Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío y se come lento. Según declaraciones de personas cercanas al juicio de Joaquín "El Chapo" Guzmán, es precisamente lo que ocurre con el capo exlíder del cártel de Sinaloa que enfrenta la posibilidad de cadena perpetua en Estados Unidos.
El 24 de febrero pasado, Alfredo López Núñez, de 53 años, fue ejecutado en el segundo piso de su vivienda en Culiacán, Sinaloa.
El sujeto no tenía antecentes penales y, aparentemente tampoco relación con los cárteles de la droga, pero era hermano de Dámaso López Núñez, "El Licenciado", quien un mes antes había declarado en contra de Joaquín "El Chapo" Guzmán Loera en una corte de Nueva York.
"El Licenciado", considerado alguna vez mano derecha de "El Chapo" y gente de toda su confianza, pues fue quien le ayudó a concretar su primera fuga del penal de Puente Grande, intentó ocupar el lugar de su jefe.
Las declaraciones de "El Licenciado" involucraron además a Emma Coronel, la esposa de "El Chapo", en actos ilícitos como el operar la fuga de "El Chapo".
Circula la versión de que inició una venganza que el cártel de Sinaloa que comenzó en 2017, cuando el 21 de junio el cuñado de López Núñez, Luis Fernando Gaxiola, exsíndico de El Dorado y exregidor priista, fue hallado sin vida en la salida sur de Culiacán, luego de haber sido secuestrado.
Mike Vigil, exdirector de operaciones internacionales de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), reveló que supuestamente el homicidio se trató de una venganza de Joaquín Guzmán Loera, "El Chapo".
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