La Cámara de Diputados aprobó crear la Ley Federal para Prevenir y Sancionar los Delitos Cometidos en materia de Hidrocarburos, que castiga hasta con 25 años de prisión el robo de gasolina y la ordeña de oleoductos, y hasta con 18 años de cárcel a quienes alteren los sistemas de medición de las gasolineras para vender litros incompletos.
La Comisión de Justicia suprimió, sin embargo, los artículos que preveían penas carcelarias para quienes obstruyan o impidan el acceso o funcionamiento a ductos, equipos, instalaciones o inmuebles de la industria petrolera, pues a juicio de las bancadas de izquierda significaban la criminalización de la protesta social.
Con dicho cambio se logró que legisladores del PRD y de Morena retiraran las reservas al dictamen, con lo cual la discusión se agotó en menos de una hora en el Salón de Plenos de San Lázaro.
De acuerdo con el documento, el robo de combustibles se ha incrementado significativamente en los últimos años, pues en 2013 se contabilizaron 3 mil 267 denuncias; en 2014, 5 mil 90, y en lo que va de 2015, 5 mil 561.
El proyecto fue avalado con 340 votos a favor, siete en contra y 54 abstenciones, por lo que fue turnado de manera inmediata al Senado de la República para su ratificación.
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