“MAS TINTA y SALIVA”: “JUSTICIA EMITE FALLO de CONDENA a MIEMBRO del TEMIBLE GRUPO REYNOSA del CDV que TOMÓ por ASALTO las ARCAS pero NO esta DETENIDO”…uno dicen que ya casi va pa’ dentro y otros que otro,ya casi va pa’juera.

La justicia tamaulipeca no está dictando aún sentencia, pero ya presume que una captura es cuestión de horas. Como si jugaran a ser pitonisos con toga, más que jueces. El discurso suena a condena anticipada, como si el proceso legal fuera una mera escenografía y el telón ya estuviera bajando con la ley atrapándolo.

Casi tres años de tinta, filtraciones y titulares, el verdadero mensaje no es la definición del proceso mismo contra Mario Gomez Monroy ExSecretario de Francisco Javier García Cabeza de Vaca y temible miembro del “Grupo Reynosa” , sino la narrativa fantasiosa de que el tipo ya esta aun paso de la carcel .

Es mera Justicia de reflectores, de pasillo, que se adelanta a sí misma porque la formalidad ya no alcanza: necesitan que el público sienta que el trofeo está cerca aunque este bastante lejos.

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2. La justicia como cazador cansado que al fin ve su presa

Han trascurrido 34.69 meses,1,056 dias y 25 mil 352 horas salpicadas de discursos y conferencias de banqueta del gobierno de Morena y Americo Villarreal ,preludiando castigos que nunca llegan, pues la carcel es la sanción y este como muchos mas,no estan detenidos.

La justicia ha estado más entretenida en “contar la historia” de sus frustraciones, “que si esto,que si aquello, mas que en atraparlo”. Y ahora celebran que están “a un paso de la captura, como les fuera a pedir un vale para huir”, pero esto es como si hubieran corrido una maratón y apenas llegaran al kilómetro final arrastrando los pies.

El mayor logro no es la sentencia,ni el deseo febril de la captura,ni la captura inminente, sino la captura misma concretada, el encerrado, enchiquerado como ejemplo, cualquier esfuerzo se mide en resultados, no en la suma de las intenciones.

El dia que eso ocurra,si llegara a ocurrir,muy poco probable (…pero nos gustaría tragarnos las palabras) ,sera el triunfo de la justicia,no del logro judicial en el expediente: porque un operativo pendiente, apenas un “ya casi”, es la medalla a la demora. La justicia tamaulipeca presume que va por fin a cazarlo, pero lo que deja en mal lugar es su lentitud, como si un Estado completo sólo pudiera exhibir como trofeo una orden de aprehensión tres años tarde.

El antecedente, contado sin solemnidad

Resulta que Mario “N” —exfuncionario de la Secretaría de Educación— un buen día de enero de 2018 amaneció con ínfulas de secretario titular (aunque apenas era subsecretario) y decidió firmar por su cuenta y riesgo un convenio millonario con Metlife. Básicamente, se dio el lujo de decir: “Yo también mando, yo también firmo, ¿y qué?”… aunque la ley ya dejaba claro que esa jugada no era facultad suya.

La puntada no fue menor: entre 2018 y 2022, la aseguradora fue depositando más de 8.2 millones de pesos a una cuenta en Santander de la Secretaría de Educación de Tamaulipas. El problema es que, según la ley, esa lana debía llegar a Finanzas, que es la dependencia encargada de llevar las cuentas y repartir el presupuesto. Pero no, el dinerito se fue directo a la Educación… y de ahí, misteriosamente, parte se desvió a bolsillos sospechosamente cercanos al mismo Mario “N”.

En cristiano: armó la treta de que las retenciones de seguro (1% del salario de los trabajadores) terminaran donde no debían, y de ese flujo se fueron pagando “cositas”: transferencias personales, gastos no autorizados, y quién sabe cuántas facturas perfumadas.

El final del chiste (que no es chiste)

Ahora el hombre se enfrenta a dos hipótesis de conducta ilícita que juntas pueden darle hasta 20 años de cárcel. Y aunque la audiencia clave está programada para el 26 de agosto de 2025, la justicia lo anuncia ya como si tuvieran reservado el cadalso con nombre y apellido,vulgo detenido.

Ojo: no hablamos de un error de calculadora, sino de una ingeniería financiera hechiza, sostenida durante cuatro años, en la que el gran mérito del acusado fue creerse más funcionario de lo que era y usar esa fantasía como llave para abrir la caja chica.

Mario “N” no inventó el hilo negro de la corrupción que encabezaba su jefe Cabeza de Vaca, solo aplicó la clásica receta mexicana: “firma lo que no te toca, mueve lo que no es tuyo y reparte después como si nada”.

👉 En resumen: la noticia revela más el desgaste y la ansiedad de un aparato judicial que busca mostrar músculo, que una victoria genuina contra la corrupción. Es una justicia que proclama el fin antes del desenlace real —y en ese exceso verbal se traiciona.

Con informacion: NOTICIERO DE VICTORIA/