En dos eventos distintos, la Secretaría de Marina (Semar), con apoyo de las dependencias que integran el Gabinete de Seguridad, aseguró 4.2 toneladas de presunta cocaína frente a las costas de Guerrero.
Con este operativo, suman ya 36 toneladas de este alcaloide incautadas en acciones marítimas durante la actual administración, lo que representa una afectación estimada de 9 mil millones de pesos para la delincuencia organizada.
La imagen de narcopaquetes
La imagen presentada constituye un documento visual de gran valor forense que captura uno de los momentos clave del masivo decomiso de cocaína.
Características Visuales de los Paquetes Incautados
La fotografía muestra claramente un conjunto de paquetes rectangulares tipo “ladrillo” unidos mediante cuerdas o sogas de color turquesa/azul.
Los paquetes exhiben el característico empaquetado utilizado por las organizaciones narcotraficantes para el transporte marítimo de cocaína: bloques compactos de forma rectangular envueltos en material impermeable, agrupados y asegurados con cuerdas para facilitar su manejo y flotabilidad. La disposición de los paquetes es consistente con la técnica conocida como “lanzamiento controlado”, donde la carga es arrojada al mar para su posterior recuperación por embarcaciones secundarias.
Evidencia de Vigilancia Aérea Táctica
Un elemento técnico fundamental en la imagen es la presencia de una mira o punto de referencia en el centro del encuadre (marcada con una cruz verde), indicativa de que la fotografía fue capturada desde un sistema de vigilancia aérea militar, específicamente desde un helicóptero tipo Panther de la Armada de México. Esta característica confirma que se trata de una imagen de inteligencia táctica tomada durante operaciones de reconocimiento.
El ángulo cenital y la calidad de la imagen revelan que fue obtenida a una altura considerable, probablemente durante los “patrullajes de vigilancia aérea” mencionados en los reportes oficiales. Las condiciones de iluminación y la claridad del agua permiten una visualización adecuada de los paquetes, lo que facilitó su posterior interceptación.
Los Traquetos Quedaron En La Inmunda
El mundo del narcotráfico en México recibió otro golpe contundente cuando los traquetos no lograron coronar la vueltica en las aguas del Pacífico mexicano.
En esta informacion ,en la que incorporamos terminos usados en la jerga colombiana, te detallamos cómo la Marina mexicana pilló un cargamento monumental de perico fino cuando los narcos menos se lo esperaban y al final te adjuntamos una breve “matemática cruel” que aunque no desconoce el exito,tampoco se puede celebrar como victoria cuando la marea blanca inunda el mundo y el decomiso palidece vs la producción, ,que deja ver,es mera pérdida calculada”.

El Descuache fue en Guerrero
En dos caídas diferentes, los tombos de la Marina mexicana, con apoyo de todo el combo de seguridad, les pillaron 4.2 toneladas de perico fino frente a las playas de Guerrero.
Con este operativo, ya van 36 toneladas de nieve que los tombos han agarrado en operativos marítimos durante este gobierno, dejando a los narcos con un hueco en el bolsillo de unos 9 mil millones de pesos mexicanos, ¡una plata hijueputa!
Primera Vuelta Que No Coronaron
La primera caída se dio cuando los tombos andaban patrullando en un pájaro de hierro tipo Panther. En esa vuelta, los marinos pillaron una lancha Go Fast con cinco manes a bordo, que cargaban 38 bultos tipo costalillo.
Adentro encontraron ladrillos con polvo blanco, pura coca de la fina, con un peso de 1.8 toneladas. Este cargamento representa un fiasco total para los traquetos que no pudieron coronar con su mercancía en el territorio azteca.
Segundo Golpe A Los Traqueteros
En otro golpe certero, los tombos aseguraron, flotando en el mar frente a Guerrero, 64 bultos tipo costalillo. La mercancía estaba a la deriva, como si los narcos hubieran tenido que lanzarla por la borda para no ser pillados en plena movida.
Cada costal traía su ladrillo de nieve blanca, más perico para la fiesta, con un peso aproximado de 2.4 toneladas. Este decomiso demuestra que los traquetos están desesperados por coronar sus vueltas marítimas y recurren a métodos cada vez más arriesgados.
Las Consecuencias Del Descuache
En ambos casos, los sapos quedaron engavetados y la mercancía decomisada. Los manes cayeron en manos de la Fiscalía General de la República, donde les van a meter todo el peso de la ley por andar traqueteando.
El Impacto Económico Para Los Narcos
No coronar una vuelta de este tamaño significa un golpe devastador para las finanzas de las organizaciones criminales. Con un valor estimado de 9 mil millones de pesos mexicanos, este decomiso es comparable a otras grandes incautaciones en la región.
En febrero de este año, por ejemplo, las autoridades colombianas lograron ubicar en un centro de acopio del Clan del Golfo una caleta subterránea con 5,6 toneladas de cocaína de alta pureza, lo que afectó las finanzas del grupo criminal en aproximadamente US$150 millones.
La Cocaína: Un Océano de Producción que Ahoga los Esfuerzos de Interceptación
En el vasto mar del narcotráfico global, los decomisos de cocaína representan apenas gotas en un océano de producción ilícita. El reciente operativo en Guerrero, donde se incautaron 4.2 toneladas de perico fino, sirve como ejemplo paradigmático de cómo los esfuerzos antinarcóticos, aunque significativos, palidecen ante la escala industrial de un negocio que mueve billones de dólares.
