«QUIEN NADA DEBE…NADA TEME ?»: «GIOVANNA ACUSA ABUSO SEXUAL de SENADOR de MORENA y el RESPONDE con COMUNICADO POLITICO AUTOVICTIMIZANTE con SELLO del SENADO»…ella muestra patrones coherentes con las víctimas reales de violencia institucional y de género.

La postura de Giovanna F. Salem en redes sociales es directa y acusatoria contra el Senador de Morena por Guanajuato,Francisco Ricardo Sheffield Padilla y su círculo próximo, refiriéndose tanto a abuso sexual, violencia de género, uso indebido del cargo, amenazas y acoso, así como un contexto de impunidad institucional que, según ella, protege a los funcionarios acusados.

Por otro lado, el comunicado del senador Sheffield se centra principalmente en denunciar un “montaje judicial y mediático”, ,el sello de Morena,argumentando que la estrategia detrás de los ataques es distraer al público con denuncias infundadas, filtraciones indebidas, manipulación mediática y repeticiones en medios, pero elude dar testimonios, detallar acusaciones o responder directamente al fondo de los señalamientos.

Contrastes irreverentes

• Giovana Salem expone que fue citada y denigrada por el senador Sheffield en sus comunicados, aunque sin mencionar su nombre directamente, y señala un patrón de violencia institucional y de amenazas que van desde el acoso hasta intentos de demandas por parte del círculo de Sheffield (David Aguilar), contextualizando la complicidad y el uso del aparato institucional para revictimizar.
• El senador, en su comunicado, nunca menciona a Salem, sino que enuncia el proceso de “montaje”—denuncia, filtración de carpeta, testimonio clave, amplificación mediática—, pero no habla de las víctimas ni reconoce ningún contexto de género o abuso, sino que reduce el conflicto a manejo mediático con fines políticos.
• Giovana Salem exige que el senador se quite el fuero y que la justicia se aplique sin privilegios, señalando la frase “el que nada debe, nada teme” de manera desafiante, mientras Sheffield la utiliza para desacreditar públicamente el proceso y presentarse como dispuesto a colaborar.

Análisis de sesgo del comunicado

• El comunicado de Sheffield minimiza el fondo de las denuncias y las reduce a una táctica de desprestigio electoral, lo cual es un sesgo clásico de defensa institucional, pues nunca reconoce ni da cuenta de los señalamientos graves de Salem (abuso sexual, violencia de género, amenazas, complicidad institucional).
• Se centra en procedimientos (denuncia, filtración, testigo, medio hostil, repetición) pero nunca en las implicaciones éticas o humanas del caso; emplea la retórica de “narrativa inverosímil”, “escándalo mediático”, “montaje”, anulando el contexto de género y el testimonio de la víctima.
• El senador se coloca como “víctima de ataque” y no como funcionario obligado a responder por señalamientos graves, eludiendo toda responsabilidad directa y terciarizando el conflicto como consecuencia de “adversarios políticos”.

Irreverencia frente al discurso político

• El comunicado de Sheffield utiliza clichés y frases hechas (“el que nada debe, nada teme”) para arroparse en la reducción del conflicto a un pleito político, mientras Salem le responde con la misma frase para exigir hechos y desafiar los privilegios institucionales (“quítese el fuero”).
• La irreverencia en el análisis subraya que el comunicado es hábil retóricamente pero falla en transparencia y empatía; si el senador estuviera libre de culpa y realmente dispuesto a colaborar, lo haría sin el blindaje político ni el desprecio por las víctimas.
• Sheffield convierte la denuncia en espectáculo mediático (“circo”), pero Salem revierte la acusación mostrando que la lucha por justicia y dignidad pública no es espectáculo, sino sobrevivencia y defensa de derechos.

El comunicado del senador Sheffield revela un sesgo defensivo, institucional y despersonalizador, mientras que Giovana Salem en redes articula una crítica frontal, irreverente y desafiante ante la impunidad y el poder político constituido en una lacra social.

Por que Giovanna estaria diciendo la verdad ?

Giovanna Salem podría estar diciendo la verdad y el senador no, por diversas razones que, al analizarlas en serio y sin tapujos, revelan tendencias, evidencia pública y antecedentes documentados que inclinan la balanza hacia la verosimilitud de las denuncias hechas por Salem.

Evidencia, patrones y credibilidad

• Giovanna Salem ha presentado denuncias formales ante instancias oficiales: Fiscalía General de la República, Comisión Nacional de Derechos Humanos y Secretaría de la Función Pública, además de aportar pruebas como mensajes, audios y documentos que respaldan sus señalamientos contra David Aguilar y en el entorno de Sheffield. Las denuncias no son solo grilla de redes: hay carpetas abiertas y una investigación en curso.
• El testimonio de Salem detalla persecución, intimidaciones, amenazas de muerte y estrategias institucionales para silenciar su denuncia. Esta narrativa es consistente con la experiencia de mujeres que denuncian abuso sexual y violencia de género en espacios de poder público mexicano.
• Otras mujeres han denunciado a Sheffield por violencia política de género; de hecho, ha sido sancionado y obligado a disculparse públicamente por ejercer violencia política contra alcaldesas de Guanajuato, lo que muestra un patrón de conducta y da peso a los señalamientos de Salem.

Contexto institucional y reacción del senador

• El comunicado del senador Sheffield evade responder a los hechos específicos y las víctimas, centrándose en la idea de “montaje mediático”, lo cual es una forma clásica de minimizar, desviar y deslegitimar las denuncias, en vez de enfrentar el fondo del conflicto.
• Nunca se menciona ni se refuta el contenido real de las denuncias, y Sheffield se coloca como víctima, eludiendo toda referencia a antecedentes y contextos de abuso o acoso, pese a que existen expedientes, reportes y medios que documentan su historial.

Falta de imparcialidad y encubrimiento

• David Aguilar, señalado por Salem, fue miembro del Comité de Ética de Profeco cuando comenzaron las denuncias, lo cual pone en duda la imparcialidad de la investigación interna y dificulta el acceso a justicia para la víctima. El poder de los funcionarios sobre los mecanismos de control es un obstáculo recurrente.
• La CNDH concluyó en un expediente que no había elementos suficientes de violación de derechos humanos, pero admitió la existencia de falta de colaboración institucional para recabar pruebas psicológicas y recomendó continuar el proceso penal y administrativo, lo que habla de la dificultad sistemática para victimizadas en obtener justicia.

En síntesis: Giovanna Salem muestra patrones coherentes con las víctimas reales de violencia institucional y de género, mientras Sheffield y su círculo exhiben respuestas de defensa política, ocultamiento y poder, sin evidencia de transparencia ni disposición genuina a enfrentar el escrutinio legal.

Con informacion: @SheffieldGTO/ @Giovanna Salem/