La imagen ya no sorprende, solo nos confirma, que aquellos que se rasgan las vestiduras hablando de austeridad, mientras lo hacen se prueban las mejores camisas en las vitrinas de la hipocresía. Con la boca critican al fifí… pero con los pies pisan las mismas alfombras del lujo europeo.
Porque que bonita es la austeridad… cuando se vive de viaje y de shopping. En el discurso son del pueblo; en la práctica, son de boutique.
El funcionario que nuevamente fue exhibido en Europa de Shopping y que aparece en las fotos ,es Hugo Fonseca Reyes,es actual subsecretario de la Secretaría de Educación en Tamaulipas (SET), miembro de Morena de la administración de Americo Villerral y fue exhibido hoy desde las redes por el periodista Victor Contreras,quien lo ubica en Madrid,España.

Y efectivamente, no es ningun infundio, el funcionario cercano a la familia del gobernador,que presume selfies con la Presidenta Claudia Sheinbaum,anda vestido como suele aparecer en algunas de las imagenes que publica desde sus redes.
Muy coincidente y claramente identificable dentro de la tienda UNIQLO de Madrid, vestido con la tipica camisa guinda.

Detalles del entorno y la marca:
UNIQLO es una firma japonesa de moda reconocida mundialmente por su estilo minimalista y prendas de calidad a precios accesibles, pero en Europa su presencia en avenidas exclusivas la ha convertido en un símbolo de consumo cosmopolita, especialmente entre jóvenes profesionales y clases medias-altas.

La tienda de La Castellana destaca por su concepto arquitectónico: dos niveles, barandales de cristal y un diseño moderno y luminoso, acorde con la imagen de lujo contemporáneo, eficiencia y elegancia que busca la marca.
Los precios, visibles en euros y la señalética típica de la marca, confirman la localización exacta y el tipo de consumo.

UNIQLO no solo es un referente en moda urbana global, sino que para muchos representa una experiencia de compra aspiracional y, desde su llegada a España, ha sido noticia por atraer colas de compradores y lanzamientos exclusivos.
El contraste es evidente: mientras en México, el discurso oficial de la 4T (Cuarta Transformación) y Morena privilegia la austeridad republicana, aquí observamos a un alto funcionario educativo disfrutando de compras en plazas comerciales internacionales, lo que genera un claro choque simbólico entre el discurso y las acciones privadas.
Esta escena pone en evidencia la disonancia entre el relato público de austeridad de las autoridades y las prácticas personales de ciertos funcionarios,
Las tiendas de lujo y marcas internacionales como UNIQLO se convierten así en escenarios donde se ponen a prueba (y se exhiben) los principios de quienes dicen representar un nuevo modelo político.
Y que tiene de malo si es con su dinero ?
El asunto de fondo no es si un funcionario puede gastar su dinero en una tienda de moda internacional, ni si tiene derecho a viajar o a vestirse bien. El verdadero problema radica en la incongruencia entre sus acciones privadas y el discurso público que lo llevó al poder.
La llamada “Cuarta Transformación” (4T) y Morena han construido su legitimidad a partir de una narrativa de austeridad republicana, empatía con las mayorías y rechazo del lujo y el privilegio en el ejercicio del servicio público. Sus líderes y funcionarios repiten una y otra vez que “no somos iguales”, que han venido a transformar la forma de ejercer el poder y a erradicar viejos vicios de la clase política.
Cuando un alto funcionario educativo de Tamaulipas es captado de compras en una tienda de moda global y vanguardista —recién inaugurada y ubicada en una exclusiva avenida de Madrid—, el escándalo no yace ni en el boleto de avión, ni en el precio de la ropa, ni en la tienda en sí. El verdadero choque es simbólico y ético: esa imagen contradice el relato de sencillez, sacrificio y cercanía con el pueblo.
Cada gesto de consumo aspiracional —más aún en el extranjero y en espacios asociados al lujo— erosiona la credibilidad de quienes han hecho de la austeridad, la “modestia” y la crítica al despilfarro su bandera.
No es un asunto de “pobreza franciscana” llevada al extremo, sino de congruencia pública y percepción social. En la política, los símbolos importan tanto como las palabras: quien exige sacrificios a los demás y promete diferenciarse de los privilegiados, está obligado a sostener esa diferencia en los hechos —o perderá toda autoridad moral para exigirla.
Por eso estas imágenes resultan tan potentes y tan polémicas. No se trata de un tema de consumo privado; es la incongruencia entre el relato fundador y las acciones cotidianas de sus protagonistas la que vuelve noticia cada detalle de estos farsantes cuatreros.
Con informacion: @Redes/




No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Tu Comentario es VALIOSO: