Senadores en contra de la ley de seguridad interior
pidieron a sus colegas atender el llamado del General Salvador Cienfuegos,
Secretario de la Defensa Nacional, quien se pronunció por el regreso de los
militares a los cuarteles.
El debate llegó a la Cámara alta mediante un punto de acuerdo presentado por el Partido Verde para pedirle a la Conferencia Nacional de Gobernadores una opinión en la materia.
Con ese pretexto, más de 20 legisladores pidieron la palabra para criticar o apoyar la legislación que busca darle un marco legal a la presencia militar en las calles, aunque varias intervenciones se enfocaron en el golpeteo político sin abordar a fondo el tema.
En su oportunidad, la perredista Angélica de la Peña pidió escuchar bien al General Cienfuegos.
"Y el General Cienfuegos nos dijo 'si me piden que levante una mano para preguntarme si quieren que regresen los militares a sus cuarteles, no levanto una, levanto las dos'.
"Por favor, yo creo que lo que hay que hacer es atender también lo que él nos dijo 'nosotros estamos en las calles porque no hay Policías confiables', atiéndase el problema por la autoridad civil, más claro, ni el agua", aseguró la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado.
En un sentido similar, la petista Layda Sansores hizo referencia al comentario del Secretario de la Defensa realizado en un desayuno con motivo del fin del año.
"Dijo claro y de una manera inusual, pero necesaria, 'nosotros no pedimos estar aquí, no estamos a gusto, no estudiamos para perseguir delincuentes, se está desnaturalizando nuestra posición, estamos haciendo funciones que no nos corresponden'", mencionó Sansores.
Una ley de seguridad interior, dijo, no cambiará esa situación mágicamente.
"Aprobar una ley de seguridad interior es legitimar un estado de excepción, es sentar las bases de un proceso de militarización, es dotar de un marco legal a lo ilegal, para justificar la actuación de soldados como policías", sentenció.
En contraste, Miguel Chico, del PRI, aseguró que tanto el Ejército como la Mariana contribuyen a la estabilidad de México y rechazó que dicha ley busque militarizar al País.
Además, hizo un llamado urgente a no posponer más la discusión y aprobar una ley que dé certeza a las Fuerzas Armadas en su actuación.
En su intento por defender la aprobación de dicha ley, Juan Gerardo Flores Ramírez, del Partido Verde, reconoció que uno de sus efectos sería proteger a los militares de acusaciones de violaciones a derechos humanos.
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