En el gobierno de la 4T,hay personajes que sostienen la interpretación de que, al desechar la controversia, el ministro de la SCJN González Alcántara “dejó las cosas como estaban” y por lo tanto se mantiene la decisión de la Cámara de Diputados de quitarle el fuero a Cabeza de Vaca, por lo que la Fiscalía General de la República está en posibilidad legal y constitucional de proceder en su contra.
Desde el consejero Jurídico, Julio Scherer, hasta la exministra de la Corte y secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, pasando por los líderes parlamentarios de Morena en el Congreso federal, Ricardo Monreal e Ignacio Mier, sostienen que la decisión del ministro no favorece al gobernador ni le mantiene el fuero constitucional.
Y es que, tanto el Congreso de Tamaulipas, como el propio gobernador acusado y hasta sus compañeros gobernadores de la Alianza Federalista, celebraron que los argumentos del ministro Juan Luis sostienen claramente que consideró improcedente la Controversia porque el mandatario de Tamaulipas “mantiene el fuero y la protección constitucional” tras la decisión que tomó la mayoría de los diputados locales de no homologar el procedimiento de desafuero aprobado en San Lázaro, con lo que, dice el propio ministro, cumplió con lo que le mandata el artículo 111 constitucional, que le pide recibir el fallo de la Cámara de Diputados “para lo que corresponda” y lo que corresponda, en la redacción de González Alcántara, es que el Congreso local decida “libremente y sin obstáculos” si homologa o no el desafuero, lo que equivale a aceptar o rechazar el desafuero del gobernador.
Un abogado de la 4T, muy cercano a Palacio Nacional, que nos pidió guardar el anonimato, nos mandó este razonamiento, por el que afirma no sólo que Cabeza de Vaca sí puede ser detenido por la FGR porque ya no tiene fuero, sino que incluso cuestiona la redacción y argumentación utilizada por el ministro González Alcántara:
“Los desechamientos dejan las cosas tal y como estaban, como si nunca se hubiera presentado juicio alguno; ahora el ministro se excede al intentar establecer una realidad jurídica haciéndolos pasar como 'argumentos del Desechamiento', pero el procedimiento para que los asuntos que llegan a la Corte tengan efectos constitutivos o declarativos de derechos, pasa por que sean votados por la Sala que le toque conocer. El ministro en un fast track se ahorra todo eso, no pasa a votación proyecto de resolución alguno y tampoco desecha en el fondo el asunto. La FGR puede detenerlo (a Cabeza de Vaca)”, sostiene ese jurista integrante del gobierno federal.
Así es que mientras en Tamaulipas y en varios estados de la Alianza Federalista celebran como un “triunfo del federalismo y la autonomía de las entidades federativas” el fallo del ministro González Alcántara y hasta el gobernador Cabeza de Vaca y sus abogados sostienen que el integrante de la Corte terminó dándoles la razón jurídica y constitucional con su desechamiento; en el gobierno federal están molestos y sostienen lo contrario, incluso con voces que le piden y urgen al fiscal Alejandro Gertz Manero que ya proceda penalmente y solicite a los jueces una orden de aprehensión contra el mandatario tamaulipeco.
Todo en medio de las campañas electorales enrarecidas y afectadas por la violencia, tanto del crimen organizado como del discurso y la confesa intromisión presidencial en los comicios federales y locales. ¿Alguien o algo pondrá fin a la controversia de la controversia?.