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sábado, 28 de diciembre de 2024

“NI BATALLAN con el WHATSAPP”: “INVESTIGACION de EE.UU y CAPTURA de TRAFICANTES dejo VER como INGRESA a MEXICO RIFLES y AMETRALLADORAS el CARTEL del JALISCO”…pero todo se supo con un “escupe lupe”.


Una investigación del gobierno estadunidense reveló cómo funcionan las complejas redes de tráfico de armas del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), las cuales permitieron, por ejemplo, el ingreso a territorio nacional de un rifle antimaterial de precisión que fue utilizado en una emboscada contra policías y soldados que resultó en la muerte de dos personas en 2023.

La acusación del caso, presentada en Florida, revela que personas identificadas como “comandantes” del CJNG contactan a los líderes de las redes de tráfico, en este caso, un sujeto llamado Ángel Velázquez Delgado. Los jefes de las células cuentan con trabajadores, identificados en la investigación con las iniciales J.H., J.A. y J.P.

Solicitan armas de fuego

A través de mensajes, los comandantes hacen solicitudes específicas de armas de fuego, tras lo cual el jefe les explica las ganancias que pueden generar por cada pieza que adquieran.

Por ejemplo, el 15 de febrero de 2023, el acusado conversó con otra persona, con el nombre en pantalla de Primo Osiel, sobre la compra de una ametralladora ligera FN M249S.

Primo Osiel: “Ya está. Sólo por curiosidad, ¿cuánto me dijiste que podría obtener por cada una?”
Velázquez: “Para no estar yendo y viviendo, mil 200 cada una, o mil 500. Hasta 2 mil (dólares)”.

Después comienza la operación, en las que el propio jefe se ensucia las manos. Según los reportes, en mayo de 2023, Velázquez intentó adquirir un rifle Barrett, pero en la tienda, localizada en Crestview, Florida, le negaron la compra porque ya había hecho tres similares.

Poco después, los sujetos con las iniciales J. P. y J. A. fueron a la misma tienda buscando el mismo rifle, pero el vendedor consideró que querían hacer la compra a nombre del acusado, por lo que negó la venta, pero también presentó una denuncia y se comenzó con la investigación.

Sin embargo, Velázquez no se rindió tan fácil. Unos meses después, el 23 de agosto de 2023, el individuo J. A. compró un rifle Barrett en otra tienda en Ormond Beach, Florida, donde pagó 9 mil 199 dólares en efectivo, y gracias a interceptaciones de mensajes, se descubrió que Velázquez había dado el efectivo para la compra.

Agentes los detienen infragantis

Cuando el sujeto se alistaba para recoger el rifle, agentes de la ATF lo aseguraron. Los chats intervenidos a Velázquez y a J.A. demuestran que el cártel siempre estuvo al tanto de su pedido. A tal grado que le exigieron el ticket de compra para demostrar que habían comprado el rifle, y que no estaban engañándolos.

Aunque ese rifle Barrett fue asegurado por la ATF, el 8 de noviembre de 2022 J.H. adquirió un Barrett también solicitado por el CJNG y que sí logró entrar a territorio mexicano.

Según varias conversaciones, Velázquez siempre coordinaba los traslados de las armas y cuando se trataba de rifles largos o ametralladoras tenía que conseguir vehículos amplios para esconderlos, casi siempre, en el suelo, como ocurrió el 17 de febrero, cuando coordinó el traslado de un rifle de precisión.

Además, se descubrió que Velázquez viajaba una y otra vez hacia México y de regreso a Estados Unidos, así como hojas contables donde registraba deudas de transacciones vinculadas con su trabajo para el CJNG.

Fue el 25 de abril de 2023 cuando, durante una conversación con otra persona, la ATF descubrió que Velázquez estaba trabajando para un comandante del Cártel Jalisco Nueva Generación, el cual además de la Barrett, había solicitado una ametralladora ligera y una ametralladora pesada Browning.

¿Cuándo fue comprada la ametralladora?

La ametralladora ligera, de hecho, fue adquirida el 28 de abril, cuando, además, se habría discutido la compra de equipo óptico para las armas y drones. Según las conversaciones, las armas y los productos llegaron a México.

La Barrett asegurada en Zitácuaro fue rastreada a través de su número de serie hasta el comprador el Florida, uno de los operadores de Velázquez.

“Utilizando el Programa de Notificaciones de recuperación de Armas de Fuego eTrace, autoridades mexicanas pudieron confirmar la presencia de al menos una de las armas traficadas en México”, concluye el informe.

Con informacion de: MILENIO/

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