Aunque muchos de los penales del
País están en manos de criminales, las autoridades locales no parecen tener
interés en recuperarlos, advirtieron expertos.
Apenas este
miércoles se registró una fuga de 29 reos en el penal de Ciudad Victoria a
través de un túnel efectuado en un área que la misma autoridad tamaulipeca
reconoció como manejada por el autogobierno de los reos.
Igualmente, el pasado 16 de marzo
cinco reos de alta peligrosidad ligados al Cártel de Sinaloa, entre ellos Juan
José Esparragoza Monzón, "El Azulito", hijo de Juan José Esparragoza
Moreno, "El Azul", se fugaron del penal de Culiacán y después se
reveló que incluso le organizaron dentro del reclusorio una fiesta de
despedida.
Otro ejemplo del control del
crimen sobre los penales se dio el pasado martes, 14 de marzo, cuando se
difundieron videos del penal de Apodaca en los que un grupo de reos agrede y
humilla a internos de un grupo rival.
En opinión de especialistas,
estos hechos evidencian el control que tiene el crimen organizado dentro de las
prisiones.
Carlos Mendoza, consultor en
temas de seguridad, consideró que las fugas y las pugnas entre bandas
criminales exhibidas en videos muestran el descontrol que existe en las
cárceles.
"Lo cierto es que los
delincuentes se logran reagrupar al interior de los penales y multiplicar su
capacidad operativa", dijo, "por eso es que se dan las fugas masivas.
De otra forma, serían hechos aislados.
"Pero aquí lo que observamos
es esa capacidad de reorganización para fugarse y volver a operar en el
exterior con total libertad", agregó en entrevista.
El desgobierno oficial en los
penales se registra a pesar de que desde junio del 2016 entró en vigor la Ley
Nacional de Ejecución Penal, con la que se pretende que las autoridades
recuperen la gobernabilidad de las prisiones.
En un diagnóstico de este año, la
Comisión Nacional del Seguridad (CNS) reportó que en las prisiones estatales
hay hacinamiento y problemas de operación, seguridad, protección, orden y hasta
servicios.
La CNDH, en su más reciente
Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria, que data de abril del 2016,
indicó que en los reclusorios estatales hay privilegios, falta de control y
autogobierno.
De acuerdo con datos oficiales,
hasta septiembre pasado había sobrepoblación en 150 centros penitenciarios de
todo el País, con un déficit de 17 mil 575 espacios.
Elena Azaola, investigadora del
Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social,
consideró que son los Gobiernos de los Estados los que tienen la
responsabilidad de hacerse cargo y de tomar estas instituciones en sus manos.
"Sin embargo,
lamentablemente se ve que no les interesa, no tienen la visión de la
importancia que tiene recuperar los penales", planteó.
"Éstas son las consecuencias
muy lamentables".
fuente.-
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