En un ataque a balazos, un policía fue asesinado por un delincuente que le robó la patrulla, esta madrugada en la Colonia del Norte, en Monterrey.
Tras el ataque el agresor huyó a bordo de la unidad policiaca que posteriormente estrelló contra una luminaria en el cruce de las avenidas Ruiz Cortines y Pedro Infante, en el poniente de Monterrey.
En ese lugar el presuntos delincuente, identificado como Isaí Benavides Cisneros, de 35 años, fue abatido por los elementos policiacos que lo perseguían.
El oficial caído fue identificado como Raymundo Vázquez García.
Los hechos se registraron alrededor de las 4:00 horas cuando el sospechoso disparó contra el elemento de la Policía de Monterrey que se encontraba en el cruce de la Avenida Alfonso Reyes y Zona Norte.
De manera extraoficial trascendió que en el ataque otro elemento de la misma corporación quedó lesionado, aunque esto no ha sido confirmado por las autoridades.
Aparentemente se trataría de un pistolero que llegó a bordo de un vehículo, el cual abandonó en este punto para huir en la patrulla con dirección al norponiente.
Tras el reporte, unidades policiacas se movilizaron hasta ubicar al ocupante de la patrulla robada, quien en su afán de escapar subió a un camellón y derribó una luminaria en la Avenida Ruiz Cortines, frente a la Colonia Cumbres Jade.
Tras el impacto, el presunto delincuente bajó de la unidad y al parecer habría realizado detonaciones al escapar corriendo. En ese lugar fue abatido.
Mientras tanto, en el lugar del ataque, elementos de la Cruz Roja encontraron el cuerpo de un elemento policiaco ya sin vida quien presentaba un disparo en la cabeza.
A unos metros del cuerpo fue localizada el arma del uniformado, por lo que se cree que el agresor lo despojó de la misma tras dispararle, pero la abandonó en el sitio antes de huir.
Factores de riesgo en operativos rutinarios
Este ataque contra elementos policiales en Monterrey, expone vulnerabilidades críticas en los protocolos de seguridad y plantea reflexiones profundas sobre los riesgos inherentes a la labor policial y evidencia múltiples fallas operativas.
- Imprevisibilidad en patrullajes: El ataque ocurrió durante un operativo aparentemente rutinario, demostrando cómo situaciones cotidianas pueden escalar rápidamente a violencia extrema.
- Vulnerabilidad tecnológica: El robo de la unidad policial sugiere posibles deficiencias en sistemas de seguridad vehicular, permitiendo su uso por el agresor durante 4.3 km hasta el choque final.
- Exposición física: La muerte por disparo en la cabeza indica proximidad del atacante, planteando dudas sobre protocolos de aproximación a sospechosos.
Impacto operativo y social
- Colapso vial inmediato: Los cierres en Alfonso Reyes y Ruiz Cortines afectaron el tránsito durante más de 4 horas, mostrando cómo incidentes policiales impactan la vida ciudadana.
- Efecto psicológico en cuerpos policiales: La pérdida de un compañero en circunstancias violentas genera estrés postraumático, agravado por la falta de confirmación oficial sobre el segundo oficial lesionado.
Lecciones estratégicas:
- Necesidad de refuerzo en protocolos de respuesta inmediata
- Implementación de sistemas antirrobo en vehículos oficiales
- Capacitación en manejo de situaciones de alto riesgo
- Mecanismos de apoyo emocional para familiares de sus compañeros.
El incidente subraya la paradoja de la seguridad pública: quienes protegen a la ciudadanía enfrentan peligros impredecibles que requieren recursos especializados y respaldo institucional constante.
La combinación de valentía individual y fallas sistémicas crea un escenario donde cada salida de servicio se convierte en incertidumbre vital para los elementos de seguridad que no saben si van a regresar a sus hogares.
Con informacion: ELNORTE/
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