Tres agentes de la Fiscalía General de la República (FGR) fueron asesinados y abandonados dentro de una camioneta en un área despoblada por la carretera Guanajuato-Juventino Rosas, a la altura de la comunidad de Campuzano.
En la camioneta fue pintado el siguiente mensaje: “Esto nos pasa por extorsionadores”. No se dio a conocer las identidades de los agentes, quienes tenían sus credenciales consigo en el momento en que fueron acribillados.
El viernes por la noche, otras tres personas fueron asesinadas en esta ciudad y dos más resultaron lesionadas en un ataque armado en un hotel ubicado cerca de la caseta de la autopista a Silao.
Mientras esto ocurría, el presidente municipal panista, Alejandro Navarro Saldaña, quien pretende reelegirse, presumía encabezar el operativo de seguridad en la misma ciudad.
Navarro ya pidió licencia para irse a hacer campaña a partir del 1 de abril.
En total, se cometieron seis homicidios violentos y dos personas quedaron heridas en la capital en unas cuantas horas.
Sobre los agentes asesinados, se sabe que una mujer hizo una llamada anónima al 911 para informar que en la comunidad de Campuzano, cerca de un pozo de agua, se encontraba una camioneta blanca con cuerpos en el interior.
Al acudir agentes policiacos de la capital, encontraron la camioneta Chevrolet bajo un árbol.
Con pintura blanca, se había escrito un mensaje en las ventanillas laterales, que decía “Esto nos pasa por extorsionadores”.
Los tres cuerpos mostraban huellas de disparos y portaban identificaciones que confirmaron que se trata de agentes de la Fiscalía General de la República.
Agentes de Policía Estatal y de la Agencia de Investigación Criminal acudieron a resguardar el lugar y levantaron los primeros indicios periciales.
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