¿Cuánto más piensan tardarse?
Han pasado exactamente 327 días, lo que equivale a 10 meses o 470,888 minutos (…y contando) desde que estalló la guerra intestina provocada por una traición del gobernador de Morena, Ruben Rocha Moya, a uno de los bandos de misma banda en Sinaloa, poco antes del el 9 de septiembre de 2024. Cada uno de estos minutos ha sido pagado en sangre, miedo y pérdidas.
En casi un año, el saldo es escalofriante:
- 1,803 homicidios dolosos (5.5 diarios)
- 1,811 personas privadas de la libertad (5.6 diarios)
- 6,398 vehículos robados (19.7 diarios)
- 1,531 personas detenidas (4.7 diarios)
- 108 personas abatidas
¿Qué más necesita la estrategia militar y federal para mostrar resultados concretos? Porque su “esfuerzo” –si es que a esto se le puede llamar esfuerzo– se sigue midiendo en muertos, levantados, autos despojados y, de paso, en una economía regional que da señales de asfixia.
¿Hasta cuándo piensan dejar que la demora –su falta de prisa, eficacia y contundencia– siga llenando morgues y hogares vacíos? ¿Cuántos informes vacíos pretenden presentar mientras la población cuenta sus bajas y las familias pierden lo poco que todavía pueden mover de un lado a otro antes de que se lo roben, lo quemen o lo acribillen?
No es por falta de recursos: han gastado y siguen gastando (…que deberia ser invirtiéndo) cientos de millones de pesos, han reforzado los reforzamientos reforzados (…y siguen reforzando) con miles de efectivos, centenas de vehículos militares, aviones, helicópteros, despliegues múltiples, reuniones infinitas. Y todo para que el resultado sea, hasta hoy, claramente insuficiente. Han hecho muy poco, o lo poco que han hecho, poco se siente ya traducido a tranquilidad.
No es nuevo: tienen más de dos décadas prometiendo seguridad y resultados. Han tenido todo y siguen entregando nada. ¿Cuánto más tienen planeado esperar mientras la desesperación, la impunidad, los levantones y los muertos siguen multiplicándose?
El por que del título :
“327 DÍAS DESPUÉS, 10 MESES, 7,848 HORAS o 470,880 MINUTOS de SANGRE, DOLOR y MUERTE” enfatiza la persistencia del horror y la ineficacia gubernamental que deberia acicalar al gobierno si fuera empatico,hay urgencia y carga emocional en el reclamo.
Al cuestionar “¿CUÁNTO TIEMPO MÁS SEÑORES de las GUERRAS FALLIDAS?”, confrontamos de manera directa a los responsables y damos voz al hartazgo social. El subtítulo subraya la paradoja: “la ESTRATEGIA MILITAR de HARFUCH en SINALOA es un FRACASO GARRAFAL… enmascarada con acciones de alto impacto que no impactan.” Esto destaca que, pese a los grandes despliegues, lo tangible sigue siendo la violencia, los muertos, los levantados y una economía asfixiada.
El encabezado traduce los números (días, meses, horas, minutos) en una dimensión tangible del sufrimiento cotidiano, denuncia la falta de resultados, y se distancia del discurso oficial triunfalista o justificatorio. Cada término —“fracaso garrafal”, “acciones de alto impacto que no impactan”— visibiliza la crisis y sustenta la exigencia periodística en su objetivo: sacudir, señalar responsables y romper la narrativa complaciente utilizando cifras irrefutables con elocuencia crítica.
Con informacion: NOROESTE/
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