La Fiscalía General de la República está cuidando al ex director de Pemex, Emilio Lozoya: no pidió prisión preventiva ni fianza en su contra y difícilmente pisará la cárcel.
Luego de 11 días de ser extraditado a México y estar hospitalizado por supuestos problemas de salud, ayer finalmente se realizó la audiencia por video-conferencia para vincularlo a proceso.
Un juez federal lo vinculó anoche por lavado de dinero en el caso de una planta chatarra que fue comprada en sobreprecio durante su gestión.
El juez ordenó colocarle un brazalete electrónico y vigilancia permanente mientras permanezca en el Hospital Ángeles del Pedregal.
Sin embargo, tras ser dado de alta, Lozoya -quien negocia convertirse en testigo colaborador- tendrá una libertad provisional con la única restricción de salir del País.
Según la FGR, la compra de Agronitrogenados en el Gobierno de Enrique Peña causó una afectación al patrimonio de Pemex calculada en unos 8 mil millones de pesos.
Pero, aún así, Lozoya no pagará fianza.
Después de 14 meses de estar prófugo de la justicia mexicana, al ex director de Pemex le será colocado un brazalete electrónico, se quedará sin visa y pasaporte, y tendrá que acudir cada 15 días a firmar a la Unidad de Medidas Cautelares.
El juez Artemio Zúñiga Mendoza consideró que existen datos de prueba suficiente para suponer que el ex director de Pemex recibió un soborno de 3.5 millones de dólares de Altos Hornos de México para que la empresa productiva del Estado adquiriera la planta "chatarra" de Agronitrogenados.
La defensa de Lozoya confirmó que el ex director de Pemex negocia un beneficio para convertirse en testigo colaborador de la FGR en las investigaciones contra integrantes de "un aparato organizado de poder".
Hoy, Lozoya tendrá una segunda audiencia, pero ahora por los supuestos sobornos que recibió de la empresa brasileña Odebrecht.
Un juez federal lo vinculó anoche por lavado de dinero en el caso de una planta chatarra que fue comprada en sobreprecio durante su gestión.
El juez ordenó colocarle un brazalete electrónico y vigilancia permanente mientras permanezca en el Hospital Ángeles del Pedregal.
Sin embargo, tras ser dado de alta, Lozoya -quien negocia convertirse en testigo colaborador- tendrá una libertad provisional con la única restricción de salir del País.
Según la FGR, la compra de Agronitrogenados en el Gobierno de Enrique Peña causó una afectación al patrimonio de Pemex calculada en unos 8 mil millones de pesos.
Pero, aún así, Lozoya no pagará fianza.
Después de 14 meses de estar prófugo de la justicia mexicana, al ex director de Pemex le será colocado un brazalete electrónico, se quedará sin visa y pasaporte, y tendrá que acudir cada 15 días a firmar a la Unidad de Medidas Cautelares.
El juez Artemio Zúñiga Mendoza consideró que existen datos de prueba suficiente para suponer que el ex director de Pemex recibió un soborno de 3.5 millones de dólares de Altos Hornos de México para que la empresa productiva del Estado adquiriera la planta "chatarra" de Agronitrogenados.
La defensa de Lozoya confirmó que el ex director de Pemex negocia un beneficio para convertirse en testigo colaborador de la FGR en las investigaciones contra integrantes de "un aparato organizado de poder".
Hoy, Lozoya tendrá una segunda audiencia, pero ahora por los supuestos sobornos que recibió de la empresa brasileña Odebrecht.
'Fui intimidado'
Durante la audiencia que fue reportada de forma inédita vía WhatsApp por el Consejo de la Judicatura Federal, el ex director de Pemex aseguró que fue presionado y advirtió que denunciará a los responsables.
"Fui sistemáticamente intimidado, presionado, instrumentalizado", declaró.
"Denunciaré y señalaré a los autores de estos hechos y vuelvo a reiterar mi compromiso de colaborar con las autoridades".
Fuente.-
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