A casi 40 años de que el escritor y periodista Tamaulipeco Mauricio Gonzalez de la Garza,nos recetara en su libro "La Ultima Llamada" que la "enfermedad de Mexico no era ni desconocida ni misteriosa, que era una enfermedad politica producida por un centralismo excesivo y un presidencialismo imperialista con todas sus agravantes",lo que le valió el exilio a Texas en el sexenio de Jose Lopez Portillo,ahora a la distancia, como en el "viejo PRI",Ex-consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) acusan que desde el Ejecutivo federal bajo gestión de Andres Manuel Lopez Obrador, existe el deseo de alinear y someter al árbitro electoral de cara a las elecciones de 2021.
Durante la mesa de análisis "Lo que tú y tu voto han construido: 30 años del órgano electoral en México" celebrada en el marco de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, el ex consejero presidente del entonces Instituto Federal Electoral (IFE), José Woldenberg, dijo que no es exagerado pensar que la actual Administración no valora la autonomía del árbitro electoral.
El académico dijo que, por el contrario, el Gobierno federal desearía alinear al INE y a los organismos autónomos a la voluntad presidencial. No obstante, advirtió que con algo así perderían todos, incluido el propio Ejecutivo.
"No creo exagerar si digo que la presente Administración no valora esa autonomía y que desearía alinear no sólo al INE sino al resto de los órganos de Estado autónomos a la voluntad presidencial, pero si ello llegara a suceder perderíamos todos: los ciudadanos, los partidos y hasta el propio Gobierno, porque el ancla de la credibilidad en el expediente electoral se habría vulnerado".
El ex consejero presidente Leonardo Valdés coincidió en que el INE enfrentará intentos de injerencia en sus decisiones. Sin embargo, dijo que no es la primera vez que esto ocurre y confió en que el Instituto sabrá defender su capacidad para tomar las decisiones que le corresponden en términos de la ley.
"Hay una animadversión gubernamental, no es la primera vez, a mí me tocó presidir un Consejo General que no estuvo cabalmente integrado durante un año, porque no sólo el Gobierno estaba inconforme con el INE, sino también la Cámara de Diputados, de tal suerte que el INE tiene experiencia de cómo enfrentar esa animadversión", indicó.
En su turno, Lorenzo Córdova reconoció que actualmente existen intentos de captura no sólo de actores políticos sino de privados. No obstante, advirtió que estos los ha habido siempre.
Córdova indicó que el problema no es eso sino la robustez institucional para enfrentar estas expresiones naturales y advirtió la necesidad de que el INE no se convierta en un actor político, ya que el árbitro electoral debe estar por encima de ellos.
"No es la primera vez que el INE enfrenta estas animadversiones, pero es muy importante una cosa: el INE no es un actor político y la animadversión que vemos por todos lados proviene de los actores políticos, eso es muy importante, que el INE no se convierta en un actor político más, el INE es el árbitro de la contienda y por ende debe estar colocado por encima de esas pulsiones políticas", reiteró.
Advirtió que el Instituto va a defender sus atribuciones frente a cualquier actor político, incluido el Presidente, pero sin entrar en conflicto con alguno de ellos.
En su turno, el ex consejero electoral Luis Carlos Ugalde advirtió que la de 2021 será la elección más complicada y conflictiva de la historia moderna de México.
El especialista recordó que en 2007 se desarrollaron, precisamente por las quejas de Andrés Manuel López Obrador, quien acusó al entonces Presidente de injerencista e intervencionista, una serie de reglas electorales que tuvieron como objetivo atarle las manos al jefe del Ejecutivo Federal, lo que se convertirá en una fuente de conflicto cuando el INE pretenda aplicar estas al hoy Mandatario federal.
"Creo que el Presidente de la República actualmente lejos va a estar de comportarse conforme establece la regulación y creo que en su momento, cuando el INE tenga que establecer esas restricciones, sacar las tarjetas amarillas, habrá una fuente de conflicto muy complicada", indicó.
Como ejemplo, dijo que las conferencias mañaneras de López Obrador deberán ser suspendidas durante las campañas electorales, lo que sin duda va a ser complicado para el árbitro electoral.
Ugalde alertó que otra fuente de conflicto serán los intentos de otros actores políticos para invadir facultades del Instituto. En este sentido, recordó que la Cámara de Diputados emitió sus propios lineamientos para regular la reelección de sus integrantes, a pesar de que esta es una tarea exclusiva del INE.
Agregó que también hay una preocupación en muchos segmentos respecto al comportamiento del Tribunal Electoral, que no sigue bases estrictamente legales ni constitucionales, lo que representa un riesgo, porque cualquier decisión que el INE tome con base en la ley y en su autonomía, podrá ser revocada por dicha autoridad.
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