El principal: humano.
En México, la organización del ejército comenzó antes del primer caso, según lo dijo el “general” al mando, Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud. “El encargado de la conducción de este plan”, como lo presentó el presidente Andrés Manuel López Obrador, en la conferencia en la que pusieron rostro a las mentes detrás de la estrategia para contener al COVID-19.
Un total de 15 especialistas –cuatro mujeres y 11 hombres– en epidemiología, virología, inmunología, salud mental y otras especialidades conforman el grupo científico que ha diseñado el plan de guerra contra el coronavirus.
Según lo detalló el general al mando, comenzaron a trabajar desde antes que se confirmara la llegada del COVID-19 al país. Para el 27 de febrero, cuando detectaron el primer caso, afirmó, estaban listos para responder.
“Cuando llegamos a ese punto nos encontrábamos cómodamente preparados, por un proceso que había iniciado desde el 3 de enero, y que se había disparado, porque el 31 de diciembre de 2019 nuestros sistemas de monitoreo y alertamiento temprano nos habían permitido identificar la ocurrencia de un pequeño brote de 44 casos de neumonía en Wuhan, China”, narró en la conferencia mañanera del 24 de marzo.
Mientras López-Gatell contaba los periplos del grupo que comanda, el doctor Jorge Alcocer Varela, secretario de Salud, permanecía a la izquierda de su otrora pupilo. El secretario, en la fila del frente, estaba acompañado de sus homólogos de las otras dos Secretarías que apoyan en la contingencia. Primero, Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional; luego, José Rafael Ojeda, secretario de Marina; a un paso, menos del necesario para mantener la llamada Sana Distancia, Arturo Herrera, secretario de Hacienda.
Su presencia tampoco es casualidad, forma parte de las alianzas que López-Gatell estableció para combatir al enemigo.
Gustavo Reyes Terán, Hugo López-Gatell, José Luis Alomía y Ricardo Cortés. Foto: Cuartoscuro.
“Este grupo se vinculó también con las múltiples instituciones fuera del sector salud que nos permitieron una visión amplia, con un horizonte de mediano plazo para la preparación y unos horizontes de mediano y largo plazo para la recuperación en las distintas consecuencias que esta epidemia puede tener”, detalló el doctor en epidemiología.
Pero, ¿quiénes son los especialistas que el mismo presidente López Obrador ha dicho que es a quienes hay que escuchar? Se trata, en su mayoría, de hombres y mujeres con larga trayectoria en la academia y en la administración pública, algunos de ellos jugaron un papel clave en 2009, cuando se desarrolló el virus AH1N1 que afectó a miles de personas en el mundo.
En esta “guerra” contra un virus, como la llamó António Guterres, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en su intervención virtual con los miembros del G20, sí hay generales.
LOS QUE NO CONFÍAN
En medio de la guerra hay quienes no confían en la estrategia del gobierno federal que encabeza López-Gatell. Está, por ejemplo, el caso del diputado de Movimiento Ciudadano, Jorge Alcibíades García, quien fue diagnosticado con COVID-19 hace un par de días, quien acusó que se trasladó al Hospital López Mateos del ISSSTE y fue diagnosticado con influenza.
“Yo estoy seguro que hay más casos de COVID-19, porque no hay pruebas suficientes o de hecho no hay pruebas para decir cuántos casos de hay. Yo lo viví ayer en el López Mateos de la Ciudad de México”, narró en un video de Facebook.
“Se deben hacer más pruebas para detectar #COVID19 y tomar medidas para que nadie pierda su empleo”, ha dicho Marko Cortés, presidente del Partido Acción Nacional. Mientras que el exsecretario del Trabajo, Javier Lozano, también ha abrazado esta premisa: “El número de contagiados es equivalente al número de pruebas que se realizan”, compartió en Twitter.
LOS HOMBRES AL MANDO
Aunque el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, ha delegado la mayor responsabilidad a su subsecretario, éste forma parte del grupo de científicos que ha creado los tres lineamientos que marcan el actuar de la administración pública para atender desde el ángulo médico esta pandemia.
Con su ayuda, la de López-Gatell y los otros 13 especialistas, se crearon los tres documentos que marcan la estrategia: el “Lineamiento estandarizado para la vigilancia epidemiológica y por laboratorio de Covid-19”, el “Lineamiento de atención de pacientes” y la “Guía de los procesos de control de infecciones para las personas con Covid”.
Alcocer Varela fue premio Premio Nacional de Ciencias y Artes en 2015, tiene un posgrado en inmunología en la Universidad de Londres y es doctor en Ciencias Médicas por la UNAM. Fue, además, asesor de tesis del subsecretario que comanda la batalla. Tiene un sueldo bruto mensual de 154 mil 365 pesos.
Hugo López-Gatell, además de ser doctor en epidemiología, maestro en Ciencias Médicas y especialista en medicina interna, tiene amplia experiencia en investigación y “manejo de grupos directivos de alto nivel”.
Acumuló experiencia sobre tener un grupo de médicos que combaten pandemias en aquel 2009, cuando formó parte del equipo que encabezó el entonces secretario de salud, José Ángel Córdova Villalobos, para combatir la influenza. Su sueldo: 153 mil 140 pesos mensuales.
Jorge Alcocer Varela, secretario de Salud, con Hugo López-Gatell. Foto: Cuartoscuro.
13 GENERALES DE DIVISIÓN
En el equipo está el doctor Gustavo Reyes Terán, titular de la Comisión Coordinadora de Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad, que cuenta con más de 20 años de experiencia en infectología.
