Una campaña publicitaria antimigrante lanzada por el Gobierno de Estados Unidos comenzó a transmitirse en la televisión mexicana en un spot de la Secretaria de Seguridad Nacional estadounidense, Kristi Noem, como una “campaña publicitaria multimillonaria a nivel nacional e internacional”, se transmite durante partidos de futbol y horarios estelares.
“Permítanme transmitir un mensaje del presidente (Donald) Trump al mundo: Si consideras ingresar ilegalmente a Estados Unidos, ni lo pienses”, comienza Noem en el comercial que comenzó a transmitirse en días recientes.
“Seré clara: Si vienen a nuestro país e infringen nuestras leyes, los perseguiremos. Los delincuentes no son bienvenidos en Estados Unidos’”, agrega.
La Campaña Antimigrante Estadounidense en México: Un Análisis de sus Implicaciones Legales y Sociales
Esta campaña publicitaria lanzada por el gobierno de Estados Unidos en televisión mexicana resulta profundamente problemática desde múltiples perspectivas. Los anuncios protagonizados por Kristi Noem que advierten a migrantes no solo representan una intromisión externa en medios nacionales, sino que también vulneran principios jurídicos fundamentales del marco legal mexicano.
Violaciones al Marco Legal Mexicano
La transmisión de esta propaganda antiinmigrante en México transgrede importantes normativas nacionales que protegen contra la discriminación y salvaguardan la dignidad humana de todas las personas.
Contradicción con Principios Constitucionales
El contenido del anuncio entra en conflicto directo con el Artículo 1° de la Constitución mexicana, que prohíbe expresamente “toda discriminación motivada por origen étnico o nacional” y cualquier acto que “atente contra la dignidad humana”[3]. Al presentar a personas migrantes, particularmente de origen latino, como potenciales criminales, el mensaje viola este principio fundamental del orden jurídico mexicano.
Infracción a la Ley de Telecomunicaciones
La Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión establece claramente en su Artículo 245 que “la publicidad no deberá presentar conductas o situaciones en las que la falta de un producto o servicio sea motivo de discriminación de cualquier índole”. El spot estigmatiza no solo a migrantes, sino también a personas de piel morena y origen humilde en México, incurriendo en una clara violación a esta norma.
El académico Ernesto Villanueva, investigador de la UNAM y especialista en derechos digitales, ha señalado que “quienes aparecen ahí como criminales o delincuentes no son anglosajones, ni rubios, ni blancos; generalmente son mexicanos. Hay una generación de un estereotipo de lo que para ellos es una persona con tendencia a ser criminal.
Responsabilidad Editorial de los Medios Mexicanos
Las televisoras mexicanas, específicamente Televisa que ha emitido estos anuncios, tienen una responsabilidad ética y legal en este asunto que parece estar siendo ignorada.
Facultad para Rechazar Contenido Inapropiado
Jorge Bravo, presidente de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (AMEDI), ha señalado que aunque las televisoras pueden vender espacios publicitarios, también pueden “reservarse el derecho de rechazar contenido” que resulte contrario al interés nacional. Bravo considera particularmente preocupante que “una empresa como Televisa, históricamente empática con la comunidad migrante, haya decidido transmitir este mensaje”.
Las televisoras tienen el derecho y la responsabilidad de “reservarse la venta de espacios si el contenido a transmitir resulta contrario a los principios del interés nacional o vulnera los derechos fundamentales”. Al no ejercer este derecho, están permitiendo la difusión de un mensaje discriminatorio que afecta a millones de mexicanos y latinoamericanos.
Implicaciones Diplomáticas y Soberanía Nacional
La transmisión de estos anuncios ocurre en un contexto diplomático complejo que levanta cuestionamientos sobre la soberanía mediática de México.
Contexto de la Reunión Noem-Sheinbaum
Es notable que la difusión de estos spots comenzara poco después de la visita de Kristi Noem a Palacio Nacional, donde fue recibida por la presidenta Claudia Sheinbaum el 28 de marzo. Durante esta reunión, supuestamente se dialogó sobre migración bajo principios de “respeto a derechos humanos y soberanía”. Sin embargo, la posterior transmisión de estos anuncios parece contradecir el espíritu de ese encuentro.
Noem afirmó haber presentado a Sheinbaum “una lista de temas de seguridad fronteriza que el Presidente Trump quisiera ver implementados”, lo que sugiere una presión diplomática que podría estar relacionada con la permisividad hacia estos anuncios en territorio mexicano.
Injerencia Extranjera en Medios Nacionales
La presencia de esta propaganda oficial estadounidense en horarios de máxima audiencia de la televisión mexicana representa un caso inusual de injerencia extranjera en los medios de comunicación nacionales. Esta situación ha levantado cuestionamientos sobre “la intromisión de propaganda extranjera en medios nacionales”[8], especialmente cuando el contenido contradice principios fundamentales del marco jurídico mexicano.
Impacto Social y Estigmatización
El mensaje del anuncio va más allá de una simple advertencia sobre políticas migratorias; constituye una narrativa que criminaliza y estigmatiza a poblaciones vulnerables.
Criminalización de Migrantes
El contenido del spot “vincula de forma directa a personas migrantes con actividades criminales”, utilizando imágenes selectivas y un lenguaje que refuerza la asociación entre migración y delincuencia. Este tipo de representación no solo afecta a quienes intentan migrar, sino que también daña la imagen de las comunidades mexicanas y latinoamericanas en general.
Refuerzo de Estereotipos Raciales
Las imágenes utilizadas en el anuncio muestran exclusivamente a “personas de piel morena, sin representar a personas anglosajonas”, lo que refuerza estereotipos raciales negativos. El spot muestra “imágenes de personas, principalmente latinas, que están siendo detenidas o cruzando la frontera, así como con tomas vinculadas al tráfico de drogas”, creando una asociación visual entre origen étnico y criminalidad.
Conclusión: Una Campaña Que Excede Los Límites Legales y Éticos
Existen múltiples razones legales, éticas y diplomáticas que demuestran que la difusión de este mensaje antimigrante en televisión mexicana no puede justificarse como un simple ejercicio de libertad de expresión o política migratoria extranjera cuando:
- Viola principios constitucionales y leyes específicas mexicanas contra la discriminación.
- Ignora la responsabilidad editorial de los medios de comunicación nacionales.
- Representa una injerencia extranjera que desafía la soberanía mediática.
- Estigmatiza y criminaliza a poblaciones vulnerables basándose en estereotipos étnicos y raciales.
El que el gobierno mexicano haya detectado estas irregularidades y advertido sobre la contravención a leyes en materia de discriminación, sin que esto haya detenido la transmisión de los spots, plantea serias interrogantes sobre la aplicación efectiva de la legislación nacional y la capacidad de las instituciones para proteger el interés público frente a presiones externas.
En un país donde millones de ciudadanos tienen familiares que han migrado a Estados Unidos, la normalización de mensajes que criminalizan a los migrantes representa no solo un problema legal, sino también un asunto de dignidad nacional que merece una respuesta contundente de las autoridades y la sociedad civil.
Con informacion: ELNORTE/
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