidad de Inteligencia Financiera se exigían cantidades de dinero a empresarios, a quienes se les amenazaba con congelar sus cuentas”, señala Santiago Nieto.
En esas extorsiones habrían participado agentes de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, quienes acudían personalmente con los empresarios para exigir el pago de supuestas multas en efectivo, narra el titular de la UIF.
“La única forma de combatir la corrupción es encausar nuestras investigaciones al más alto nivel”, afirma Santiago Nieto. “Nosotros vamos a seguir haciendo nuestro trabajo, aunque haya resistencias. Y luego… que los tribunales decidan”.
Fuente.-@oscarbalmen/
Confiemos en que AMLO llegue al fondo de esto y recuperemos algo del dinero que se clavaron. El pueblo necesita ganar la confianza que se perdio con otros Presiratas.
ResponderBorrarViva AMLO
El gobierno de Lopez Obrador se esta distinguiendo por algo en particular: quiere dinero de donde sea, para sus megaproyectos tontos y pagar a las empresas que fueron perjudicadas por la cancelacion del Aeropuerto en Texcoco, para ello esta de caceria de gente que robo, esta bien pero que sea parejo tambien a los de morena, que no se hagan tontos. LO que desvia la atencion es la grave inseguridad (mas muertos que con Peña y Calderon), y la economia por los suelos, y la tonta ausencia de estrategia vs el COVID, pues no autorizo pruebas para detectarlo como en la mayoria de Paises del mundo se hicieron y funciono. Todo para ahorrar dinero. La gente es tan tonta para comprender esa situacion? Mete a la carcel a corruptos sin proteger a tus testaferros Obrador, pero pon atencion lo mas importante.
ResponderBorrarNo dinero ala rata mayor de Tamaulipas se a enriquecido asquerosa mente son unas ratas los cabeza de vaca y los tamaulipecos estamos asta la madre de su gobierno que le quede claro Tamaulipas no es de este baboso gobernante es de los ciudadanos No. Más. Pan en la elección próxima Morena u si tenemos que decidir por otro que sea el pri ya le conocemos sus mañas pero hay trabajo para todos no para una bola de ratas como estos panistas
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