Visitanos tambien en:

miércoles, 15 de octubre de 2025

EL «FRACASO de MANUAL»: LA «FGR con AMPLIA y PROBADA EXPERTICIA en FRACASAR pierde Vs EX-FUNCIONARIOS de la FGR»…es abundante el desglose de torpezas.


El episodio desnuda, con precisión quirúrgica y cierto olor a crónica de derrotas anunciadas, la experticia de la Fiscalía General de la República en tropezar con su propio expediente. Este caso contra dos viejos cuadros de Jesús Murillo Karam —Vidal Díazleal Ochoa y Humberto Antimo Rivera— es un laboratorio perfecto para entender cómo se puede tener casi 100 millones de pesos en pagos cuestionados… y aun así salir con un proceso reducido al mínimo delito posible.


Un fracaso de manual

  • La apuesta inicial: inflar la imputación a cuatro delitos graves (fraude equiparado, peculado, asociación delictuosa y uso indebido de atribuciones), buscando colocar a los acusados en un cuadro de alta peligrosidad penal.
  • La caída: la jueza Beatriz Moguel Ancheyta, en marzo de 2023, les cortó las alas procesales: dejó vivos únicamente el delito de uso indebido de atribuciones y facultades.
  • El golpe final: el Primer Tribunal Colegiado de Apelación inhabilitó el amparo de la FGR porque no acreditó un daño patrimonial directo a la institución, requisito indispensable para que una persona moral oficial recurra a esta vía.

El colmo: el tribunal les recuerda que pueden seguir investigando los hechos, pero que el amparo no procede. En otras palabras, la estrategia jurídica se desplomó por no leer correctamente las reglas básicas de legitimación en un juicio de amparo penal.


Desglose de la torpeza

  1. Error de legitimación
    El tribunal reiteró lo que la SCJN ya había definido: una institución pública solo puede promover amparo penal si demuestra un daño patrimonial directo. La FGR no lo probó, así que ni siquiera entraron al fondo.
  2. Sobreacusar sin blindar pruebas
    Querían subir la apuesta de uno a cuatro delitos, pero la jueza determinó que no había elementos. Eso significa que, en etapa inicial, los expedientes no soportaban la acusación mayor. Un clásico de FGR: disparar en ráfaga y esperar que algo quede.
  3. Contratos y uso de partida
    Usar recursos de la Partida de Seguridad Pública y Nacional 33701 para fines ajenos (arquitectura, software, reactivos de ADN) puede ser irregular, pero la cadena probatoria y la justificación de fraude o peculado no se robustecieron.
  4. Estrategia de desgaste
    La fiscalía sigue diciendo que puede investigar más. El problema es que, después de este fallo, el margen procesal se redujo y cualquier acusación posterior deberá evitar ser considerada doble persecución (non bis in idem).

Radiografía política y técnica

Este caso es un retrato de cómo la FGR, sobre todo en asuntos con aroma a años del priismo institucional, juega más a la narrativa mediática que a la precisión jurídica. Técnicamente:

  • Persigue delitos vitrinas que suenan más fuertes que el que realmente puede probar.
  • Olvida requisitos procesales elementales, como la legitimación activa.
  • Se obsesiona con detonar un caso emblemático que, cuando llega al tribunal, se evapora por exceso de formalismo mal aplicado.

Políticamente, la derrota se inscribe en la misma franja de fracasos sonoros: acusaciones contra ex PGR que se desmoronan antes de llegar a juicio oral, dejando la impresión de que se investiga más por presión política que por solvencia probado-pericial.

Con informacion: ElNorte/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Tu Comentario es VALIOSO: