La caída de 36% en la inversión pública federal entre enero y julio de 2025 (y 63% solo en julio) significa que el gobierno está gastando mucho menos en obras, carreteras, hospitales, escuelas y proyectos de infraestructura que afectan la vida diaria, y el recorte es tan grande que no se veía un bajón así en décadas.
Explicación a nivel de calle
Traducido sin pelos en la lengua: si antes el gobierno era el “papá patrocinador” que armaba fiestas (obras, calles nuevas, puentes, hospitales, metros, trenes, etc.), ahora anda “amarrado de billete” y ni para las chelas alcanza. Los recursos que antes se usaban para que la ciudad no se cayera a pedazos, poner luz, arreglar baches, mejorar escuelas o hospitales, pues ahora brillan por su ausencia. El pavimento queda sin tapar, los hospitales sin remodelar, las escuelas con goteras, y olvídense de obras nuevas: ni para una banca de parque hay.

¿Por qué cayó tanto la inversión?
- El gobierno decidió apretarse el cinturón y prefirió no tocar el presupuesto del gasto corriente (lo que se paga en sueldos, burocracia y cheques quincenales).
- No hubo reforma fiscal, así que entró menos lana y, por tanto, se cerró la llave de los proyectos de inversión.
- 2024 fue año electoral y se aceleraron los megaproyectos; ahora, bajó la fiesta.
- México tiene menos ingresos públicos y prefiere que no aumente mucho la deuda.
¿En qué pega esto a la gente?
- Menos inversión pública = menos chamba: hay menos empleos en la construcción y proveeduría de las obras
- La economía se atora: si el gobierno no invierte, la economía se vuelve lenta y los privados también se aguantan de invertir.
- Peor infraestructura: escuelas, hospitales, carreteras, trenes y servicios públicos se quedan estancados, parchados o deteriorándose.
¿Cuál es el tamaño de la caída?
- Entre enero y julio de 2025 se gastaron 441,917 millones de pesos, 36% menos que el año pasado.
- Solo en julio de 2025, se destinaron 42,206 millones de pesos, cuando un año antes fueron 109,722 millones: ¡63% menos!.
Así, la caída en la inversión pública es como si el gobierno hubiera dejado de ser el que paga la pista de baile, las luces, la música y el alcohol en la fiesta nacional, y ahora solo prende una vela y pone música de su celular, esperando que nadie reclame.
Con informacion: ELNORTE/

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