Lorena Martínez, titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), explicó dos de las problemáticas que vive la institución al momento de realizar verificaciones contra gasolineras. Una de ellas es el hecho de concesionarios que envían hasta “matones” para “recibir” a verificadores.
En 2012 la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco)se propuso ampliar el número de personal y brigadas para recorrer todo el país a fin de verificar a las gasolineras y esto se ha traducido en que las multas a estos establecimientos se han incrementado de forma importante.
De enero a junio de 2015 hubo 567 operativos que permitieron aumentar en 200 por ciento el número de sanciones y cerrar más de 200 gasolineras.
Por lo que toca al monto de las multas, éste aumentó de 42 a 67 millones de pesos durante los seis primeros meses de 2015 y la previsión de Profeco es cerrar el año con un monto de 160 millones de pesos, cantidad cuatro veces superior a los 37 millones de 2012.
En entrevista telefónica con Fórmula Financiera, la titular de la Profeco, Lorena Martínez, explicó que no todas estas sanciones tienen que ver con la venta de litros incompletos, las cuales incluso se han reducido. Abundó que esto se debe a la implementación de la norma que establece el control tecnológico del despacho de gasolina.
Sin embargo, Lorena Martínez reconoció que "hay zonas del país en donde nuestros verificadores han tenido problemas serios para poder desarrollar su trabajo" como Tamaulipas, la zona norte de Veracruz y en Sinaloa, donde han sido perseguidos e incluso se han tenido que retirar porque su vida estaba en riesgo.
En zonas como éstas se procura que vayan acompañados de elementos de las Secretarías de Defensa, Marina o bien de la Policía Federal. Fuera de esas regiones, y en términos generales, el personal de la Profeco puede desempeñar su labor con mucha regularidad, aseguró su titular.
"Lo que sí debemos de hacer es seguir intensificando las brigadas" y destacó los casos en particular de Veracruz, Chiapas, el Distrito Federal y Estado de México que se distingue por ser la entidad que registra el mayor número de sanciones.
Sobre el monto de las sanciones, Lorena Martínez explicó que en general van de los 250 mil pesos a los 3 millones 800 mil pesos, en caso de que sea la primera vez que se multa a una gasolinera y, ante la reincidencia, se puede llegar a los siete millones de pesos.
Explicó que no todas las gasolineras sancionadas estaban robando al consumidor; hay otras faltas, por ejemplo, la multa oscila entre 25 y 30 mil pesos para los establecimientos que no tienen la pila de repuesto que impide interrumpir el servicio y llevar un control de que la gasolina vendida proviene efectivamente de Pemex.
Lorena Martínez agregó que "la intención de dar a conocer estas cifras es seguir invitando a los consumidores a presentar una denuncia".
Finalmente y en otro asunto, la titular de Profeco recordó que esta semana se puso en marcha el Programa de Verano de este órgano con presencia en los diez aeropuertos más importantes del país y las centrales camioneras de la ciudad de México, entre otras instalaciones, donde hay módulos de atención de 8 de la mañana a 10 de la noche, además de que hay una guardia permanente de los teléfonos de la Profeco, como el clásico 5568 8722.
De enero a junio de 2015 hubo 567 operativos que permitieron aumentar en 200 por ciento el número de sanciones y cerrar más de 200 gasolineras.
Por lo que toca al monto de las multas, éste aumentó de 42 a 67 millones de pesos durante los seis primeros meses de 2015 y la previsión de Profeco es cerrar el año con un monto de 160 millones de pesos, cantidad cuatro veces superior a los 37 millones de 2012.
En entrevista telefónica con Fórmula Financiera, la titular de la Profeco, Lorena Martínez, explicó que no todas estas sanciones tienen que ver con la venta de litros incompletos, las cuales incluso se han reducido. Abundó que esto se debe a la implementación de la norma que establece el control tecnológico del despacho de gasolina.
Sin embargo, Lorena Martínez reconoció que "hay zonas del país en donde nuestros verificadores han tenido problemas serios para poder desarrollar su trabajo" como Tamaulipas, la zona norte de Veracruz y en Sinaloa, donde han sido perseguidos e incluso se han tenido que retirar porque su vida estaba en riesgo.
En zonas como éstas se procura que vayan acompañados de elementos de las Secretarías de Defensa, Marina o bien de la Policía Federal. Fuera de esas regiones, y en términos generales, el personal de la Profeco puede desempeñar su labor con mucha regularidad, aseguró su titular.
"Lo que sí debemos de hacer es seguir intensificando las brigadas" y destacó los casos en particular de Veracruz, Chiapas, el Distrito Federal y Estado de México que se distingue por ser la entidad que registra el mayor número de sanciones.
Sobre el monto de las sanciones, Lorena Martínez explicó que en general van de los 250 mil pesos a los 3 millones 800 mil pesos, en caso de que sea la primera vez que se multa a una gasolinera y, ante la reincidencia, se puede llegar a los siete millones de pesos.
Explicó que no todas las gasolineras sancionadas estaban robando al consumidor; hay otras faltas, por ejemplo, la multa oscila entre 25 y 30 mil pesos para los establecimientos que no tienen la pila de repuesto que impide interrumpir el servicio y llevar un control de que la gasolina vendida proviene efectivamente de Pemex.
Lorena Martínez agregó que "la intención de dar a conocer estas cifras es seguir invitando a los consumidores a presentar una denuncia".
Finalmente y en otro asunto, la titular de Profeco recordó que esta semana se puso en marcha el Programa de Verano de este órgano con presencia en los diez aeropuertos más importantes del país y las centrales camioneras de la ciudad de México, entre otras instalaciones, donde hay módulos de atención de 8 de la mañana a 10 de la noche, además de que hay una guardia permanente de los teléfonos de la Profeco, como el clásico 5568 8722.
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