Es médico cirujano y su papel es clave porque es el fundador del Servicio de Infectología para Pacientes Inmunocomprometidos del sistema sanitario mexicano, así como del Centro de Investigación en Enfermedades Infecciosas (CIENI) en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), uno de los departamentos acreditados por la OMS para la investigación de enfermedades como el VIH y de situaciones emergentes como la pandemia de gripe AH1N1. El oaxaqueño percibe mensualmente un sueldo bruto de 144 mil 564 pesos.
A su lado lucha el doctor José Luis Alomía Zegarra, médico cirujano general y especialista en epidemiología, quien inicialmente había sido el vocero del coronavirus al inicio de la pandemia en México. Es la mano derecha de López–Gatell en el área, quien lo nombró director general de Epidemiología de la Secretaría de Salud en diciembre de 2018. Su sueldo: $122,511.92.
El doctor Ruy López Ridaura, es el epidemiólogo que dirige el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (CENAPRECE), el organismo descentralizado de la Secretaría de Salud que tiene la misión de “disminuir los riesgos y fortalecer la atención que se brinda en los servicios de salud, relacionada con enfermedades transmisibles y no transmisibles, así como con afectaciones derivadas de desastres, a través de programas de prevención y protección de la salud”.
López Ridaura es médico cirujano, especialista en medicina interna, maestro en Ciencias Médicas Odontológicas y de la Salud con énfasis en epidemiología clínica y doctor en Epidemiología Nutricional. Su sueldo: $136,745.
El doctor Víctor Hugo Borja Aburto presume tener 33 años consecutivos en el sector salud y es el actual director de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), un cargo que también tuvo durante toda la administración de Enrique Peña Nieto, desde que Mercedes Juan López comandara la Secretaría de Salud.
También es epidemiólogo y tiene experiencia activa en esta área, porque también fue coordinador de Vigilancia Epidemiológica del IMSS, pues ha estado en esta institución desde 1998. Su salario: $154,472.
El doctor Mauricio Hernández Ávila registra haber ingresado al servicio público también en 1998 como Director de vigilancia epidemiológica y enfermedades de la Secretaría de Salud. Es estadista, médico, epidemiólogo y maestro en ciencias, actualmente es el director de prestaciones económicas del IMSS, el que ha dado los anuncios correspondientes sobre las incapacidades médicas ante la epidemia. Su salario bruto: $154,472.00
En la lista aparece la doctora Guadalupe Espitia Hernández, especialista en neumología y medicina interna del Instituto de Seguridad Social y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), quien recibe un sueldo bruto mensual de $19,186.94, según el portal nómina transparente.
En el equipo está la doctora Oliva López Arellano, quien dirige la Secretaría de Salud de la CDMX, médica especialista en programas comunitarios de atención a la salud y en epidemiología. Entre el repertorio de sus estudios aparecen artículos sobre espacios-población vulnerables y el impacto epidemiológico de las políticas de salud.
Oliva López Arellano es titular de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México. Foto: Cuartoscuro.
El director general de Promoción de la Salud, Ricardo Cortés Alcalá, médico cirujano y especialista en Epidemiología, también apoya. Él fungió como líder operativo del Centro Nacional de Enlace para Reglamento Sanitario Internacional, la Iniciativa de Seguridad Global en Salud y el Plan de América del Norte para la Influenza Animal y Pandémica. Su salario: $132,312.92
La doctora Alethse de la Torre Rosas, quien es la directora general del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y el Sida, experta en infectología y salud pública, ha coordinado equipos multidisciplinarios para responder ante epidemias. Colaboró junto a López-Gatell en el equipo que respondió a la influenza en 2009. Sueldo: $136,745
La médica cirujana Lorena Rodríguez Bores pone el toque sobre los temas de salud mental. Es especialista en psiquiatría y doctorado en salud mental pública. Es secretaria técnica del Consejo de Salud Mental. Su sueldo: 132 mil 312 pesos.
Lorena Rodríguez Bores es secretaria técnica del Consejo Nacional de Salud Mental. Foto: Especial.
Fruto de las alianzas institucionales que se construyeron, aparece el médico infectólogo de Petróleos Mexicanos, el doctor Freddy Rafael Domínguez; así como el mayor médico cirujano, Luis Felipe Madrigal Mendoza, en representación de la Sedena; y por la Semar, el teniente de Fragata, Víctor Gómez Bocanegra, también experto en epidemiología.
LOS SOLDADOS
De acuerdo con la Secretaría de Salud hay poco más de 400 mil especialistas médicos que laboran en las instituciones públicas de salud y que podrían dar la atención que se requiera en la contingencia.
Según sus datos son más de 69 mil médicos generales y familiares, casi 95 mil médicos especialistas, 26 mil residentes, 144 mil enfermeras generales, 36 mil enfermeras especialistas, 104 mil auxiliares de enfermería y cerca de 10 mil odontólogos.
En la estrategia de guerra, la Secretaría de la Defensa Nacional también puso a disposición de la contingencia a sus propias tropas: 16 mil 750 recursos humanos. En total mil 738 médicos cirujanos, mil 727 enfermeras, 884 oficiales de sanidad, 8 mil 152 tropas de sanidad, 649 cirujanos dentistas y 3 mil 600 personas que brindan apoyo sanitario.
Pero además se abrieron convocatorias tanto en la milicia como en el sistema de salud. La Sedena está contratando a 3 mil 694 profesionales de la salud, mientras que también está abierta la convocatoria para reclutar a médicos especialistas en terapia intensiva, urgencias, medicina interna, neumología, infectología y anestesiología.
fuente.-@AleCrail/(imagen/Milenio)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Tu Comentario es VALIOSO: