EL “AGUERRIDO PARTE de GUERRA”: “MENSAJE es DEVASTADOR el ESTADO NO PUEDE,NO SABE o NO QUIERE PROTEGER VIDA y PATRIMONIO de SINALOENSES”…la esperanza quedó en manos del miedo.”

Por donde se mire y desde cualquier ángulo, el “parte de guerra” diario de Sinaloa ,es la evidencia más contundente del fracaso de la estrategia de las autoridades civiles y militares. 

La crisis de seguridad no solo persiste, sino que se agrava, y la respuesta oficial sigue siendo insuficiente, reactiva y desconectada de las necesidades reales de la población. 

La violencia sigue escalando y condenando a los sinaloenses a vivir en un estado de excepción permanente donde el poder proactivo del Cartel de Sinaloa es mas perceptible que el poder reactivo de las autoridades.

El “parte de guerra” diario de Sinaloa, con cifras como siete homicidios, una osamenta, 33 autos robados y los 6 levantados del promedio de un solo día, exponen de manera brutal el fracaso estructural del gobierno, la policía y las fuerzas militares para proteger a la ciudadanía y garantizar condiciones mínimas de seguridad y convivencia.

Diagnóstico de un Estado Fallido en Seguridad

1. Colapso Policial y Militar

• Sinaloa tiene una de las tasas más bajas de policías estatales del país: apenas 0.33 por cada mil habitantes, cuando la ONU recomienda al menos tres. Esto significa que la policía estatal es meramente testimonial y está absolutamente rebasada, incapaz de contener ni prevenir delitos patrimoniales, mucho menos de enfrentar a grupos criminales armados y organizados de los que han sido sus complices transexenalmente,ni se diga del gobernador Moreno narco,señalado en video por la misma policía antes de morir en manos de quienes fueron sus amigos.

• La respuesta federal ha sido militarizar el estado: en noviembre de 2024 había 11,000 soldados desplegados, pero su presencia, lejos de pacificar, apenas contuvo momentáneamente la violencia, y hoy es notoriamente insuficiente, pero ha si ha sido siempre.

2. Escalada de Delitos de Alto Impacto

• La incidencia delictiva se ha disparado desde el inicio de la guerra entre facciones del crimen organizado en septiembre de 2024. Solo en los primeros meses de 2025, los homicidios dolosos aumentaron 165%, la privación de la libertad 201% y el robo de vehículos 140% respecto al mismo periodo del año anterior.
• En ocho meses, Sinaloa acumula casi 1,400 homicidios, casi 1,500 desapariciones y 5,144 robos de vehículos, cifras que el propio gobierno estatal reconoce como “graves” y que reflejan la incapacidad de las autoridades para revertir la tendencia.

A Flourish chart

3. Estrategia de Seguridad Estancada

• Los enfrentamientos, bloqueos carreteros y asesinatos se han normalizado. El promedio de homicidios diarios ha vuelto a niveles de crisis: casi seis asesinatos por día en mayo de 2025.
• La coordinación entre fuerzas federales y estatales no ha logrado reducir los delitos ni devolver la paz. La estrategia se ha limitado a operativos reactivos, detenciones espectaculares ensalsadas y embellecidas por el Secretario e Seguridad Federal de moral “non sancta” con oficio de “supermentiroso”, un vulgar cuentachiles y engañabobos.

4. Impunidad y Descomposición Institucional

• La impunidad es la regla: las tasas de resolución de delitos son mínimas y la percepción social de corrupción, ineptitud y cooptación de las policías es generalizada y cuando ya no sirven al cartel , los mata.

La Fiscalía y la policía estatal,tradicionalmente aliada del Cartel, lejos de ser fortalezas, han sido sus eslabones de la cadena de valor que empiedra criminales.La falta de profesionalización,ganas y recursos permiten que la violencia patrimonial y letal se mantenga en niveles inaceptables.

Tan graves, que cuando a los ciudadanos y sus hijos que tambien son ciudadanos ,no los mata el Cartel,lo hace el ejercito por cobardía, por cierto impune porque se creen ciudadanos de excepción,en vez de ser ciudadanos excepcionales.

Consecuencias para la Sociedad

• La vida cotidiana de los sinaloenses está marcada por el miedo, la vulnerabilidad y el desplazamiento forzado. Más de 1,100 familias han tenido que abandonar sus hogares por la violencia.
• La economía local sufre por la inseguridad: el robo de vehículos y a comercios afecta directamente el patrimonio y el ánimo social.

El mensaje a la sociedad es devastador: el Estado no puede, no sabe o no quiere cumplir su función básica de proteger la vida y los bienes de sus ciudadanos.

Con informacion: NOROESTE/ MEDIOS