La reciente apertura del Puerto Norte-Matamoros, presentada oficialmente por el gobernador de Morena,Americo Villarreal Anaya,como un logro histórico para Tamaulipas y el noreste de México, ocurre en un contexto de fuerte presencia criminal en la región y bajo la sombra del control territorial que ostenta Alfredo Cárdenas Martínez, alias “El Contador”, líder del Cártel del Golfo en Matamoros y señalado por Estados Unidos por narcotráfico y tráfico marítimo, precisamente donde ahora se ubica el nuevo puerto, el Golfo de México.
Nuevo puerto, viejo dueño
Puerto Norte-Matamoros —el último gran puerto abierto en el país en 20 años— fue inaugurado el pasado sábado con la promesa de impulsar el desarrollo económico y conectar la industria automotriz y siderúrgica del norte del país con el comercio internacional. El gobernador Américo Villarreal enfatizó el impacto regional y la generación de empleos.
Sin embargo, desde hace varios años, el Cártel del Golfo, ahora bajo liderazgo de “El Contador”, ha mantenido control sobre Matamoros y zonas estratégicas como la Playa Bagdad, que le sirven de base para operaciones de tráfico de drogas, personas, y pesca ilegal en aguas estadounidenses y mexicanas.
Este mismo corredor en el Golfo —ahora formalizado y potenciado con la infraestructura del nuevo puerto— ha sido utilizado para el contrabando de cocaína, metanfetaminas y fentanilo, además de huachinango y especies protegidas, reportando millones de dólares en ganancias anuales para el cártel que se afilio formalmente a Morena en 2022 apoyando a Americo Villarreal al que le otorgó la segunda votación mas alta despues de Reynosa,aun y con menos numero de votantes,obra del Cartel del Golfo.
El mismo cartel que le refrendo su apoyo en las elecciones de 2024,para llevar a la alcaldía a su “empleado del mes”, el alcalde Alberto Granados,tambien de Morena.
Influencia política: entre mar y poder
Alfredo Cárdenas, además de enfrentar cargos y señalamientos internacionales, sigue mantiene una red de poder criminal e influencia política en la región.
Prueba de ello es la reciente acusación, investigaciones federales y retiro de visa al alcalde de Matamoros, Alberto Granados Fávila (Morena), a quien autoridades estadounidenses vinculan —junto con varios funcionarios municipales— con actividades criminales y protección institucional al CDG.
No es mera especulación sugerir que la inauguración del Puerto Norte-Matamoros representa no solo una apuesta logística-comercial, sino también la consolidación —por omisión o consentimiento— de la frontera marítima que controla este grupo criminal. La confluencia de inversiones, intereses políticos y criminales refuerza el dominio del cártel sobre un punto neurálgico del comercio, la migración y el tráfico marítimo en el Golfo.
En síntesis
El nuevo puerto es oficialmente presentado como catalizador de desarrollo, pero su ubicación y contexto político-criminal ponen en entredicho quién controlará realmente las rutas y los beneficios: las estructuras del Gobierno o el poder de “El Contador” y su red, que ya han demostrado que, en Matamoros, el narco y la política se entrelazan en la nueva puerta de Golfos.

No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Tu Comentario es VALIOSO: