A Elba Esther Gordillo Morales, exlideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), la entonces Dirección Federal de Seguridad (DFS) y la Dirección de Investigaciones Políticas y Sociales —antecesoras del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen)— la indagaron para saber si sostenía relaciones extramaritales, qué religión practicaba, además de que se aseguraba que luchaba en apoyo de los sectores marginados y que por eso gozaba de simpatía con los maestros, aunque en otra parte se lee que “se caracteriza por ser una persona déspota y antipática”.
En el expediente que se encuentra en el Archivo General de la Nación (AGN) y al que EL UNIVERSAL tuvo acceso, se indica que la DFS vigiló muy cerca las acciones que Gordillo Morales realizaba desde 1977, cuando se desempeñaba como lideresa de la Sección 36 del Valle de México.
Se advertía que la dirigente magisterial contaba con recursos económicos y humanos para aspirar a lideresa del gremio magisterial y ganar cargos de elección popular.
En la página 67 del expediente titulado “CONFIDENCIAL”, que se encuentra en la caja 20 de las galeras de lo que fue llamado El Palacio Negro, se detalla una amplia información de la exlideresa magisterial.
Tras informar su nombre completo, su fecha de nacimiento, estado civil, números telefónicos, de pasaporte, licencia de manejo y domicilio, en el apartado “R” se detalló su religión; sin embargo, debido a la Ley Federal de Acceso a la Información, algunos datos fueron cubiertos para su versión pública.
Dos hojas adelante, la DFS escribió: “Cabe destacar que la que nos ocupa, ha luchado a favor de las clases más marginadas de la región, motivo por el cual goza de las simpatías”.
En el expediente que la Dirección de Investigaciones Políticas y Socialesrealizó entre 1979 y 1985 también se omitió divulgar detalles del tipo de relaciones que mantenía con Carlos Jonguitud Barrios, entonces gobernador de San Luis Potosí.
Pero, el reporte advertía que Gordillo Morales contaba con recursos económicos y humanos , “debido a todo el apoyo que recibe del SNTE... Cuenta con hábil manejo de asambleas dentro de su gremio. Tiene capacidad de oratoria, debido a que lee claramente sus discursos y son amenos. Improvisa bien. Sus aspiraciones se centran en obtener la Secretaría General del CEN del SNTE, así como la diputación federal y senadora”.
En el siguiente renglón, en el apartado “Perspectivas Políticas”, la DFS afirmaba que de ser postulada “sería buen candidato y buen diputado debido a sus cualidades y oficio político con que se desenvuelve”.
El archivo, que en su mayoría son relatorías de eventos oficiales en los que participó como líder de maestros del Valle de México y sobre su paso como legisladora del PRI, se incluye un discurso en la Cámara de Diputados el 3 de noviembre de 1980, donde “defendió la democracia que según ella se practica en el SNTE”.
La diputada federal priista Gordillo Morales defendió la democracia que según ella practica el SNTE y pidió que se denuncie a los extremistas que traen a personas que no son maestros para que formen parte del grupo que se ha manifestado en la ciudad.
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