Este análisis desentraña la desproporción entre oferta y control, usando como hilo conductor la jerga colombiana que retrata la crudeza de este fenómeno.
El Negocio del Perico: Cifras que Desbordan la Realidad
La Máquina Productora de los Traquetos
Los traquetos colombianos siguen mandando la parada en el mercado global de la cocaína. Según datos de la ONU, en 2023 se alcanzó un récord histórico con 2,900 toneladas de polvo blanco producidas a nivel mundial, de las cuales Colombia aportó el 89.6%(2,600 toneladas. Esta cifra, equivalente a llenar 130 trailers de 20 toneladas cada uno, muestra la capacidad industrial de los carteles para surtir los mercados de Norteamérica, Europa y, cada vez más, Asia y África.
Los cultivos de coca en Colombia crecieron un 10% en 2023, alcanzando 253,000 hectáreas – suficiente para cubrir tres veces la ciudad de Nueva York. La sofisticación de los laboratorios clandestinos permite extraer hasta 1.2 kg de cocaína pura por hectárea, gracias a mejoras técnicas que duplican la productividad respecto a 2005.
Mientras tanto, en México, los cárteles funcionan como socios estratégicos, encargados de la logística para cruzar la mercancía al “otro lado”.
La Ilusión del Control: Decomisos vs. Producción
Aunque las autoridades globales reportaron incautaciones récord de 2,026 toneladas en 2023, esta cifra representa apenas el 70%de la producción anual. El restante 30% (870 toneladas) equivale a 17,400,000,000 dosis callejeras que terminan en manos de consumidores.
En este contexto, el decomiso de 4.2 toneladas en Guerrero – aunque celebrado como victoria – apenas rasguña la superficie del problema:
- 0.145% de la producción mundial anual
- 0.162% de la producción colombiana
- 12% del total incautado por México en 2023
La matemática es cruel: se necesitarían 690 operativos como el de Guerrero para igualar la producción anual colombiana, o 24 decomisos diarios de similar magnitud para neutralizar el flujo global.
La Economía del Polvo Blanco: Cifras que Marean
El Valor Real de un “Paseo” Fallido
Las 4.2 toneladas incautadas en Guerrero representan una pérdida de $1,050 millones de pesos mexicanos ($52.5 millones USD) para los traquetos, calculando a $250 millones por tonelada. Sin embargo, esta cifra es ínfima comparada con los $180,000 millones USD que genera anualmente el narcotráfico a nivel global.Para ponerlo en perspectiva:
- Equivale al 0.029% del valor total del mercado
- Representa menos del 1% de las pérdidas anuales por decomisos en Colombia
- Es similar a los ingresos por venta minorista de cocaína en 72 horas en Nueva York
La paradoja es evidente: mientras los gobiernos celebran estos golpes, los carteles los consideran meros “gastos operativos”, asumibles dentro de su modelo de negocio de altos márgenes y distribución masiva.
El Coste Oportunidad de la Guerra Antidrogas
El operativo de Guerrero involucró recursos aéreos, marítimos y terrestres durante días. Un cálculo conservador estima en $15 millones de pesos el costo directo de la operación (helicópteros, patrulleras, personal). Esto significa que por cada peso invertido, se recuperaron 70 pesos del valor incautado. Aunque positivo, este balance no contempla:
- Costos indirectos de seguridad a largo plazo
- Gastos en sistema judicial y carcelario
- Impacto social por violencia asociada
Mientras, los traquetos reinvierten hasta el 85% de sus ganancias en mejorar producción, corrupción y tecnología de evasión, creando un ciclo de sofisticación constante.
La Geopolítica del Perico: Nuevas Rutas, Nuevos Mercados
El “Giro al Este” del Narcotráfico
Ante el endurecimiento de controles en rutas tradicionales, los traquetos están “coronando vueltas” hacia mercados emergentes. Datos de la UNODC revelan:
- +400% aumento en incautaciones en África Occidental (2015-2023)
- +250% en interceptaciones en puertos asiáticos
- 120 toneladas anuales estimadas hacia Oceanía
Este desplazamiento geográfico explica por qué, a pesar de récords en decomisos, la disponibilidad callejera se mantiene estable: los traquetos simplemente diversifican rutas y mercados, compensando pérdidas puntuales.
La Paradoja de la Eficiencia Policial
Colombia, el mayor productor, incautó 739.5 toneladas en 2023 – el 28.4% de su producción total. Sin embargo, esto no impidió un aumento del 53% en su output respecto a 2022. La ecuación muestra que mayores decomisos no equivalen a menor producción, sino a:
- Expansión de áreas de cultivo
- Mejoras en rendimiento por hectárea
- Innovación en métodos de transporte
Los traquetos han desarrollado una resiliencia operativa donde cada golpe estatal se traduce en adaptación tecnológica (semisumergibles, drones) y penetración de nuevos mercados.
Conclusión: Nadando Contra la Marea Blanca
El decomiso de Guerrero, aunque valioso en el corto plazo, ilustra la desproporción estructural entre capacidades estatales y el poderío logístico del narcotráfico. Mientras la producción global crece a ritmos del 20% anual, los esfuerzos de interdicción apenas contienen parcialmente el flujo.
La solución requiere trascender la lógica policial, abordando factores económicos (alternativas al cultivo), sociales (reducción de demanda) y geopolíticos (corrupción transnacional). Hasta entonces, los operativos como este seguirán siendo batallas simbólicas en una guerra que se gana transformando mercados, no interceptando cargamentos.
Con informacion : MILENIO/

No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Tu Comentario es VALIOSO: