Con la muerte de Marina Sánchez González, suman al menos cuatro pacientes muertos en diez días tras recibir un medicamento contaminado en el Hospital Regional de Pemex en Villahermosa, Tabasco.
LA MATAZON ANUNCIADA:
La mujer de 49 años de edad falleció este martes al no recuperarse por posibles efectos de una bacteria, la cual estaba dentro de la medicina Heparina Sódica que se se suministra para hemodiálisis, confirmó su esposo Inocente "N".
El viudo mostró a los medios locales cómo los médicos y enfermeras decidieron suministrarle el medicamento que al final resultó contaminado, y no el que la paciente llevaba, tal como lo han relatado otros familiares de pacientes en la clínica.
"Está llena (mostró la ampolleta), no se la pusieron, está llenita, es la que te iban a poner y esta es la prueba. Tengo la receta de la farmacia Unión, donde se la compré yo", dijo entre llantos.
Una mujer que también tiene a un familiar infectado, la cual prefirió omitir su nombre, explicó a REFORMA que desde ayer los familiares de Marina sabían que iba a ser desconectada de aparatos que la mantenían con respiración artificial.
"Les habían hablado que en dos horas desconectaban a la señora Marina, porque los antibióticos no hicieron ninguna reacción con ella, y así como ella hay mucha gente en terapia intensiva", explicó vía telefónica.
La última información de Pemex, subida ayer en su página oficial, es que 55 derechohabientes están bajo tratamiento médico, de los cuales cinco están en terapia intensiva.
Además de Marina, también familiares de pacientes ya denunciaron la muerte de Feliciano Sánchez Osorio, el pasado 6 de marzo; el de Patricia Jiménez, el día 3, y otro más de un hombre, del que se desconoce su identidad, el pasado 29 de febrero.
La bacteria Klebsiella spp se encontró dentro de un lote de este fármaco que la clínica utilizó en decenas de pacientes, y que provoca el desarrollo de enfermedades infecciosas en la sangre y tejidos blandos.
El viudo mostró a los medios locales cómo los médicos y enfermeras decidieron suministrarle el medicamento que al final resultó contaminado, y no el que la paciente llevaba, tal como lo han relatado otros familiares de pacientes en la clínica.
"Está llena (mostró la ampolleta), no se la pusieron, está llenita, es la que te iban a poner y esta es la prueba. Tengo la receta de la farmacia Unión, donde se la compré yo", dijo entre llantos.
Una mujer que también tiene a un familiar infectado, la cual prefirió omitir su nombre, explicó a REFORMA que desde ayer los familiares de Marina sabían que iba a ser desconectada de aparatos que la mantenían con respiración artificial.
"Les habían hablado que en dos horas desconectaban a la señora Marina, porque los antibióticos no hicieron ninguna reacción con ella, y así como ella hay mucha gente en terapia intensiva", explicó vía telefónica.
La última información de Pemex, subida ayer en su página oficial, es que 55 derechohabientes están bajo tratamiento médico, de los cuales cinco están en terapia intensiva.
Además de Marina, también familiares de pacientes ya denunciaron la muerte de Feliciano Sánchez Osorio, el pasado 6 de marzo; el de Patricia Jiménez, el día 3, y otro más de un hombre, del que se desconoce su identidad, el pasado 29 de febrero.
La bacteria Klebsiella spp se encontró dentro de un lote de este fármaco que la clínica utilizó en decenas de pacientes, y que provoca el desarrollo de enfermedades infecciosas en la sangre y tejidos blandos.
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