Más allá de los hijos del Chapo Guzmán, en México existe una nueva generación de “Babynarcos” dispuestos a protagonizar los baños de sangre que sean necesarios para no perder el negocio y territorio heredado por sus padres. La edad y el género ya no es un problema en esta nueva era de los cárteles.
En México está llegando a su fin la era de los famosos señores del narco. Aquellos cabecillas que tejieron la historia del tráfico de drogas a partir de los años noventa están muertos, en la cárcel o con enfermedades crónicas que no les garantizan larga vida.
En esta situación se encuentran las dos organizaciones criminales más poderosas del país: el Cártel de Sinaloa (CDS) y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En el caso del primero, su cofundador, Ismael “El Mayo” Zambada, además de tener 75 años estaría enfermo de diabetes. Mientras que, en el segundo, si bien es cierto que Nemesio Oseguera Cervantes es más joven, según reportes de inteligencia, hace tiempo sufre de problemas hepáticos y hasta se habría sido sometido a un trasplante de riñón. Puesto que El Mencho ha tratado de mantener su estado de salud escondido, la prensa mexicana en más de una ocasión ha especulado sobre su muerte.
Mientras los viejos líderes empiezan a desaparecer, sus hijos, empiezan a conformar una generación que para ir en concordancia con los términos de moda, podrían llamarse los “Neponarcos” o “Nepobabies del narco” puesto que hacienden al poder por sus nexos familiares.
La Hija Escondida del Mencho
Laisha Michelle Oseguera González es una hija del Mencho, de quien durante muchos años se especuló si existía o no, ya que sólo se tenía conocimiento público de dos hijos (Jessica Johana y Rubén).
Laisha Oseguera
Su existencia se hizo pública en el año 2021, cuando ella y su pareja, Christian Fernando Gutiérrez Ochoa, habrían ejecutado el secuestro de dos elementos de la Secretaría de Marina (Semar) el 17 de noviembre de ese año.
La joven tienen actualmente 22 años de edad, y de acuerdo con una carta dirigida a la jueza Beryl A. Howell, que forma parte de expediente de su hermana Jessica durante el juicio que enfrentó en USA, hasta 2019 estudiaba el tercer semestre de la carrera de administración de empresas. A pesar de su corta edad, en México ya enfrenta una orden de aprehensión por el secuestro de los marinos. En las filas del CJNG se encuentra también Juan Carlos Valencia González “El 03”, que presuntamente sería hijastro de Oseguera Cervantes y hermanastro de Laisha.
Valencia es uno de los criminales más buscados por la justicia de Estados Unidos desde 2020 cuando el Departamento de Justicia ofreció una recompensa de 5 millones de dólares. Juan Carlos es hijo de Rosalinda González Valencia, quien de acuerdo con filtraciones del famoso Guacamaya Leaks ya no es la actual pareja del Mencho. El 03 está a cargo de uno de los grupos de élite del cártel que pelea los territorios de Guanajuato, Michoacán, Jalisco y Zacatecas.
Los Misteriosos Benjamines
A la lista se suman los llamados “Benjamines”, quienes son hijos de los fundadores del Cártel de Tijuana, los hermanos Arellano Félix, específicamente de Benjamín y Juan Carlos, ambos presos en Estados Unidos. De acuerdo con el semanario Zeta de Tijuana, los nombres y rostros de los integrantes de este grupo criminal son un misterio para las autoridades mexicanas, sólo se sabe a qué un tiene el alias de “El piloto”.
Los “Neponarcos” del Cártel de Sinaloa
“Los Chapitos”, como se le llama al interior del CDS a los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, no son los únicos narcos herederos de la organización criminal. Desde 2012 Estados Unidos fichó a cinco de los hijos de Juan José Esparragoza “El Azul”, otro de los cofundadores del Cártel de Sinaloa y quien oficialmente no se ha podido establecer si vive o muere.
En el año 2014 la DEA junto con la Marina comenzó la Operación Narcopolo para desmantelar al Cártel de Sinaloa, a los Esparragoza no se les tocó: cayó “El Chapo” y una línea de primer nivel de la organización Zambada, pero los azules se mantuvieron intocables y con bajo perfil.
José Juan Esparragoza Jiménez, El Cora, está detenido en una prisión mexicana, Y otro más, Juan José Esparragoza Monzón, presuntamente murió en 2021 por complicaciones relacionadas con el COVID-19, sin que hasta ahora exista confirmación oficial. Otro de los varones de la dinastía, Cristian Iván Esparragoza Gastélum fue detenido en 2015, en Sinaloa.
Sin embargo, las hermanas Brenda Guadalupe y Nadia Patricia Esparragoza fueron señaladas por el Departamento de Justicia de Estados Unidos por presuntamente formar parte de una red de lavado de dinero del Cártel de Sinaloa, y estar al frente de dos empresas en Jalisco.
Cuando se habla de descendientes del narco, no se puede ignorar a los hijos de El Chapo, que, a pesar de la reciente detención de Ovidio, el 5 de enero, aún quedan tres de sus hijos al frente de la fracción que dirigen al interior del CDS: Iván, Jesús Alfredo y Joaquín por quienes las autoridades estadounidenses ofrecen 5 millones de dólares de recompensa por cada uno.
Aunque hasta ahora no ha sido ligada a la actividad criminal de su padre y hermanos, otra a la que podría considerarse como integrante de la dinastía “neponarco” es Alejandrina Gisselle Guzmán Salazar, quien busco explotar de manera comercial el nombre de su padre al lanzar la marca de ropa y accesorios para dama y caballero “Chapo 701” que vendía a través de una tienda en línea.
A la ropa sumó también una cerveza lager artesanal con la figura de su padre, que cumple una condena a cadena perpetua en Estados Unidos. Sin embargo, el link de la tienda en línea elchapoguzman.com ya no está en servicio.
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