De 5 mil millones de pesos desviados con la Estafa Maestra, mil 267 millones fueron usados en campañas electorales y promociones políticas, según Emilio Zebadúa, ex oficial mayor de Sedatu.
En sus revelaciones a la Fiscalía General de la República, el chiapaneco y quien fuera brazo derecho de Rosario Robles dijo que Robles conoció y utilizó la triangulación del dinero público que iba a Universidades pero regresaba a funcionarios públicos.
De los 5 mil 73 millones 358 mil 846 pesos desviados por la Sedatu y la Sedesol en la denominada Estafa Maestra 40 por ciento -unos 2 mil millones de pesos- regresaba a funcionarios federales. De esa cantidad, mil 200 millones de pesos eran para campañas. Los 800 millones restantes no se reveló su destino.
Las universidades se quedaban con el 60 por ciento del contrato.
"Es de mencionar que se sabe que el porcentaje aproximado que se regresaba por las empresas subcontratadas para los fines descritos era aproximadamente del 40 por ciento del total del monto contratado por parte de la Secretaría con universidades y organismos públicos descentralizados", declaró.
"La secretaria Robles a través de unidades técnicas jerárquicamente subordinadas a su oficina, conoció y utilizó dichos mecanismos de contratación para desviar recursos hacia la agenda extra institucional de la secretaría, así como a una agenda político-electoral específica".
En su testimonio rendido el 19 de octubre pasado, con el que busca el criterio de oportunidad ante la FGR, el ex colaborador de Robles enumera 15 convenios de la Sedatu por más de mil 687 millones de pesos, como ejemplo de algunos casos en los que desviaron dinero y se obtuvo el citado porcentaje.
Zebadúa define la denominada Estafa Maestra como un mecanismo implantado para "proveer recursos permanentemente durante todo el sexenio para la promoción publicitaria político-electoral del presidente, su gobierno y su partido político".
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