A cuatro días de finalizar el año, esta columna va a tener pocos lectores. Y los que tenga difícilmente querrán, en medio del asueto invernal, dedicar su tiempo a alguna sesuda reflexión sobre el estado lamentable de la seguridad en el país.
Entonces, mejor hago lo que ya he hecho en otras ocasiones y les dejo algunas sugerencias para el periodo vacacional:
1. Si traen ánimo escapista pero aún siguen con ganas de leer sobre policías, criminales, delitos y violencia, pueden consultar esta lista de novelas policiacas, descritas por la compiladora de la revista Esquire como las mejores de todos los tiempos. Algunas selecciones son obvias, otras no tanto. En conjunto, da para un buen rato de emociones fuertes.
2. Tal vez lo suyo sea arrumbarse en un cómodo sillón frente a un televisor. Si ese es el caso, aquí va un listado de series policiacas, disponibles en Netflix, Amazon Prime o HBO. De las recomendadas, yo me quedo con The Wire, pero eso es gusto personal.
3. Algunos tal vez persistan en el gusto de reflexionar sobre temas de política pública. En ese caso, sugiero que lean este extraordinario libro de Thomas Abt, reseñado en alguna ocasión en esta columna. Abt es un destacado criminólogo de la Universidad de Harvard que se ha puesto como misión en la vida la reducción de la violencia letal en entornos urbanos. Y en este volumen, presenta un menú de propuestas concretas y realistas para lograr ese fin.
4. ¿Por qué Colombia pone los muertos en la guerra contra las drogas? Francisco Thoumi, un gran economista colombiano que ha estudiado como pocos el narcotráfico, se hace esa pregunta y responde en este artículo de hace una década con una interrogante más que subversiva: ¿será porque también pone a los asesinos? Huelga decir que la reflexión de Thoumi es tan válida para México como para Colombia.
5. Dada la discusión reciente sobre la posible inclusión de grupos criminales mexicanos en la lista estadounidense de organizaciones terroristas extranjeras, vale la pena recuperar este muy buen ensayo de Patrick Corcoran, publicado en 2012 en Insight Crime, sobre las diferencias entre Osama Bin Laden y Joaquín El Chapo Guzmán.
6. Siguiendo con Insight Crime, pueden leer esta investigación sobre el rol que juega México en el tráfico internacional de fentanilo, la cual incluye una interesante reflexión sobre el futuro de las drogas sintéticas. Y si les interesa el tema, pueden también consultar este reporte de la RAND Corporation sobre la epidemia de fentanilo en Estados Unidos.
7. Si su gusto se orienta hacia el espionaje, recomiendo esta historia de la CIA, obra del periodista estadounidense Tim Weiner. No quiero arruinarles la experiencia, pero basta decir que no es un retrato muy halagüeño de la mítica Compañía. Sobre un tema similar, vale también la pena leer esta historia del Mossad, el servicio de inteligencia exterior de Israel. Para rematar, pueden consultar esta lista de diez grandes películas sobre espías (y sí, incluye una de James Bond).
8. Sobre el tema de la narcocultura, pueden consultar esta historia de los narcocorridos, escrita por Juan Carlos Ramírez Pimienta. También vale la pena leer este libro de Andrew Chestnut sobre el culto a la Santa Muerte y su asociación con el narcotráfico.
9. Por último, van las recomendaciones musicales: en primer lugar, va la oscura, aunque extrañamente alegre, Cocaine Blues del gran Johnny Cash. Y sobre la misma sustancia, no se puede dejar de mencionar Cocaine, escrita originalmente por J.J. Cale, pero popularizada por el rey de la guitarra eléctrica, Eric Clapton. Y, de remate, va una lista de las 40 mejores canciones de rock sobre el tema de las drogas.
Felices fiestas.
fuente.-@Ahope/
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