La resolución del jurado de la corte de Brooklyn que declaró culpable al líder del cártel de Sinaloa Joaquín “El Chapo” Guzmán dejó un mal sabor de boca en México a pesar de que se prevé una sentencia de cadena perpetua para junio próximo por 10 delitos de los que se acusaba y que excluyó los asesinatos y horrores de lado sur de la frontera.
“Yo hubiera deseado que aquí se le juzgara y se le condenara, y que no fuera otro país el que pone un juicio en defensa de sus propios intereses, no en defensa de los intereses de México”, indicó Tonatiuh Bravo, coordinador de los diputados del Movimiento Ciudadano, quien puso el dedo en la llaga en una vieja demanda: combate a la impunidad.
“Es una de las grandes asignaturas pendientes del país y llamo a la autoridades a actuar en consecuencia”.
Entre los actos ilegales que apuntan al capo en México destacan los múltiples asesinatos, torturas, desapariciones y violaciones que cometió en defensa, venganza y crecimiento de su organización e intereses propios como el uso de menores de edad para actos sexuales, según relatos ventilados en la prensa local a lo largo de décadas y en la misma corte de EEUU .
Isaías Valdez (quien fue un testigo protegido) contó haber visto al Chapo matar a un integrante del cartel de los Arellano Félix a quien previamente habían quemado con una plancha en toda la espalda. “La playera la traía pegada en la piel”.
El enriquecimiento ilícito es otro tema pendiente. Mientras en Estados Unidos el político republicano Ted Cruz insistió en su propuesta de construir el muro fronterizo con los recursos confiscados a El Chapo, en México ni siquiera hay un cálculo oficial de éstos.
En 2012 Forbes cifró la fortuna de Guzmán Loera en alrededor de 1,000 millones de dólares mientras la fiscalía de NY dijo hasta el año pasado que iba tras 14,000 millones de dólares.
De acuerdo con analistas en seguridad, el dinero está repartido por todo el mundo gracias a una compleja estructura financiera para ocultar sus ganancias. En México, el Departamento del Tesoro de EEUU señala que el capo cuenta con empresas agrícolas, farmacias, comercios y centros cambiarios vinculados a familiares y amigos en Sinaloa, Chihuahua, Durango, Guerrero, Quintana Roo y Ciudad de México.
“La familia y los cómplices van a seguir gozando del dinero mal habido de los bienes inmuebles obtenidos con procedencia criminal”, advirtió el analista en temas de seguridad de la Universidad Nacional Autónoma de México, Javier Oliva. “Las autoridades deben dar prontitud al tema de la confiscación de bienes”.
Por el mismo camino también quedan en libertad, el resto de los integrantes del cártel de Sinaloa. “Quedan muchos lideres aquí. Ismael El Mayo Zambada, por ejemplo, y la sentencia al Chapo, como todo el juicio, no influirá en lo más mínimo para que se dejen de enviar toneladas de droga desde México”, dijo José Reveles, autor del libro “El Chapo. Entrega y Traición”.
Fuente.-Diario Nueva York/
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